Muchas críticas se ha llevado el equipo castellonense en las últimas fechas por su pobre imagen y escasa intensidad que ha ofrecido durante los noventa minutos. La bomba explotó en la ulterior jornada con la contundente derrota en El Madrigal ante el Espanyol por 0-3; un duelo donde el equipo dirigido por Marcelino no tuvo ninguna opción de entrar en el choque -salvo el primer tramo del segundo tiempo- tanto por méritos de la entidad catalana como por desméritos de la entidad amarilla.

En este nueva jornada, Getafe y Villarreal abrirán la jornada dominical en tierras madrileñas en un estadio que trae buenos recuerdos al submarino amarillo, por ser el escenario que le permitió vivir la primera clasificación de una semifinales de la Copa del Rey. No obstante, el choque será antagónico, ya que por aquél entonces el Villarreal era el equipo enrachado frente a un Getafe algo sonámbulo por la categoría buscando su lugar. En este encuentro, el Getafe es el equipo enrachado y el Villarreal una alma perdida.

El gol, el huevo de oro particular

La mayor preocupación en el ambiente del equipo castellonense es en la sequía goleadora que ha entrado el equipo, incapaz de anotar un tanto desde que ganara por 4-1 al Celta de Vigo. Cuatro jornadas son demasiadas para un equipo acostumbrado a hacer disfrutar al aficionado con su juego combinativo y de transiciones rápidas y, que además, ha visto como sus delanteros han perdido la chispa, sobre todo de Vietto, que estaba siendo la piedra angular en la delantera amarila.

El gol se ha convertido en una especie de huevo de oro que está comenzando a subir su valor jornada tras jornada, ante la desesperación del Villarreal de hacerse con él para solventar la situación y volver a sumar tres puntos que le mantengan alerta ante el peligro que supone tener al Málaga a menos de seis puntos. No obstante, Marcelino tampoco está consiguiendo dar con la tecla para que sus delanteros vuelve a atemorizar a las defensas rivales. Incluso, ha probado varias parejas en la delantera, pero sin éxito.

A diferencia del resto de la temporada, el equipo ha dado su peor versión ante su afición encajando cinco goles y siendo incapaz de robar la posesión al rival. Ante el Sevilla, el ritmo de juego fue beneficioso para los andaluces que se mostraron superiores. La diferencia frente al Espanyol fue la escasa actitud del equipo de creer que podía ganar el encuentro tras el primer tanto de Caicedo.

El éxito de la calma

Tras la gran tormenta que acechó Getafe en medio de la temporada con las marchas de Quique Sánchez Flores y Sammir, el conjunto madrileño ha logrado devolver la calma a sus aficionados con un gran rendimiento en las últimas jornadas situando a la entidad lejos de la zona de descenso y con la mirada puesta en el próximo campeonato.

El gran logro que ha cosechado el conjunto azulón ha sido el lograr llevarse los duelos ante sus principales competidores, Elche y Deportivo. Dos equipos que se encontraban en una dinámica ascendente, pero que no pudieron ante el equipo madrileño. Seis puntos de gran valor, eso sí con mucho sufrimiento, le han catapultado a rozar la salvación y la permanencia una temporada más en Primera División.

El Villarreal, favorito para las estadísticas

Esta temporada ambos equipos se han enfrentado en tres ocasiones con todo victorias para el conjunto castellonense. A partir del claro dominio de este curso, el submarino amarillo ha ganado 16 de los 24 partidos (67%) que han enfrentado ambos conjuntos.

El ulterior choque en el Coliseum fue como consecuencia de la vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey. Un partido entrabado con muchos cambios en la alineación. La noche fría hizo juego con un fútbol lento y aburrido. Al final, un solitario gol de Gerard Moreno certificó el pase a unas históricas semifinales.

Convocatoria

Getafe: Jona, Guaita; Alexis, Roberto Lago, Vigaray, Arroyo, Velázquez, Naldo; Pedro León, Lacen, Sarabia, Freddy, Emi, Álex Felip, Diego Castro, Juan Rodríguez; Álvaro Vázquez y Babá.

Villarreal CF: Asenjo, Juan Carlos; Mario, Bailly, Musacchio, Jaume Costa, Rukavina, Jokic, Dorado; Trigueros, Pina, Jonathan dos Santos, Moi Gómez, Cheryshev, Campbell; Uche, Gerard Moreno y Giovani.

Posibles alineaciones