La relación entre el Tottenham y Roberto Soldado está rota. El jugador quiere salir de Inglaterra y el club inglés no quiere continuar el romance, venido a menos en estos dos años. Soldado llegaba a la capital londinense como uno de los mejores arietes del momento; 30 goles en su última temporada en el Valencia le avalaban y el nuevo fichaje presagiaba un futuro prometedor en la Premier League. Pero a veces no todo sale como uno quiere.

El jugador quiere los minutos que no tiene en Londres

Los agentes del jugador están buscando una salida factible para el jugador en el plano deportivo y que sea viable económicamente. Según el diario El Periódico Mediterráneo, el deseo del jugador sería volver a la Liga BBVA y el Villarreal podría ser uno de los equipos que se ajustan a las pretensiones del jugador. Al parecer, los contactos entre los representantes del jugador (los hermanos Alberto y Lorenzo Toldrá) y el consejero delegado del club amarillo (Fernando Roig Negueroles)podrían haber comenzado ya.

El problema: el coste del traspaso y la ficha

El club castellonense está dispuesto a hacer un gran desembolso por un "9" de cara a la próxima temporada, pero tampoco pueden hacer un despilfarro. En Vila-real espera que el Tottenham baje las elevadas pretensiones de hacer caja con Soldado, al que también se le exigiría un bajada en la ficha. El club inglés pagó por él 30 millones de euros hace dos años, pero la situación no es la misma que la de entonces.

El Villarreal puede negociar hasta cierto punto con el Tottenham, ya que la economía del "submarino" no es una colonia de oro. Ahora mismo las posturas son lejanas, y mientras otros clubes como el AC Milán o el Galatasaray preguntan en las oficinas de White Hart Lane por la situación del ex del Valencia.

El nombre de Soldado resuena en las oficinas de El Madrigal, aunque ahora mismo el fichaje parece una utopía.