Pese a realizar un óptimo inicio liguero, el conjunto perico ha ido diluyendo sus prestaciones en las últimas fechas. Tras la inesperada destitución de Sergio González el 14 de diciembre después de la derrota en Balaídos, el elegido para hacerse con las riendas del combinado blanquiazul fue Constantin Galca, precisamente un ex-jugador de ambos equipos. Los pericos ocupan actualmente la decimocuarta posición con 21 puntos, 5 por encima de los puestos de descenso. Con la consecución de 1 punto de los últimos 12 posibles, sumado a las dos derrotas coperas ante el eterno rival, hacen de este partido una gran final para los locales.

Prima la irregularidad 

Bien es cierto que la llegada del nuevo técnico supuso una inyección de moral para jugadores y afición. El "efecto Galca" surtió efecto en su "feudo" tras su estreno con victoria ante Las Palmas (1-0) y el empate en el derbi ante el F.C Barcelona. Lejos de Cornellá, las cosas son bien distintitas, el Espanyol cosecha tres derrotas seguidas con Galca al mando y un total de 9 de 11. La falta de continuidad está siendo uno de los problemas de los pericos, capaces de lo mejor y de lo peor.

Los blanquiazules suman nueve derrotas en 11 encuentros como visitante

De hecho, desde el pasado 23 de septiembre no enlaza una racha de dos victorias consecutivas. Además, 15 de los 21 puntos conseguidos han sido ante su afición. Cuatro victorias, tres empates y dos derrotas es el balance. Real Madrid y Sporting de Gijón han sido los únicos capaces de vencer en Cornellá durante la primera vuelta.

El mismo pasado fin de semana, los pupilos de Galca se adelantaron en el Coliseum por medio de un tanto de Hernán Pérez, que se ha consolidado en el carril diestro. Muy poco duró la alegría, en tan solo 10 minutos, el Getafe le dio la vuelta al electrónico. Los últimos choques han dejado patente una clara falta de confianza y de regularidad por parte de la plantilla blanquiazul.

Implantación del toque sobre el físico

El estilo de juego del combinado catalán  ha sufrido un cambio en su filosofía. Dichas variaciones necesitan  un periodo de adaptación y de asimilación de conceptos por parte de una plantilla confeccionada para otro practicar otro fútbol. Sin agresividad ni concentración pasa a ser un rival vulnerable en muchos aspectos. La formación inicial viene siendo un 4-2-3-1, aunque ha manejado otras variantes como el 4-4-2. 

4-2-3-1 y 4-4-2 han sido los planteamientos tácticos que ha probado Galca hasta el momento

Pau López, ha sido el encargado de intentar olvidar a Kiko Casilla. Un arquero dotado de buen nivel técnico, pero a veces carece de seguridad. Carril diestro para Javi López, un jugador de oficio. En el lado contrario un Víctor Alvárez que se prodiga más en la faceta ofensiva. En el centro de la zaga, Álvaro es seria duda. Raillo y Enzo Roco podrían ser de la partida. El chileno destaca por su potencia y buena colocación, pero sufre en velocidad.

Los dos centrocampistas sufren a la hora de sacar el balón jugado. Pape Diop, un jugador físico y destructivo. Abraham no acaba de llevar la manija del equipo. Otra opción más creativa es la del canterano Jordán.

En la parte atacante, Hernán Pérez se perderá el choque por sanción. Un veterano como Salva Sevilla podría tener un hueco en el lado izquierdo. Marco Asensio, a sus 20 años, es un jugador capaz de decidir un partido, destaca por su potencia y talento. Zurdo con buena visión de juego, así como disparo y desborde. Llamado a ser uno de los jugadores españoles del futuro, la zaga amarilla deberá estar pendiente. En la parte de arriba Gerard Moreno y Felipe Caicedo. El ex-amarillo tiende a bajar a recibir y a combinar debido tanto a su movilidad como a su visión. Como goleador Caicedo y Hernán Pérez se reparten 10 de los 18 goles con 5 para cada uno. El ecuatoriano ha demostrado su enorme peligro durante los últimos años y ya marcó al Submarino en la primera vuelta.