El nacido en Silla (1967), es uno de los principales valuartes de la magnífica situación que atraviesa el Villarreal B. Desde la sombra y el trabajo ha implantado una estilo de juego solvente y atractivo. Tras su paso por el Villarreal C, en tan solo un año y medio en la casa amarilla ha conseguido llevar al Villarreal B a ser uno de los aspirantes al ascendo a Segunda División. El Mini Submarino es líder con 50 puntos, cuatro por encima del Reus Deportivo. El valenciano compareció en una entrevista concedida a SPORTBASE (EB).

En primer lugar, el mister comentó respecto a sus inicios en este mundillo, en este caso como futbolista: "Empecé en mi pueblo, en el Silla, y ya pasé en edad juvenil al Valencia donde pasé siete años. Fui un trotamundos: Torrent, Hércules, de ahí al Extremadura, luego al Levante de Juande Ramos en el que estuvimos a punto de ascender, Castellón, Murcia, Gandía… Lo dejé a los 34 años, y ya me centré en la faceta de entrenador".

Asimismo, realizó una valoración sobre el cambio que supone el hecho de jugar a entrenar: "Hasta que no entrenas no te das cuenta del giro de ciento ochenta grados que supone. Cuando eres jugador piensas solo en lo tuyo, cuando eres entrenador piensas en lo que necesitan veintidós o veinticinco personas. Al tratar con jóvenes, la idea es siempre la de ayudarles y de que entiendan de la necesidad del éxito colectivo".

En relación a su éxitosa campaña con el Villarreal B sentenció que el grupo de Segunda B es muy parejo, y que el equipo está manteniendo una regularidad poco habitual en un filial con tanto jugador joven: "La realidad dice que el nivel de juego es muy bueno, nos hemos mantenido en los dos o tres primeros puestos desde que arrancó la temporada y queremos seguir así".

"A los jóvenes hay que tratarlos de manera especial, están en la última etapa de su formación y la primera competitiva. El equilibrio se logra inculcándoles que sólo lograrán sus objetivos individuales a través del rendimiento colectivo. Somos un equipo, hay que ayudarles a que compitan al máximo", comentó sobre su influencia sobre estos jóvenes.

Por otra parte, Paco López recordó su llega a la entidad amarilla: "El el Villarreal C iba último en Tercera División. Me llamó Fernando Roig y, aunque la idea no era entrenar en Tercera, tenía ganas de entrenar en una de las mejores canteras. Asumí el reto y, a final de temporada, estuvimos cerca de jugar promoción de ascenso. El año siguiente me hice cargo, y a fecha de hoy puedo decir que la experiencia está siendo espectacular. Este año no podemos pedir más: líderes y con dos o tres jugadores que ya han debutado con el primer equipo".

En cómputos generales, destacó la visión de la directiva amarilla: "El objetivo principal del club es formar la mayor cantidad de jugadores posible para que pueda jugar en el primer equipo. Es un ejemplo a seguir".