Marcelino comentaba la temporada pasada que, ante los grandes, preferiría jugar peor y competir mejor para así lograr unos puntos que le permitieran mirar hacia arriba en la clasificación. Y en esta temporada sus chicos se están aplicando y para ello, lo primero que han hecho es cerrar a cal y canto su portería. Y es que el Villarreal presenta a estas alturas de competición los mejores números de toda su historia. Los 18 goles encajados en en estas 23 jornadas disputadas convierten a éste Villarreal en un equipo histórico. Para encontrar unas cifras similares hay que remontarse a la temporada 2004-05, con Pellegrini en el banquillo, cuando en tal jornada como la actual el conjunto amarillo encajaba solo 20 goles. Formaban parte de aquella plantilla jugadores de la talla de Pepe Reina, Javi Venta, Quique Álvarez o Gonzalo Rodríguez.

Los de Marcelino tan solo han encajado 18 goles en 23 jornadas

El Villarreal ha blindado por completo los dominios de Areola en 10 ocasiones en lo que va de Liga, una marca que esta temporada solo se ve superada por el Atlético de Simeone y, solo por un encuentro, por el líder, el Barça. Ni siquiera el Madrid, que completa el cuarteto de posiciones Champions, está pudiendo alcanzar la excelencia defensiva de los de Marcelino, que han basado 25 de sus 45 puntos en el cero en su casillero. Pero incluso en las principales ligas de Europa hay pocos equipos capaces de mejorar los datos de los hombres de Marcelino. En Inglaterra serían el equipo menos goleados, en Alemania solo les superaría el Bayern al igual que en Francia el PSG, mientras que en Italia, una liga tradicionalmente defensiva, solo se verían superados por Juventus e Inter.

La gran temporada de Alphone Areola, el creciemiento imparable de Mario, la recuperación de Musacchio, la madurez de Víctor Ruiz y el aplomo de Jaume Costa, combinado con el impagable apoyo de Bruno Soriano en el pivote están haciendo que el Villarreal sea un equipo ya no solo difícil de ganar sino incluso de golear.