A poco más de 24 horas de que el balón vuelva a rodar en El Madrigal, Ikechukwu Uche ha pasado por los micrófonos de Levante El Mercantil Valenciano, donde ha tenido oportunidad de hacer balance de su paso por Vila-Real y de hablar de sus últimos meses en México, de su llegada al club malacitano y del fútbol en su país de orígen. Como el destino es caprichoso, ocho meses después de que abandonara la nave de Marcelino, tras tres exitosas campañas de amarillo, el nigeriano podría debutar con la elástica blanquiazul precisamente ante la afición que le alentó esas últimas campañas. El nuevo punta malacitano habla de esos tres cursos como sus "mejores años", de los que guarda un "buen recuerdo" y donde conoce "mucha gente". Para el nuevo '8' malacitano, sus mejores recuerdos en Vila-Real son los del ascenso y los de su temporada de retorno a Primera, donde hicieron "un gran año". "Está muy reciente mi estancia allí. Para mí es un partido especial", asevera el punta.

Una vez finalizada la pasada temporada, su peor campaña en cuanto a números con la camiseta 'groguet', Uche decidió poner punto final a su estancia en La Plana. Partía a México, a un Tigres que realizaba, ese mismo junio, unos grandes esfuerzos económicos para traer a futbolistas de nivel europeo como Gignac, un ex-bético como Rafael Sobis, el propio Uche o Javier Aquino, ex-compañero suyo en Vila-Real: "Mi intención siempre era la de seguir. Y aunque no fuera en el Villarreal, hacerlo en España. (...) Me salió la oportunidad de salir a México y me gustaba la idea de probar esa experiencia. Está bien salir un poco, conocer sitios y a ver cómo va".

Esa aventura, la del desembarco azteca, no le fue tan bien a Uche como habría esperado, principalmente por unos problemas de rodilla que venía arrastrando desde su salida de España y que sólo le permitieron disputar un partido: "Cuando llegué allí todo el mundo sabía que llegaba con molestias en la rodilla, pero gracias a Dios todo eso quedó atrás porque ya estoy bien. Pero cuando jugué rompí el isquio". Pese a todos esos problemas físicos, el nigeriano es optimista y manda un mensaje positivo a la afición malacitana: "Lo importante ahora es que estoy entrenando y sintiéndome bien". Sin rencores, tampoco, a su paso por Tigres, que considera "una buena experiencia". "Ha sido bonito conocer la Liga de allí y su gente", asegura el delantero.

Se encuentran dos clubes con trayectorias bastante dispares: por un lado, un Villarreal que se situó en la cabeza de la tabla desde el arranque y de la que no ha bajado prácticamente durante toda la campaña, algo que, según el propio Uche, se ha conseguido "no por suerte, sino por trabajo", con "la misma filosofía de juego" y con "un gran entrenador para mí". En el otro lado está un Málaga que comenzó el año con apenas dos puntos en los primeros cinco partidos y que se ha levantado hasta ocupar, actualmente, la décima posición en la tabla, con un colchón de nueve puntos sobre el descenso. El punta llega a la Costa del Sol para "intentar ayudar y trabajar para el equipo". Respecto a su rol e importancia en el equipo blanquiazul, con un Charles en un gran estado de forma y que parte como titular, Uche dice estar "para lo que haga falta. Al final el que decide es el míster. Ve a cada uno a diario y ve a quien puede empezar y a quien puede hacerlo desde el banquillo. Tengo que trabajar para estar disponible e intentar coger la idea que él quiere de mí", declara el nigeriano.

Respecto a la posibilidad de volver al combinado de Nigeria, el punta se muestra prudente: "Lo que quiero hacer es jugar bien y la selección siempre es un premio. Lo primero es hacerlo bien aquí". Precisamente cuando habla de sus orígenes, el punta se declara "muy afortunado. Las condiciones en África no son como aquí, no hay instalaciones, no hay apoyos. Y cuando uno de allí sale y lo hace bien, siempre es motivo de orgullo. No es fácil. No se pueden hacer futbolistas como aquí".