El vicepresidente del Submarino Amarillo habló sobre la buena racha liguera. "Llevamos catorce jornadas sin perder en La Liga, nos están haciendo muy pocos goles". Opina que "la gente está trabajando muy bien, tanto el cuerpo técnico como los jugadores están muy concienciados de lo que hay que hacer".
Todo esto ha llevado al Villarreal a ocupar la cuarta plaza del campeonato liguero a solo dos puntos del tercer clasificado, el Real Madrid. No obstante, esta cercanía con una posición que otorga la clasificación directa para la Champions League, dejando por debajo a uno de los mejores equipos del mundo no provoca "una preocupación enorme" en Llaneza. El directivo está más interesado en "que el Sevilla no nos coja y luego ya veremos". Con respecto a los objetivos en Liga, la idea quedó muy clara. "El objetivo no es quedar cuarto, es estar en Europa. Es decir, quedar entre los siete primeros, pero como se están dando las cosas parece que podemos conseguir algo más. Si podemos ser cuartos, es mejor que quintos, aunque terceros es mejor que cuartos".
Tras repasar la situación liguera, Llaneza quiso ir más allá hablando sobre la Europa League, una competición que, según él, empezó "no muy bien", debido a que el equipo pasó la fase de grupos "pero no como primeros, que es como deberíamos haber quedado". Sin embargo, cree que se está "trabajando muy bien" y opina que "la eliminatoria ante el Nápoles han sido dos grandes partidos".
No quiso irse sin resaltar el buen momento que se vive en el club al completo, más allá del primer equipo. "Estamos en un momento muy dulce. Vamos los cuartos, el B va primero, el C va el quinto en Tercera División con una media de 19 años. Tenemos en todas las categorías jugadores internacionales, creo que no se puede pedir más, es decir, el balance es muy positivo". Para él, todo el mérito recae sobre el estilo que predomina en la institución amarilla, un estilo "muy fijo a la hora de trabajar" que se "está llevando muy bien".
Para terminar, se mostró "orgulloso" de sus jugadores y habló sobre el último partido de Liga ante el Celta en Balaídos, en el que se consiguió un empate "difícil y complicado". De cualquier forma, ese punto ya está conseguido y "ahora hay que intentar ganar a Las Palmas y seguir cada día trabajando".