Esperanza a pesar de la remontada. El Villarreal se puso muy pronto por delante en el partido gracias a un gol de Forlán, pero acabó cayendo en San Siro con goles de Adriano y Obafemi Martins. No obstante, el 2-1 mantiene intactas las esperanzas del Villarreal de jugar las semifinales de la UEFA Champions League.

Riquelme estrelló un balón en el larguero y los de Manuel Pellegrini acabaron el partido volcados arriba, pero no lograron hacer subir el empate al marcador del Estadio Giusseppe Meazza. El Madrigal decidirá quién continúa avanzando en el sueño europeo.

Forlán lo puso de cara

El encuentro comenzó de una forma inmejorable para el Villarreal. Aún no se había cumplido el primer minuto de juego cuando Diego Forlán introducía el balón en la portería después de que Toldo desviara el disparo de José Mari, que había recibido un magistral pase de Juan Román Riquelme.

Foto: elmundo.es
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Si rápido llegó el tanto de Forlán, rápido llegó la respuesta del Inter. Los "neroazzurri" se hicieron con el balón y comenzaron a llegar los primeros acercamientos al área grogueta. Cinco minutos después de que los de Pellegrini abrieran el marcador, Adriano puso las tablas con un remate dentro del área tras un centro de Stankovic que Peña no logró despejar.

El gol dio alas al Inter, que se adueñó del balón y se acercó con peligro al área de Viera en los siguientes diez minutos. Tras el impuslo que le dio el tanto a los italianos, el Villarreal logró acerse con el control del balón, seña de identidad del conjunto de Manuel Pellegrini. El partido entró en una dinámica de alternativas constantes. Ambos equipos gozaban de oportunidades y los dos porteros tuvieron que intervenir para evitar el gol.

En el minuto 28, Álvaro Recoba tuvo que ser sustituido por lesión. En su lugar entró Obafemi Martins, que sería decisivo en el devenir del partido. Su entrada ayudó al Inter y los de Mancini se asentaron en el juego, creando oportunidades de peligro casi siempre por la banda derecha, donde Stankovic y Zanetti causaban estragos.

Los últimos minutos de la primera parte fueron para el Inter, que dominó la pelota y se ácercó con peligro al área, donde la defensa del Villarreal falló a menudo presa de los nervios de una cita y escenario tan imponentes.

 Tanto neazurri y poco más

El segundo tiempo comenzó igual que acabó el primero: el Inter apretaba y el Villarreal no terminaba de encontrar su juego. Tras algunas ocasiones de los "neroazzurros" que nacieron de las botas de Zanetti y Martins, este último anotó el 2-1. Otra buena jugada de Stankovic por la derecha y su centro lo introduce Martins en la portería con un remate poco convencial.

Foto: elmundo.es
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El segundo gol del Inter abrió el partido y ambos conjuntos buscaban el contragolpe para sorprender a la defensa rival. En uno de los ataques amarillos, Riquelme estrelló un balón en el larguero con un magnífico libre directo. El Inter también gozó de algunas oportunidades poco después de ponerse por delante en el marcador.

Poco a poco, el Villarreal se fue haciendo con el partido y se lanzó al ataque a buscar el tanto del empate. Los de Mancini aprovecharon esta circunstancia y también lograron inquietar a Viera en alguna ocasión con contragolpes que finalizaban Martins y Adriano.

El encuentro llegó a su fin con el Villarreal volcado arriba, no obstante, el gol no llegó y se certificó la derrota del Submarino. Una derrota que, aunque no es un buen resultado, invita a la esperanza, ya que un único gol podría clasificar al Submarino Amarillo para las semifinales de la UEFA Champions League.

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