El Villarreal ha cosechado un último mes de competición que ha sido para olvidar, el conjunto de Marcelino García Toral ha bajado demasiado el nivel, circunstancia que ha sido clave para que el sueño de eliminar al Liverpool y jugar la primera final de la historia se haya esfumado de manera bastante cruel. Los amarillos han pagado el cansancio acumulado durante todo el curso y la ausencia de un fondo de armario que podía haber dado oxígeno a los titulares pueden ser algunas de las causas de este bajón.

El Submarino llegaba al último tramo de competición con el cuarto puesto virtualmente conseguido y con una semifinal de Europa League ante un histórico como era  el Liverpool con la ilusión de superar esta barrera que años atrás se estaba resistiendo. 30 días después el Villarreal perdió cinco partidos, empató uno y ganó solamente dos, lo que supuso certificar el cuarto puesto, pero decir adiós por quinta vez en 10 años a una final por la debacle de Anfield al perder 3-0 ,en un partido que el conjunto amarillo no compitió en ningún momento a pesar de llegar con una ventaja mínima, tras haber ganado 1-0 siete días antes en El Madrigal.

La eliminación europea supuso una decepción enorme debido a la ilusión existente en todo el club, los jugadores bajaron mucho la intensidad en los dos últimos partidos ante Deportivo de la Coruña y Sporting en El Molinón lo que supuso sendas derrotas por 2-0 y con la sensación de que el conjunto amarillo cuando no está al 100% es muy difícil que se puedan sacar los partidos adelante. Una buena lección para la temporada que viene en la que la Champions League será el gran reto.

No obstante, el mal final de temporada no puede empañar el enorme trabajo cosechado durante los siete meses anteriores. El Submarino mantuvo un máximo nivel durante mucho tiempo lo que valió para lograr hitos tan importante como el cuarto puesto en el torneo doméstico y unas semifinales en la Europa League, con el único lunar de la eliminación en octavos de final de la Copa del Rey en manos del Athletic de Bilbao.