Es un secreto a voces, pero que todavía nadie ha confirmado: Cristian Espinoza jugará previsiblemente de amarillo la próxima temporada, de hecho, él ya habla como jugador del Submarino, aunque nadie haya confirmado la compra, ni esté claro si saldrá cedido o permanecerá a las órdenes de Marcelino, pues su fichaje es de futuro más que de presente.

A pesar del interés de varios equipos, finalmente Espinoza decidió recalar en el Submarino, en parte porque el Villarreal le ofrecía la posibilidad de viajar a Río para los Juegos Olímpicos con Argentina, algo que facilitó su elección. Aparte de este detalle, el jugador no ha escatimado en elogios hacia su nuevo equipo: “Es un club importante de Europa. Tiene una historia tremenda y espero, a base de trabajo, escribir ahí la mía. Es mi máximo deseo. Es un sueño tener la posibilidad de jugar en este equipo”, a lo que añadió su alegría por este fichaje y el agradecimiento a sus anteriores clubs: “Este es un paso muy importante en mi carrera. Estoy agradecido al Villarreal por confiar en mí y a Huracán, que fue el club donde desde pequeño me abrieron las puertas. Hoy soy lo que soy gracias a ese paso por el Globo”, afirmó el argentino.

Al ser preguntado sobre la posible dificultad de adaptarse al equipo, al país y al fútbol europeo, Espinoza no titubeó al afirmar que él es un jugador que encaja en el Villarreal perfectamente: “El Villarreal, por lo que vi, tiene un juego táctico y con mucho toque. Puedo adaptarme bien, porque soy amante del buen fútbol, en el que la pelota debe circular para buscar el hueco en el rival y hacer daño. Villarreal tiene mi estilo.” A pesar de su seguridad y su juventud, lo cierto es que el centrocampista sabe mantener los pies en el suelo y es consciente de la dificultad de ganarse un puesto en un equipo que disputará Champions, algo que para él sería un sueño: “Jugar esa competición es el sueño de cualquier jugador. Por la historia que tiene el equipo, estoy seguro de que logrará disputar este torneo, pero lo primero que tengo que hacer es ganarme el puesto para luego comenzar a pisar fuerte. Trabajaré duro para eso”, aclaró.

Cristian Espinoza reconoce que no suele vestir de amarillo, aunque no le importará lucirlo a partir de ahora y de hecho ya se ve luciendo la camiseta grogueta, y ganando al Barça, algo que para él sería un sueño pero no algo imposible puesto que en el campo todos son iguales. Consciente de que llega a la mejor liga del mundo (así la consideran algunos), sabe perfectamente de la dificultad añadida, pero afirma que el Villarreal está dentro de ese lote de equipos que nunca se da por vencido y da dolor de cabeza a los adversarios. Pero si hay un argentino que marcó en la grada de El Madrigal, ese fue Riquelme, y Espinoza lo sabe: “Estar en un equipo por donde pasó Riquelme es un orgullo”.

Si nunca ha visto un partido de este talentoso jugador, él mismo se define así: “Me considero un jugador rápido, me gusta mucho desbordar y encontrar el momento justo para cortar y entrar por el medio para luego rematar o sacar un centro. Soy un jugador con muchas ganas de seguir creciendo y aprendiendo. Voy al club indicado”, y es que el caso de Vietto o Bakambu son los más recientes de desconocidos futbolistas que crecen de una forma descomunal en el césped de El Madrigal.

Espinoza, que todavía no es un fichaje confirmado pero sí inminente, asegura que ya sueña con celebrar goles en el Madrigal: “Ojalá se dé pronto y pueda estar ahí en esa cancha tan linda como es El Madrigal, jugando y haciendo goles”, y parece que por ganas de aprender y evolucionar no quedará.