Nadie duda que este es el partido de la jornada. Incluso de la fase de grupos en general. Son dos de los equipos más potentes del panorama europeo, dos de los clubes con mayor capacidad económica del mundo y dos de los entrenadores mejor valorados. Es un escenario perfecto, digno de unas semifinales de Champions. Y no por todo lo nombrado, sino por las exigencias que acucian a uno y otro equipo.

Guardiola llegó al Bayern de Múnich este verano con una idea. Con la intención de remodelar lo que había sido el Bayern más competitivo de la historia y, con el triplete, el más exitoso. Era, por un tanto, una empresa difícil, simplemente porque su objetivo no iba a ser triunfar, sino hacerlo desplegando un fútbol totalmente diferente. Con ADN Barça.

Mejorar la perfección

Se fichó a Thiago y a Götze, teóricos bajitos que servían para facilitar el proceso de cambio de sistema y de pensamiento. Incluso Guardiola le dijo a Mario Gómez que no contaba con él “por sus características” como delantero. Y tras dos meses de competición y otros tanto trabajando con la plantilla se puede decir que aún no ha conseguido su objetivo. Las lesiones han pospuesto a ese Thiago Alcántara de '5' escoltado por Schweinsteiger o Toni Kroos. Aún prácticamente no ha podido probar a Götze de falso nueve y, lo que es peor, los resultados llegan pero a cuenta gotas.

Guardiola y su tarea: llevar a cabo una transición hacia un sistema diferente

Con dudas y con resultados cuya afición no estaba acostumbrada a ver en el Allianz cada dos semanas el año pasado. Véase la victoria por la mínima el pasado fin de semana ante el Wolfsburgo. A través de la pegada de un equipo con uno de los candidatos a Balón de Oro y otros tantos al mejor 11 de Europa, el Bayern ha sobrevivido estancado en cuanto el rival planteaba una presión incómoda. Son demasiadas incógnitas para un equipo que aspira a lo más alto. Y Guardiola necesita ir difuminándolas.

Foto: Eurosport.

Europa como objetivo

Por su parte, Manuel Pellegrini vive una situación alterna en la ciudad de Manchester. Es verdad que llegó, al contrario que Pep Guardiola, en un clima donde imperiaba la necesidad de ganar ante un fracaso tras otro en Europa. Con la vitola de técnico vinculado al buen juego y con dos actuaciones destacadas en Champions (frente al batacazo del Lyon con el Real Madrid) Pellegrini era el querido por todos. Y así lo prometió en su presentación. “La gente del Etihad se va a divertir viendo a su equipo esta temporada”. Hasta el momento, sí y no.

El Manchester City es una moneda por las dos caras. En el Etihad, intratable. Como visitante, mediocre

Sí, porque en el Etihad se está mostrando intratable. Comenzó la temporada arrollando al Newcastle y dejando claro quién era favorito para ganar la Premier. Los tabloides ingleses admiraban la capacidad ofensiva de un City que se había reforzado con Navas, Negredo, Fernandinho o Jovetic entre otros. Parecía, y más tras el comienzo dubitativo de Manchester United y Chelsea, que el City iba a despegar hacia el liderato en las primeras jornadas.

Pero no ha sido así. La diferencia de jugar en el Etihad a hacerlo como visitante ha sido demoledora. Una derrota en el Cardiff City Stadium, un empate sin goles ante el Stoke y la última y más sangrante de todas: otra derrota ante el Aston Villa después de ir en dos ocasiones por delante en el marcador. Eso sí, la victoria total ante el Manchester United de Moyes rebaja la tensión después del gasto millonario. Ante el Bayern el resultado no será tan importante como la imagen dada, pero una victoria disiparía y difuminaría por completo cualquier vertido tóxico en forma de crítica.

Foto: Reuters

Pocos cambios

Los alemanes, recuperando poco a poco efectivos, saldrán a priori con un once bastante ofensivo. La idea de Lahm como interior -que según el diario alemán Bild quiere ser imitada por Joachim Löw en la selección germana- parece que se fraguará de nuevo mientras que Müller desempeñará esa labor como interior izquierdo a esperas de la recuperación de Thiago.

En el Manchester City no habrá muchos cambios respecto al último partido en el Etihad. Sí en cuanto a la derrota frente al Aston Villa, donde Pellegrini reservó a varios titulares para el choque de Champions. Vuelve Agüero y Negredo podría ser el nueve del equipo citicen en detrimento de Edin Dzeko.

Guardiola: "El City es de los más grandes"

Guardiola solo tuvo elogios en cuanto fue preguntado por su rival: "El City es uno de los equipos más grandes de Europa. Confío en que puedan meterse en la próxima fase esta vez. Conozco a su entrenador y a algunos de sus jugadores". Además, habló personalmente del técnico del Manchester City, Manuel Pellegrini. Coincidió con él en la Liga española: "Estoy muy impresionado por Manuel, porque entrene al equipo que entrene juega siempre con el mismo estilo. Siempre deja su sello, su marca en el equipo. Ya lo hizo en el Villarreal, en el Málaga y en el Real Madrid".

"Entrene a quien entrene, Pellegrini siempre juega con el mismo estilo y deja su sello"

Además, el entrenador catalán se mostró satisfecho ante la recuperación de algunos futbolistas que o bien andaban con molestias o estaban lesionados: "Eso es por eso que tengo la suerte de tener a Lahm en esa posición, mientras que jugadores como Mario Götze, Javi Martínez, Schweinsteiger y Thiago Alcántara están de vuelta. Estoy muy feliz porque mis jugadores hayan logrado ganar partidos sin centrocampistas", reiteró.

Pellegrini: "El pasado es el pasado"

Para Pellegrini, el hecho de haber caído de forma estrepitosa el pasado sábado en la Premier es un acicate para hacerlo bien en Champions: "Por supuesto que espero una gran respuesta de los jugadores (tras la derrota del sábado). Siempre la espero. Comenzamos esta Champions League muy bien y es importante continuar así", señaló.

"Espero una reacción de los jugadores tras la derrota del sábado"

Al técnico chileno no le importan las estadísticas y rechaza tenerlas en cuenta (ningún equipo de Manuel Pellegrini ha ganado a Guardiola): "El partido es siempre entre los jugadores, no es un partido entre Pep y yo. El fútbol está en constante cambio, el pasado es el pasado, así que veremos lo que pasa en el futuro".

Posibles alineaciones: