Tras el parón de las selecciones, volvía el fútbol europeo. Con el PSG y el Bayern de Múnich perfilándose como claros candidatos al título, Juventus recuperando el liderato tras unos meses dubitativos o el Arsenal en modo imperial, la crisis de varios equipos asola el panorama futbolístico. El United de Moyes no sabe cuál es su papel en esta Premier League mientras que su homólogo en la ciudad sigue destrozando rivales en casa y perdiendo puntos fuera. Aun así, estas son las historias más destacadas del fin de semana.

Guardiola toma el mando

“Van a rodar cabezas, no me importa quién sea el topo. Lo voy a echar. No va a volver a jugar conmigo”. Serían declaraciones de Pep Guardiola en la previa al partido ante el Borussia Dortmund, según Bild. El periódico alemán había desvelado el plan del entrenador de Santpedor para vencer en el campo del máximo rival (balones en largo y cambios de orientación rápidos), el cual tan solo se lo había contado a sus jugadores la misma semana del partido. No era la primera vez que ocurría ya que Bild está ganando cierto prestigio con la veracidad de sus fuentes en el Bayern de Múnich (el fichaje de Guardiola, Götze...), algo que en realidad siempre ha estado presente. Pep da prioridad a la seguridad del grupo al invidividuo.

Perder la Supercopa contra el Dortmund le hizo ganarse detractores. Poco a poco Pep va difuminando ese inicio lleno de interrogantes

Una hora más tarde, su equipo estaba dando una lección de cómo vencer en el Signal Iduna Park siendo solvente en defensa y certero en ataque. Guardiola ganó la batalla a Klopp en la pizarra y, cuando parecía sucumbir su plan, realizaba otro cambio táctico. Como por ejemplo, el de situar a Javi Martínez como mediocentro más ofensivo para tapar la salida del Dortmund o el de quitar a Mandzukic para sumar un jugador de mayor aportación técnica como es Götze. Poco a poco Guardiola goza de más credibilidad en el Bayern, equipo condenado a la excelencia.

Foto: EFE.

¿Crisis o realidad?

Ni la vuelta de Kaká a San Siro ha servido de inspiración para renacer al Milan. El equipo italiano anda a la deriva, ajeno a su pasado y a su condición de equipo ganador. 27 títulos en 28 años eran suficiente aval como para temer al Milan independientemente de la situación, jugadores y clasificación. Parece que esa etapa, tan duradera y exitosa, está llegando a su fin. O al menos o a un momento de cambio.

Quizá ya no sea un equipo grande, sino un mero vestigio que avanza con la inercia de lo que fue y ya no es

Volvió a no ganar, que es sinónimo de fracaso para un equipo grande. Esta vez fue ante el Génova. Ni el hecho de ser locales fue suficiente para intimidar a una escuadra que está haciendo bien las cosas esta temporada. Encabeza la clasificación de los equipos con aspiraciones menores a excepción del Hellas Verona, que sigue soñando en la sexta posición. Ni el gol tempranero de Kaká, ni la expulsión de Manfredini y el posterior penalti fueron suficientes: Balotelli lo falló y Gilardino ya había empatado el encuentro a modo de venganza. Curioso que el delantero que vivió el inicio del declive escenifique tan dramático momento. Los aficionados increparon a los jugadores a la salida y Kaká y Abbiatti bajaron del autobús para intentar calmar los ánimos.

Dónde está el equilibrio

Tampoco es que el Tottenham esté mejor que los rossoneri. Un desembolso de 106 millones de euros (la venta de Bale) fue directo para reforzar ciertas posiciones de cara a la salida de su mejor jugador. Se fichó a Lamela, por 35, pero también a Eriksen, Soldado, Paulinho, Capoue, Chadli, Chiriches... Villas-Boas pretendía un cambio radical para evitar que la conmoción de la salida del mejor jugador de la historia del club fuese a más. La idea parecía ambiciosa. El problema es que no está funcionando en absoluto.

Verthonghen: "Yo no soy lateral. Juego ahí porque me pagan, pero a mí me gusta jugar de central"

Perdió 6-0 ante el Manchester City en el Etihad. Fue una derrota sin paliativos. Pero más allá de la derrota, se pudo comprobar como el Tottenham de AVB es un equipo sin automatismos, condenado a las individualidades. Además, el portugués optó por dar la titularidad por primera vez desde que llegó (¡a finales de noviembre!) a su fichaje más caro, Erik Lamela. Obviamente el rendimiento fue muy bajo y los aficionados se preguntaban por qué Townsend, mejor jugador hasta el momento en este rácano inicio de temporada, comenzaba en el Etihad como suplente. Para más inri, Verthonghen sigue siendo lateral. Él mismo reconoció que juega ahí porque le pagan, pero que su posición natural y donde se siente más a gusto es en el eje de la zaga. Por si fuera poco, el bagaje ofensivo del Tottenham es paupérrimo. 6 goles excluyendo los tantos marcados de penalti hacen del equipo londinense el peor equipo junto con el Palace en cuanto a términos goleadores se refiere en las cinco grandes ligas.

Un aficionado del Tottenham tras la derrota de su equipo 6-0 en el Etihad. Foto: Reuters.

El milagro de marcar

Lo del Lille de Girard ya tenía mérito hace unas jornadas cuando comentábamos su victoria ante el Mónaco de Falcao, Toulalan y compañía. Más allá de que continúe segundo en la Ligue 1, otro fin de semana más volvió a terminar la jornada con la portería a cero. Enyeama se perfila como portero revelación de las grandes ligas europeas porque sus actuaciones, unido a un gran nivel defensivo auspiciado por René Girard, están dando sus frutos.

Ganó en casa ante el Toulouse por la mínima, 1-0, aumentando la racha de partidos consecutivos sin encajar un gol (9 encuentros). Tan solo ha visto cómo el rival celebraba el gol en dos partidos de los 14 disputados hasta el momento. Unas cifras de vértigo que lo convierten en el equipo menos goleado de toda Europa.