La Juve vuela con fuerza hacia el Juventus Stadium para jugar la final de la Europa League. El aliciente de jugar la final en casa y el momento dulce de la temporada que atraviesa, hicieron a los bianconeros dejar en la cuneta a un Olympique de Lyon que nunca dio su brazo a torcer y puso en aprietos a los de Conte.

Tal vez fue el destino el decidiera que Andrea Pirlo se convirtiera en el rey de Europa en lanzamientos de falta, contra el equipo de Juninho Pernambucano, el artista que lo inspiró. La magia ante los franceses es la número 43 en su carrera, 6 en esta temporada: los números dicen que es el mejor de todos, antes que Yaya Toure, que suma 5, y los diversos Balotelli, Ibrahimovic, Cristiano Ronaldo y Eriksen, todos con 4.

A pesar de la ventaja traida de Francia y del tempranero golazo de falta de Pirlo a los cuatro minutos de partido, el Lyon consiguió empatar a los 18 minutos por medio de Briand, aprovechándose de un error en la marca de Marchisio, que el delantero francés culminó con un cabezazo ajustado al palo, que aunque tocó en el guante de Buffon, acabó besando las mallas.

Hay que destacar que los bianconeros protestaron la acción del gol, ya que en la jugada previa, el colegiado decretó córner en una acción que debería haber sido saque de portería para Buffon, al igual que los franceses reclamaron penalti por unas manos de Bonucci dentro del área juventina.

El partido tuvo un guión muy parecido al de la ida en Gerland hace una semana. Remi Garde decidió "sacrificar" a Malbranque otra vez, colocándolo encima de Pirlo durante todo el primer tiempo y ya en la segunda parte las fuerzas del francés fueron menguando. Con Pirlo cubierto, nuevamente Bonucci se erigia en el constructor del juego desde la defensa.

Conte decidió apostar por la dupla Tevez-Vucinic. El primero tuvo un par de ocasiones para poder acabar con el maleficio del gol europeo que le dura cuatro años (llegó incluso a marcar de cabeza pero en fuera de juego), mientras que el montenegrino no estuvo muy acertado y apenas tuvo protagonismo.

Garde volvió a sorprender como en la ida dejando en el banquillo a Gomis y apostando todo a la velocidad de Lacazette y a la puntería de Briand, pero dejando de lado el gol del segundo, la defensa bianconera mantuvo a ralla a la delantera francesa.

Solo un disparo de Gonalons en el primer tiempo y una falta en la segunda mitad de Mvuemba, hicieron aparecer la figura de Buffon, que estuvo muy sobrio en ambas acciones. Tras la reanudación, Conte decidió retirar a un cansado Vucinic para dar entrada al bigoleador ante el Livorno el pasado lunes, Fernando Llorente.

La entrada del navarro permitió tener una referencia más estática arriba a la Juve, que empezó poco a poco a adueñarse del balón. Asamoah empezó a aparecer con más frecuencia en su banda izquierda y las ocasiones, aunque en cuentagotas empezaron a llegar.

Un centro-chut del francés, lo saco Umtiti en boca de gol, cuando Tevez se disponía ya a remachar a placer. Vidal tras una gran asistencia de Marchisio, se plantó ante Lopes, pero el chileno que llegaba forzado no pudo anticiparse a la salida del portero. El Rey Arturo acabó siendo sustituido, aquejado con problemas físicos.

El partido seguía sin decantarse de ningún lado. Un gol del Lyon, dejaba fuera a la Juve, mientras que los bianconeros no querían correr el riesgo de llegar a los minutos finales con el empate en el marcador. Al final, un disparo desde la frontal de Marchisio a los 64 minutos, acabó tocando en Umtiti y descolocando a Lopes, desatando la locura en el Juventus Stadium.

El gol sentenció el partido y la eliminatoria. Conte dio entrada a Pogba y Giovinco, mientras que Garde se la jugó cambiando la delantera, dando entrada a Gomis y Njie, pero el destino ya estaba escrito. El equipo de Conte ya espera rival en semifinales, siendo el primer equipo italiano en llegar tan lejos desde la creación del formato Europa League y sigue salvando el honor italiano por Europa.

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