Con la música de ‘The Beattles’ sonando en los toca-discos de la Inglaterra de los sesenta, los creadores del fútbol albergaron el Mundial, su primer Mundial. Aunque, antes de ser elegidos tuvieron que derrotar a Alemania en la votación de la FIFA. Lo hicieron por 34 votos contra 27. Además la celebración del Mundial coincidió con el centenario de la creación de la Federación Inglesa de Fútbol.

El Mundial causó mucha expectación en Inglaterra, que quería sorprender al mundo. Para ello, los británicos crearon la primera mascota de los Mundiales. Un león llamado Willie ataviado con la bandera del Reino Unido y con el corte de pelo imitando a sus contemporáneos ‘The Beattles’. El país recibió con los brazos abiertos y con ambiente festivo el torneo internacional más importante.

Fueron dieciséis selecciones las que disputaron la octava edición de este torneo. En la primera fase, se repartieron cuatro selecciones en cuatro grupos quedando así:

Grupo A Grupo B Grupo C Grupo D
Inglaterra Argentina Bulgaria Unión Sovietica
Uruguay Alemania Federal Brasil Corea del Norte
México España Hungría Italia
Francia Suiza Portugal Chile

En el grupo A, Inglaterra consiguió clasificarse como primera de grupo con dos victorias (México y Francia) y un empate (Uruguay). 5 puntos, cuatro goles a favor y ninguno en contra les sirvieron a los anfitriones para pasar a cuartos. Junto con ella se clasificó Uruguay, dejando fuera a México y a Francia, que se encontraba inmersa en la peor etapa de la historia del fútbol galo.

En el segundo grupo, nuestro país cayó en la primera ronda. Llegó al último partido jugándose el pase contra los alemanes que consiguieron el 2-1 en el 84 apeando a los campeones de Europa (Eurocopa 1964) del campeonato internacional. La España de Sanchís y Amancio quedó tercera para dejar por encima suya a Argentina y Alemania. Los suizos por su parte, no consiguieron ningún punto.

Muchas sorpresas en la primera fase

En el tercer grupo, Portugal consiguió vencer todos sus partidos clasificándose con 6 puntos y 9 goles a favor. La selección lusa hizo temblar la red de todos sus rivales gracias al mítico Eusebio, que terminó como pichichi. Pero la sorpresa de este grupo la dio Brasil, que se quedó fuera en la primera ronda. Probablemente haya sido una de las peores participaciones en el campeonato mundial de la Canarinha y eso que entre sus filas estaba Pelé. Por ello, fue Hungría quien pasó a cuartos junto con Portugal.

En el último grupo, la Unión Soviética y Corea del Norte pasaron a cuartos. Los coreanos hicieron historia en Inglaterra, ya que fueron el primer país asiático en pasar a cuartos en un Mundial. Además de que fue el mayor éxito conseguido por esta selección en su historia. Mientras que Italia, se quedó fuera del mundial en el último partido de la primera fase, perdieron 1-0 contra Corea.

Tras varias sorpresas en la primera ronda. Donde países que partían como favoritos quedaron fuera, se realizó el sorteo de cuartos de final. Rusia tuvo que disputar su pase a la semifinal ante Hungría. Fueron los soviéticos quienes consiguieron llevarse el partido, 2-1, gracias a la actuación de su estrella Lev Yashin. La segunda eliminatoria la disputó Alemania contra Uruguay. En este partido no hubo ningún tipo de dudas sobre quién merecía pasar, ya que los germanos ganaron por 4-0. Con dos goles de Haller, uno de Beckenbauer y el último de Seeler.

Portugal - Corea del Norte, el partido con más goles.

Pero, fue el Portugal - Corea del Norte el partido más goleador de estos cuartos. El choque finalizó con un 5-3. Destacar que en este encuentro Eusebio anotó cuatro tantos, dos de ellos de penalti. El resto los hicieron José Agusto para Portugal y Seung Zin, Dong y Seung Kook para los asiáticos. Mientras que en la última eliminatoria, un solitario gol de Hurst en el 78’ dio el pase a los ingleses dejando fuera a Argentina.

La primera semifinal enfrentó a Alemania Federal y a la Unión Soviética. Este partido, fuera de lo deportivo, fue seguido con especial atención por la aún palpable tensión gestada en la Segunda Guerra Mundial. Pero, regresando a los terrenos de juego, los alemanes ganaron el encuentro por dos goles a uno. El primero lo consiguió Haller en el minuto 43, el segundo en el 67 lo anotó Beckenbauer y a falta de dos minutos para el final, Porkujan mandó al fondo de la red el tanto ruso.

Pero la semifinal más reñida, que bien podría haber sido la final, fue la que jugaron Inglaterra y Portugal. Los locales llegaban con mucha fuerza y apoyo, mientras que los lusos eran los favoritos gracias al estelar momento de Eusebio. En el minuto 30’ Bobby Charlton hizo el primero para los de casa. Los minutos fueron pasando y la tensión fue ‘in crecendo’. Pero Charlton en el 80’ tranquilizó a los británicos con el 2-0. Portugal no bajó los brazos y Eusebio dos minutos más tarde, desde los once metros, dio alas a los suyos. Pero el choque finalizó con un 2-1.

El 28 de julio de 1966 en Wembley se disputó la final de consolación entre Portugal y Rusia. Aquel partido lo recordaran aún en sus respetivos países, ya que ha sido la mejor posición tanto de lusos como de rusos en una Copa del Mundo. Portugal marcó el primero en el minuto 12 por medio de Eusebio. Pero antes de que terminara la primera parte Malofeiev puso la igualada. El 1-1 se hacía eterno y el partido parecía condenado a la prórroga. Hasta que José Torres en el 89’ marcó el gol que dio a Portugal el tercer puesto.

Dos días más tarde, el 30 de julio de 1966 se disputó la final más polémica de la historia de los mundiales. Inglaterra y Alemania se daban cita en Wembley, el derbi europeo se iba a vivir en la final, con mayúsculas del fútbol. Estos fueron los once que presentaron Alfred Ramsey para los ingleses y Helmut Schon para los germanos.

Inglaterra: Gordon Banks, George Cohen, Ray Wilson, Nobby Stiles, Jack Charlton, Bobby Moore, Alan Ball, Bobby Charlton, Geoff Hurst, Martin Peters y Roger Hunt.

Alemania: Hans Tilkowski, Horst Hoettges, Karl-Heinz Schnellinger, Franz Beckenbauer, Will Schulz, Wolfgang Weber, Helmut Haller, Uwe Seeler, Sigi Held, Lothar Emmerich y Wolfgang Overath.

La final más polémica de los mundiales

En las finales del Mundial siempre se escribe historia del fútbol. Pero quizá en está más que en otras. Ante 96.924 espectadores, el colegiado Gottfried Dienst, pitó el inicio de la final más vibrante. En el minuto 12 Haller puso el 0-1 y cinco minutos más tarde Hurst puso el empate. La tensión crecía y el juego sucio también.

Ya en la segunda parte, Peters en el 78’ hizo estallar Wembley con el 2-1. Cuando parecía que los locales se iban a coronar, Weber en el 89’ mandó el partido a la prórroga. Con el minuto 100 ya cumplido se produjo el momento más polémico de la historia de este deporte. Husrt disparó y el balón dio en el larguero y botó en… nadie lo sabe, pero el árbitro pitó gol.

Los alemanes lo reclamaron reiterativamente, pero al ver tal despropósito quedaron completamente descolocados y en el último minuto Hurst hizo el 4-2, consiguiendo el primer y único hat-trick en la final de un Mundial.

A pesar de que el Mundial terminó ahí, la polémica no hizo más que empezar. De hecho ABC, tituló a su crónica “Por decisión de un juez de línea es Inglaterra campeón del mundo”. Gilera, autor de la crónica describió así el momento: “A mí me pareció claro, desde mi posición, que era buena. Pero el árbitro Dienst vaciló y nos produjo por unos segundos la impresión de que no daba gol”.

30 años más tarde, en 1996, la Universidad de Oxford, realizó un estudio sobre este gol. Pues bien, la investigación determinó que el balón quedó a 6 centímetros de sobrepasar la línea de cal. A pesar de ello, aún a día de hoy sigue siendo una jugada polémica.

Como curiosidades de este Mundial, señalar que África y Asia tenían que jugarse una plaza para entrar en el campeonato. Pero las selecciones del continente africano no se presentaron, ya que no dejaron participar a Sudáfrica por el rechazo internacional a la política del Apartheid.

En general fue un Mundial polémico, Inglaterra tuvo más días de descanso entre partido y partido, los árbitros ingleses fueron superiores a los de otras nacionalidades y por si fuera poco los cuartos entre Inglaterra y Argentina también hicieron correr ríos de tinta. En la crónica de Gilera describió así la polémica: “Se produjo la expulsión de Rattin (Argentina) por motivos que el árbitro conocerá, sin duda, el árbitro alemán señor Kreitlin, (¿escupir?, ¿insultar?, ¿protestar?), pero que desde los graderíos no supo saberse”.

Pero además de ello, si hay un nombre propio en este Mundial es el de Eusebio. “La pantera negra” conquistó al mundo con nueve goles en seis partidos. Pero su partido más recordado será contra Corea del Norte, ya que consiguió cuatro goles en menos de media hora.

Inglaterra 66 fue un Mundial polémico, lleno de sorpresas y revelaciones donde Pelé mostró su peor cara y Eusebio rozó el cielo. Un Mundial en el que un gol fantasma es lo más recordado. Un Mundial de la Europa de la guerra fría, donde todavía España llevaba un águila en la bandera y Alemania estaba separada por un muro. Un Mundial, que pasó hace 48 años y que parece que sucedió hace un siglo.