Mario Alberto Kempes Chiodi (Bell Ville, Argentina, 15/07/1954). Conocido como Mario Kempes. Apodado el “matador”. Considerado por la IFFHS el sexto mejor jugador argentino del siglo XX. Algo impensable para aquel joven de 17 años que trabaja en una carpintería. Quién iba a decirle que pasaría a la historia de los mundiales de fútbol con su selección.

Instituto de Córdoba le vio crecer como futbolista. Durante esa época le llegó la oportunidad, en 1973, de defender por primera vez a Argentina con la selección ante Bolivia.

Tras pasar por Rosario Central, llegó al Valencia CF. Se convirtió en el máximo goledor en ambos equipos. Pero fue en la ciudad del Turia donde se le vio su gran olfato goleador. Una faceta que le llego en el mejor momento: Mundial en Argentina en 1978.

Un Mundial para la historia

Debutó en una cita mundialista en el Mundial de Alemania Occidental (1974), aunque con una mala actuación y es que no llegó a marcar ningún gol. Además, la albiceleste cayó tras ser goleada por Holanda. Cuatro años después se disputaría en Argentina. Torneo que recordará no solo por celebrarse en su país, sino por levantar por primera vez el primer mundial para la albiceleste. Pero lo que el "matador" no se imaginaba es que él iba a ser el mayor protagonista y su nombre iría siempre ligado a "Argentina '78".

El 25 de Junio de 1978. Buenos Aires. Argentina se enfrentaba a Holanda en la final. Delante de su afición. La oportunidad perfecta para levantar la primera Copa del Mundo. La albiceleste salió esa tarde con el siguiente once: Fillol, Ardilles, Bertoni, Gallego, Galvan, Kempes, Luque, Olguin, Ortiz, Passarella y Tarantini.

Pero sólo uno de ellos escribiría con oro su nombre en la historia de la Copa del Mundo. Él, Mario Kempes, aquel carpintero, abrió el marcador en el minuto 38. Colocaba a su país a sólo un paso de conquistar el ansiado trofeo. Pero el delantero holandés, Dick Nanninga, puso el empate en el 82 que les llevaría a la prórroga. El propio Kempes convirtió el segundo tanto argentino en el 105'. Daniel Bertoni se encargaría de sentenciar el encuentro en el 115' con el tercer gol albiceleste.

Dos goles en una final de un Mundial. Seis goles en todo el torneo que le valieron para ser el máximo goleador y llevarse la Bota de Oro. Sin duda, una excelentísima actuación en el mejor escenario posible: su país, su afición.

Los números en Argentina '78

Argentina acabó el mundial con cinco victorias, un empate y una derrota:

- Fase de grupos:

Argentina 2-1 Hungría

Argentina 2-1 Francia

Italia 1-0 Argentina

- Segunda ronda:

Argentina 2-0 Polonia: Los dos tantos de Kempes.

Argentina 0-0 Brasil.

Argentina 6-0 Perú: Dos goles de Kempes.

- Final:

Argentina 3-1 Holanda: Dos goles de Kempes.

La intrahistoria de la final

Una de las anécdotas que nunca olvidará Kempes será la entrega de la Copa. Una copa tan esperada y que nunca llegó a tocar como el mismo recuerda: "Era tal el desborde en la entrega de la copa que no pude llegar hasta donde entregaban las medallas. Era el último de la fila. Si ni siquiera toqué la copa", recordó en una entrevista latinoamericana 'El Gráfico'. "No la toqué ni esa noche ni nunca. Al día siguiente se la llevaron y no la vimos más. La única copa que toqué fue una reliquia de chocolate que me mandaron".

Mario Kempes jugó su tercer y último mundial en 1982 en España. A aquella cita mundialista llegó en su ocaso y unió fuerzas con Maradona, quien jugaba su primer mundial, pero no pudieron evitar un importante fracaso. En ese torneo consiguieron 2 victorias, ante Hungría y El Salvador, y tres derrotas, ante Bélgica, Italia y Brasil.

"El matador" dejó la selección tras 43 partidos jugados y 20 goles marcados. Sin duda, unos datos y unos goles históricos que colocan al de Bell Ville en una cima a la que sólo unos pocos elegidos y privilegiados alcanzan.