El entrenador del Tottenham, Mauricio Pochettino, ha comparecido hace unos instantes ante los periodistas de cara al enfrentamiento entre su equipo y el AEL Limassol que se disputará en la tarde del jueves. Apenas una hora después de haber aterrizado en tierras chipriotas, tanto él como Harry Kane han contestado las preguntas de los medios de comunicación.

El argentino habló de las esperanzas que tienen de acabar teniendo éxito en la competición europea: “Jugué la UEFA como jugador, pero es mi primera vez como entrenador. Estoy emocionado y con muchas ganas, al igual que mis jugadores”. Al ser preguntado por su rival, el técnico aprovechó para alabar al conjunto de Ivaylo Petev: “No espero un partido fácil, ni mucho menos. Le pusieron las cosas realmente complicadas al Zenit en la anterior eliminatoria, les llevaron al límite y les obligaron a remontar, ganándoles en este mismo estadio. Tenemos muchísimo respeto por el Limassol”.

Para este encuentro, el técnico recupera a Vertonghen, Dembélé y Chadli, que fueron cuartofinalistas con la selección de Bélgica en el pasado Mundial de Brasil, así como a Paulinho, que llegó hasta las semifinales. Los cuatro se incorporaron más tarde que el resto de sus compañeros a los entrenamientos, por lo que no entraron en la convocatoria del primer partido de liga ante el West Ham.

“Sí, es posible que alguno de ellos juegue. He querido esperar hasta estar seguro de que estaban al ritmo del resto de sus compañeros. No quiero arriesgarme a más lesiones”, dijo Pochettino sobre la convocatoria de dichos jugadores. Kyle Walker -con molestias en la pelvis- y Vlad Chiriches -problemas en la espalda- serán baja confirmada por el propio entrenador. Tampoco ha viajado Michael Vorm, que fue el último en incorporarse a los entrenamientos post-Mundial y está siguiendo un programa específico para ponerse a punto.