Partido, a priori, importante en el que los dos equipos buscarían conseguir la victoria tras empatar en la primera jornada. Los marfileños llegaban con la importante baja de Gervinho tras una agresión en el primer choque; y las Águilas repetían el mismo once que tan buenas impresiones dio en la primera parte frente a Camerún

Rentabilizar las opciones

En los primeros minutos de encuentro, Costa de Marfil salió con la intención de imponer su juego sobre Mali, buscando desplazamientos en largo para aprovechar la velocidad de Bony. Pero en el primer contraataque que consiguió crear Mali, abrió el juego hacia la banda derecha en donde se encontraba S. Yatabaré, y este centró al segundo palo, en donde Sako apareció solo y golpeó de semi-volea, superando al portero marfileño.

Desde ese momento, Costa de Marfil se hizo con la posesión del balón pero no lograban acercarse a la portería rival con facilidad, no conseguía progresar en el juego, debido a la defensa bien posicionada de Mali, que hacía que los movimientos ofensivos de los atacantes marfileños no surtieran efecto. Con el paso de los minutos, los Elefantes se iban desesperando y cometían más fallos en la circulación del cuero, lo que provocaba que buscaran los desplazamientos en largo a Doumbia o Bony con demasiada asiduidad.

Por su parte, Mali, tras conseguir el gol, tenía claro que su planteamiento sería ceder la posesión del balón a Costa de Marfil y aprovechar los contraataques. Como los laterales marfileños estaban incorporándose al ataque constantemente, Mali volcaba su juego ofensivo por la banda derecha con S. Yatabaré buscando la espalda del lateral; y con los apoyos de M. Yatabaré y Sako desde la otra banda.

En defensa, buscaban acumular la mayor cantidad de jugadores, situando a Sylla entre los centrales y hacer así más difíciles los desmarques de los jugadores de Costa de Marfil. La presión que realizaron era posicional y pasiva en mitad de campo, pero cuando los marfileños se acercaban al área, esta se aumentava en su intensidad. Pero, sobre todo, cuando el balón llegaba a los pies de Yaya Touré; dos jugadores de Mali presionaban para que este no pudiera asociarse con sus compañeros.

Con los últimos minutos de la primera parte, Mali fue haciéndose poco a poco con el control de balón, pero no se acercaba con claridad a la portería de Costa de Marfil. Sin embargo, los ataques de Costa de Marfil comenzaban a ser cada vez más peligrosas, Doumbia y Kolo Touré tuvieron oportunidad de empatar del partido, pero Diakité consiguió desbaratar ambas oportunidades. Con la victoria por la mínima de Mali, el partido llegaró al descanso.

Tanto va le cántaro a la fuente…

Con el comienzo de la segunda parte nada cambió respecto a la primera. Costa de Marfil seguía con el control del balón, pero volvía a no llegar con claridad a la portería rival. Daba la impresión de que los Elefantes’no encontraban la forma de superar la línea defensiva de las Águilas.

Doumbia y Bony no eran capaces de crear peligro sobre el rival, no entraban en contacto con el balón, pero no era solo problema de ellos. El principal escollo venía en el centro del campo, Yaya Touré estaba desaparecido, Tioté estaba desquiciado al no encontrar posibilidad de elaborar jugada, y Gradel se sabía que estaba en el campo porque había sustituido a Diamondé.

Mali, a cada minuto que pasaba, se encontraba más y más cómoda con la situación, un gol de ventaja y un rival que no era capaz de superar su línea de presión. Destacar el partido que estaba realizando Sylla en el centro del campo tapando todas las acciones de ataque que se producían por el carril central. En ataque, la selección de Kasperczak seguía utilizando los contraataques con transiciones rápidas y buscando los espacios que se creaban en la adelantada defensa de Costa de Marfil.

Cuando el choque llegaba a su recta final, el seleccionador de Costa de Marfil comenzó a realizar cambios ofensivos tratando de buscar el empate. Y este llegó en el minuto 85, tras una jugada por banda derecha. Gradel, libre de marca en el punto de penalti, pudo mandar a la red en uno de los pocos tiros a puerta que tuvieron los Elefantes y salvar así la situación en Costa de Marfil.

Con este marcador, y con una Costa de Marfil volcada en el ataque,finalizó un disputado encuentro en el que Costa de Marfil salvó los muebles y continúa viva en la competición. Mali, por su parte, podría lamentar haber dejado escapar dos puntos vitales en este grupo más apretado de lo esperado.