Por fin. Tres partidos después de que se abriera su participación con un igualado partido ante Zambia, la selección de la República Democrática del Congo ha sacado a relucir su garra para clasificarse para unos cuartos de final de la Copa de África años después. Pero no fue para nada fácil para los de Ibénge. Delante tenían al líder del grupo, Túnez, que también se jugaba la clasificación debido a la gran igualdad que ha reinado en este cuadro durante la primera fase de la competición.
Los leopardos eran conscientes de que les iba la vida en este partido, y con esa premisa salieron a jugar con el dominio del balón, sin conseguir llegar a la portería de Mathlouthi. Sin embargo, Túnez remontó la cuesta inicial del partido y empezó a llegar con más asiduidad a la portería de Kidiaba, que temió por primera vez en el minuto 9, cuando Akaichi falló un remate cuando el meta estaba ya vencido, gracias a los reflejos de Kimwaki, que no controló bien el rechace y llegó a Chikhaoui, quién no estuvo acertado en el remate.
El mismo Chikhaoui intentó un disparo que se marchó lejos de la portería de Kidiaba unos minutos antes de obligarle a realizar una de las mejores paradas del partido con un disparo enroscado que a punto estuvo de sorprenderlo, como hizo Akaichi en el minuto 31, adelantando a Túnez con un gran gol. Chikhaoui recortó en el interior del área, levantó la cabeza y envió un centro potente pero bombeado, perfecto para que su socio empujara el balón al fondo de las mallas.
El partido se puso cuesta arriba. Parecía cada vez más difícil para los congoleños sacar algo en positivo de esta competición. Además, los tunecinos estaban aumentando su presión y el conjunto de Ibénge se veía empequeñecido por la superioridad local, que podría haber sido mayor si el árbitro no hubiera anulado un gol de Chikhaoui por un claro fuera de juego. Con la desventaja para RD Congo se llegó al descanso y al cambio de fase del partido.
Los primeros minutos del segundo tiempo sucedieron sin ninguna acción a destacar, con un juego lento y controlado desde el centro del campo de ambos equipos hasta un evento clave que debemos destacar: la entrada del delantero del Térek Bokila, que tuvo una fase de clasificación muy buena pero que se vio relegado a la suplencia por la entrada en la lista final de Dieumerci Mbokani, quién se convertiría en su máximo aliado en el encuentro.
RD Congo empezó a carburar. El sacrificar a un extremo para meter a otro delantero centro implicó que Bolasie aumentara su movilidad y propició así un mayor ritmo de juego en RD Congo. Los laterales llegaban con más profundidad y se empezaba a notar en el ambiente que el gol estaba cerca para los congoleños, tras un buen cabezazo de Mbokani a un centro de Mpeko desde la banda. Pero el rumbo del partido pudo cambiar en una simple acción.
Cerca de los 68 minutos de partido, Khazri tuvo una de las mejores opciones de Túnez en todo el partido. Recibió un pase después de un rechace de la defensa que le dejó sólo delante de Kidiaba, pero su poco acierto propició que su disparo se fuera por encima de la portería de Robert Kidiaba, que suspiró tranquilo al ver que la distancia no aumentaba peligrosamente para su equipo.
Justo en la siguiente jugada, sucedió. Un envío largo que cruzó el centro del campo hasta la frontal llegó a Mbokani, que peleó como nunca entre dos centrales para poder alzarse unos segundos y peinar el balón. Y lo consiguió, enviando el balón a Bokila, solo ante el peligro pero con dos defensas en la retaguardia esperando frenarle antes de que pudiera armar un disparo. Sin embargo, no fue así. Bokila, de mentalidad fría, pudo esperar el momento justo para controlar el balón con la rodilla y así adelantarlo lo suficiente para así armar un disparo que sería imposible para el portero de la selección tunecina, que veía como su clasificación podía peligrar por primera vez en todo el torneo.
Sin embargo, no sucedió nada. Pese al creciente asedio de RD Congo –dos disparos lejanos de Mbemba y Kasusula estuvieron a punto de poner a RD Congo por delante–, el partido terminó con las tablas en el marcador y ambos equipos consiguieron sellar su pase a cuartos de final después del empate entre Zambia y Cabo Verde.
En cuartos de final, la RD Congo se verá las caras con Congo, mientras que Túnez tendrá una dura eliminatoria frente a Guinea Ecuatorial, la anfitriona de la competición.