Rudi García y la Roma ya han atracado en los octavos de final de UEFA Europa League. El conjunto romano logró una sufrida victoria en De Kuip ante un correoso Feyernoord que no quería despedirse de la competición europea. Los goles de Ljajic y Gervinho dieron el billete para la siguiente ronda a los italianos, que completaron un magnífico partido en el que maniataron a su rival con una intensa presión en campo rival.

Desde el primer minuto de partido se vieron claros los roles del partido. La Roma presionó cada posesión de balón de los holandeses, comandada por Il Capitano, Francesco Totti, que impresionó en su enésima exhibición con la camiseta romana. Gervinho, eléctrico como en sus mejores días, y Ljajic, muy impetuoso, colaboraron en esta misión, junto a centro del campo muy adelantado y agresivo en la recuperación.

Pese a este inicio fulgurante de los hombres de Rudi García, la Roma no lograba crear peligro a causa de la intensidad defensiva del Feyernoord, que jugaba en casa y quería demostrarlo. Eso sí, los neerlandeses no eran capaces de salir de su campo y la posesión era prácticamente un coto privado de los trasalpinos. La presión visitante ocasionó el primer susto del choque con un cuarto de hora de juego. Pjanic recuperó el balón en las inmediaciones del área rival y el balón acabó en los pies de Totti que, con su clase inmortal, lanzó una vaselina por encima de Vermeer que se fue fuera por muy poco. Esta ocasión animó a Il Capitano, que pudo abrir de nuevo el marcador en un potente disparo de falta que se estrelló al palo.

El dominio de la Roma era indiscutible, pero el Feyernoord se encargó de recordar a su huésped que ellos también querían llegar a octavos. Un disparo lejano de Toornstra hizo esforzarse a Skourupski, que mandó el balón a córner. Estos fueron los mejores minutos de los de Rotterdam, que encontraron en Kazim-Richards un filón en ataque. Pero no era su noche. El delantero turco se lesionó pasado el ecuador de la primera mitad y en el minuto 30 fue sustituido por Te Vedre.

Gol por insistencia

Los minutos finales volvieron a teñirse de color negro, tonalidad de la camiseta romana, con claras ocasiones que hicieron peligrar la igualdad reinante en el marcador. La más clara la tuvo Pjanic, con un disparo tras un rechace en el área que despejó Vermeer con una gran intervención. El refranero español dice que "tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe". Y así fue. En el descuento de la primera mitad Ljajic adelantaba al cuadro de Rudi García. Torosidis mandaba un fabuloso centro desde la banda derecha que el serbio remató de primeras para abrir el marcador. Con este tanto que daba el pase momentáneo a la Roma se llegó al descanso, con un Feyernoord superado en todos los aspectos del juego.

Ljajic celebra el 0-1. Foto: UEFA.com | Getty Images

Tras el descanso, el guión no varió mucho. Los romanos siguieron presionando agresivamente y muy arriba, pese a la ventaja en el marcador. Pese a ello, los locales estaban imprimiendo cada vez más ímpetu, hasta que éste se convirtió en errores. Te Vedre perdió el balón ante Torosidis y realizó una dura entrada para tratar de recuperar la posesión y evitar la contra. El holandés llegó tarde y derribó al griego, por lo que Turpin decidió expulsarle. Esto provocó la ira de los aficionados del Feyernoord, que comenzaron a lanzar objetos sobre el terreno de juego y el partido tuvo que suspenderse quince minutos.

Locura tras la vergüenza

Tras el parón, Manu entró en el campo en lugar de Boulahrouz. La inactividad durante este cuarto de hora desconectó levemente a la Roma, y fue algo que aprovechó el delantero del conjunto holandés. En un fallo en la salida del balón del cuadro italiano, el balón cayó en los pies del ariete de Dordrecht que se quedó solo ante Skourupski y firmó el empate. Pero la alegría dura poco en casa del pobre. En la celebración del gol fue expulsado Mulder, portero suplente del Feyernoord, y tres minutos después la Roma volvería a adelantarse. Un centro raso de Torosidis desde la derecha lo remató de primeras Gervinho para poner el 1-2.

Los holandeses vieron como todo su esfuerzo por empatar había sido inútil y la grada volvió a hacer de las suyas, lanzando más y más objetos, obligando incluso a sus propios jugadores a pedir calma. El Feyernoord se volcó en ataque, buscando jugadas rápidas que finalizasen con centros desde la banda al área. La Roma, en cambio, varió su táctica y comenzó a buscar los contraataques con un Gervinho desbocado. El costamarfileño dio un pase a Ljajic que le dejó solo ante Vermeer, pero su autopase fue demasiado largo. Manu fue el más activo en el cuadro de Rotterdam. Pudo empatar de nuevo en una contra, pero una genial intervención de Skourupski evitó las tablas.

Los minutos pasaban y el Feyernoord poco a poco se desesperó. La entrada de Manu les dio una referencia, que estuvo muy vigilada y, pese a ello, tuvo varias ocasiones, la más clara de ellas fue un centro de Toornstra que no llegó a rematar. El propio mediocentro holandés pudo marcar en un libre directo y poco después Kongolo mandó alto un rechace en el área. Las ocasiones neerlandesas eran escasas y ninguna iba entre palos, mientras que Gervinho llevaba muchísimo peligro en cada contra. Finalmente, el partido finalizó con el 1-2 y con el pase de la Roma a octavos en su pelea por ganar la Europa League.

Puntuaciones VAVEL

Feyernoord (1) Roma (2)
Vermeer 6 Skourupski 7
Boulharouz 4 Manolas 6
Van Beek 4 Torosidis 8
Kongolo 5 Yanga-Mbiwa 6
Melom 3 Holebas 6
Ahmadi 5 De Rossi 6
Toornstra 6 Keita 6
Clasie 7 Pjanic 7
Karsdorp 5 Gervinho 8
Kazim-Richards 6 Totti 7
Vilhena 4 Ljajic 7
Sustituciones
Te Vedre 2 Nainggolan 5
Manu 7 Iturbe 5
Achahbar - Paredes -
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