Irfan Bachdim fue uno de los fichajes de más renombre que se hicieron la campaña pasa en Japón tras el movimiento de Diego Forlán a Cerezo Osaka. El jugador indonesio llegó a Ventforet Kofu como una estrella ya que eso mismo era lo que era en su país donde era considerado uno de los mejores jugadores tras sus dos años en el Persema Malang, equipo donde mostró su mejor fútbol y que después abandonó para dar un salto a una liga un poco más competitiva como es la tailandesa donde firmó con Chonburi donde no mostró el mismo nivel, aún así la condición de estrella seguía unida a él tal y como lo deja patente su perfil de la red social Twitter donde tiene más de cuatro millones de seguidores.

No se le vio en los primeros partidos de 2014 con Ventforet Kofu pero tampoco nadie se extrañaba ya que todos lo achacaban a que necesitaba un periodo de adaptación pero ese tiempo se iba alargando más y más y seguíamos sin ver al indonesio incluso sentado en el banquillo. Fue el 16 de abril,  cuando, en un partido de Nabisco ante Albirex Niigata, vimos por primera vez a Irfan Bachdim sentado en el banco de Ventforet Kofu, algo que no repitió hasta agosto cuando volvió a aparecer sentado en el banquillo en un partido de liga ante Gamba Osaka en liga, el resto de partidos estuvo siempre en la grada a excepción del 21 de mayo en un partido de liga ante Tokushima Vortis donde hizo su debut jugando catorce minutos y en Copa Emperador donde también disputó unos minutos. Parecía evidente que Irfan iba a abandonar Kofu al final de la temporada ya que seguía sin darse a conocer la auténtica razón de por qué no jugó ningún partido y fue Consadole Sapporo quien terminó haciéndose con sus serviciones para el año 2015. 

La incertidumbre seguía alrededor del jugador esta temporada ya que se habían disputado ya diez jornadas de la segunda división japonesa e Irfan Bachdim no había pisado todavía el césped con la camiseta del equipo de Hokkaido, tan solo apareció en el banquillo sentado en un partido hasta dicha fecha. Finalmente logró disputar los últimos ocho minutos del partido en la pasada jornada ante Jubilo Iwata lo cual supone para él ver la luz al final de un túnel que se ha hecho muy largo para un jugador que llegó como una estrella al país del sol naciente y que tras más de un año no había emanado ni un solo ápice de resplandor.