El 2013 pasará a la historia del Werder Bremen por ser el año en el que Thomas Schaaf abandonó la disciplina grün-weiss. Tras 14 años dirigiendo el conjunto del norte de Alemania, el propio preparador fue el que dijo "basta". La horrible temporada 2012-13 y el desgaste de su puesto empujaron al de Mannheim a hacer una pausa en su vida profesional y soltar la mano del único club al que perteneció en toda su carrera, tanto como jugador como de entrenador.

Pero antes de hacer las maletas, Schaaf se convirtió en una leyenda viva de Bremen. Como jugador, el germano consiguió dos Bundesligas, tres Copas y una Recopa. Como entrenador, ganó otra Bundesliga y otras tres Copas. En la retina de todos los aficionados del Werder Bremen quedará el año 2004 con la consecución del Doblete. Las temporadas posteriores el club de la ciudad de los Trotamúsicos se convertiría en un fijo en los bombos de la Champions. Sin embargo, el globo del Werder empezó a desinflarse en 2009 tras el subcampeonato en la final de la UEFA y el proyecto Schaaf acabó por consumirse en este 2013 que despedimos.

No obstante, el último logro del ex míster del Werder fue salvar al equipo del descenso a falta de solo un partido para el final del campeonato. Los últimos tensos meses de la liga destacaron por los problemas fuera de los terrenos de juego protagonizados por Elia y Arnautovic, que obligaron al técnico a apartarlos de la plantilla. Por otro lado, la cara amable se vivió en las gradas del Weserstadion, repletas hasta el final. Y es que la comunión que se vivió entre plantilla y aficionados fue la auténtica clave para que el Werder saliera de la UVI y no acabara hundido en el pozo del descenso.

Primer semestre: catastrófica segunda vuelta de campeonato

Si la primera mitad del campeonato 2012-13 no fue para tirar cohetes, con tan solo 22 puntos en la saca, menos lo fue la segunda vuelta de la Bundesliga. Solo 12 puntos de 51 posibles lo dijo todo de un conjunto que por más que quería, no podía.

La primera cita de 2013 no era una empresa fácil. El todopoderoso Borussia Dortmund visitaba el Weserstadion y se convirtió en un vendaval. Los hombres de Jürgen Klopp pasaron por encima de los grün-weiss con un contundente 0-5 justo unos días antes de visitar al eterno rival, el Hamburgo, que se hizo con los tres puntos en un apasionante derbi del Norte tras vencer por 3-2 a la parroquia bremeniana.

Los siguientes dos encuentros supondrían un bálsamo para la escuadra verdiblanca. Sendas victorias frente a Hanover y Stuttgart calmaron los ánimos a orillas del Weser. Desafortunadamente, solo se trataría de un leve eclipse en la fatídica campaña del Werder, que desde la jornada 21 hasta la 34 no fue capaz de hacerse con los tres puntos en ninguna de las ocasiones.

Así las cosas, aunque el Werder no estaba completando una de sus mejores temporadas, eran 12 puntos de colchón los que le separaban allá por la jornada 21 del puesto de relegación. Pero en pocos partidos, esta distancia se fue encogiendo hasta los tres. Un paupérrimo bagaje de 6 puntos de 39 disponibles fue el que consiguió la plantilla de Thomas Schaaf en la recta final del campeonato. Esta mala racha le hizo coquetear dramáticamente con el descenso. Por suerte para el Werder, la afición no dio de lado a su club y se produjo una unión entre ambos sin recientes precedentes, que llevó en volandas al equipo para conseguir los últimos puntos vitales para evitar la caída a la segunda división.

Problemas notables en el vestuario

En plena caída libre del Werder a los puestos de descenso, Elia y Arnautovic agitaron los cimientos del club tras protagonizar un altercado con la policía. Ambos profesionales, fueron cazados por las fuerzas del orden y denunciados por exceso de velocidad la noche anterior a un importante choque a domicilio frente al Bayer Leverkusen.

Esta fue la gota que colmó el vaso de Thomas Schaaf y del director deportivo Thomas Eichin. Ambos decidieron expulsar a los polémicos futbolistas de la plantilla hasta la conclusión de la temporada y ponerles directamente el cartel de ‘está en venta’.

Tan solo unas semanas después, Elia volvió a las portadas de los diarios deportivos tras sufrir un accidente de camino a Holanda, donde acudía para ver la final de copa entre el AZ Alkmaar y el PSV Eindhoven.

Robin Dutt llega al banquillo del Werder

Una vez finalizada la temporada, todas las culpas de la pasada mala Bundesliga no recayeron sobre Thomas Schaaf, sino que los dedos apuntaron al ex director deportivo Klaus Allofs por su pésima planificación de la plantilla y su política de fichajes, que más que ayudar al club, acabaron sumiéndole en deudas. Allofs abandonó el barco en noviembre de 2012 para llevar los mandos en los despachos del Wolfsburgo. En febrero de 2013 llegaría Thomas Eichin para suplirlo y para confeccionar la nueva plantilla de cara a la temporada 2013-14. Los primeros retos de Eichin fueron reducir gastos y la búsqueda de un entrenador apropiado para dirigir un cambio de ciclo y que pudiera hacer olvidar la alargada sombra de Thomas Schaaf. Y el elegido fue Robin Dutt.

Dutt consiguió su mayor logro a las órdenes del Friburgo, club del que tomó las riendas en 2007 y al que llevó a Primera División en 2009. El destino le llevaría en 2011 a Leverkusen, donde no correría tanta suerte. El preparador fue destituido tras casi un año en el puesto después de cosechar una pésima racha de resultados y caer goleados por 7-1 en el Camp Nou en Champions League. La siguiente experiencia la viviría en la sede de la Federación Alemana de Fútbol, donde sustituyó a Matthias Sammer como director deportivo. Ese sería el último trabajo de Robin Dutt antes de ser presentado por el Werder Bremen en mayo de 2013.

A su llegada a Bremen, una de sus primeras y sorprendentes decisiones fue la de perdonar las salidas de tono de Elia y Arnautovic y contar con ellos de cara a la nueva temporada. Si bien es cierto que Elia sigue siendo una parte importante del equipo, Arnautovic acabó cambiando de aires con la temporada ya iniciada, algo que supuso un respiro para los aficionados del Werder, cansados de su comportamiento poco profesional.

Segundo semestre: desastre en Copa y montaña rusa en Liga

La pretemporada del Werder Bremen estuvo marcada por los altibajos. Obviando los partidos iniciales frente a conjuntos de escasa entidad, el Werder Bremen cosechó una dolorosa derrota en el campo del Sankt Pauli por 4-1 y en casa ante el Ajax de Ámsterdam por 2-3. Sin embargo, el conjunto de Robin Dutt maquilló los encuentros de preparación con una victoria por la mínima frente al Fulham en casa el día de la presentación del club ante su afición.

Antes de darse comienzo la Bundesliga, el Werder debía jugar una eliminatoria de la Copa de Alemania en el campo del Saarbrücken. A priori, no iba a suponer un gran desafío, pero el resultado final hizo tambalearse el proyecto de Robin Dutt. El histórico equipo que ahora milita en la tercera División alemana acabó con la aventura del Werder en la Copa a las primeras de cambio con un sorprendente 3-1 y una mala imagen de los aficionados bremenianos que, incrédulos, quisieron saltar al terreno de juego a pedir explicaciones a los suyos.

Sin embargo, el lavado de cara del conjunto grün-weiss llegaría en la competición doméstica. El Werder comenzaría como un tiro la Bundesliga 2013-14. Sin brillo alguno, solucionó sus dos papeletas iniciales ganando por la mínima. Sendos 1-0 ante el Eintracht Braunschweig y el Augsburgo elevaron al equipo verdiblanco hasta los primeros puestos de la clasificación.

No se cumplió el dicho de “no hay dos sin tres” para la parroquia bremeniana. El Dortmund cortó la buena racha ganando por la mínima en el antiguo Westfalenstadion. Aun así, esta derrota tuvo sabor a victoria por el sobresaliente desempeño en materia defensiva que obligó al once de Jürgen Klopp a sudar tinta para llevarse los tres puntos.

El encargado de bajar al Werder de su nube de optimismo fue el Mönchengladbach. El contundente 4-1 endosado en casa de los potros certificó las aspiraciones reales de un Werder que, otro año más, deberá apretar los dientes para mantenerse en la máxima categoría del fútbol alemán. Este hecho lo constataría el Eintracht Frankfurt con un abultado 0-3 en el Weserstadion.

Entonces llegó el esperado derbi del Norte. Werder y Hamburgo se enfrentaban en uno de los derbis más necesitados de los últimos años debido a la mala posición liguera de ambos clubes. Y ahí llegó la sorpresa. El Werder venció con facilidad al eterno rival por 0-2 a domicilio. Los hinchas verdiblancos alzaban los brazos al cielo y volvían a creer en el equipo y en cotas más altas que evitar el descenso.

Nada más allá de la realidad, el conjunto de Robin Dutt no volvería a llevarse los 3 puntos de un partido hasta pasado un mes y medio. Esta vez en otro derbi del Norte, frente al Hanover 96, que llenó de oxígeno los pulmones del equipo. Pero la alegría no duró mucho. A continuación llegaría una depresión con cinco derrotas consecutivas entre las que sobresalió la sufrida en el Weserstadion por nada más y nada menos que 0-7 ante el todopoderoso Bayern de Múnich.

Una semana después de caer frente al líder de la Liga, el calendario deparaba un difícil fin de año frente a dos peligrosos gallitos: el Hertha de Berlín y el Leverkusen. Ante los primeros se luchó pero se acabó hincando la rodilla. Así las cosas, el segundo clasificado de la Bundesliga visitaba el Wesertadion para despedir la primera vuelta concentrado en no perder la estela del Bayern. Sin embargo, el Werder jugó uno de los mejores partidos del año y ganó por la mínima al conjunto de Sami Hyypiä con un tanto de Santiago García a 15 minutos del pitido final.

En este último partido del 2013, el Weserstadion se engalanó y agradeció a los suyos el esfuerzo por acabar con buen pie tan vertiginoso año. Robin Dutt recuperó el crédito que durante meses se había debilitado y la plantilla volvió a fundirse en una afable comunión con sus aficionados.

Problemas en la portería: la prensa se carga a Mielitz

El partido que el Werder perdió por 2-3 frente al Mainz 05 a finales de noviembre vino seguido de un linchamiento público a Sebastian Mielitz por su mala actuación. Los mismos medios deportivos que han estado mareando la perdiz en torno al fichaje del guardameta Wiese para sentar a Mielitz en el banquillo, son los que han cavado la tumba del joven cancerbero alemán.

Si bien es cierto que la temporada pasada se convirtió el Werder en el equipo más goleado de la Bundesliga, no debe acusarse directamente al dueño de la portería bremeniana. La marcha de Sokratis al Dortmund y la lesión de Sebastian Prödl durante un trampo de la Bundesliga sumieron al Robin Dutt en un mar de dudas y el técnico rotó en numerosas ocasiones la línea defensiva sin encontrar una zaga fija.

Sin embargo, la influencia de los medios llevó al preparador del Werder a tomar una drástica decisión. Dutt sentó a Mielitz en el banquillo en el partido siguiente frente al Hoffenheim y anunció en rueda de prensa que Raphael Wolf iba a sustituirle hasta el término de la primera vuelta para proteger a su jugador de la presión mediática.

Por desgracia para el sustituto de Mielitz, el Werder sufriría un auténtico vendaval de goles en contra en el último tramo del año. Concretamente hasta en 14 ocasiones tuvo que recoger Wolf el balón de las redes en tan solo 4 partidos disputados (Hoffenheim, Bayern, Hertha y Leverkusen).

Para el año 2014, se mantiene aún la incógnita sobre el dueño de la portería del Werder Bremen.

Estilo de juego y once del año

Los últimos años de Thomas Schaaf al cargo del Werder no sirvieron para imprimir de cierta identidad al conjunto del Norte de Alemania. Sin ideas claras, el clásico balón arriba en búsqueda del olfato goleador de Petersen o algún destello de calidad de Kevin de Bruyne y Aaron Hunt era el guión a seguir.

La marcha del talentoso medio belga, De Bruyne, y la llegada de un nuevo inquilino al banquillo bremeniano han hecho saltar a la palestra a jugadores que la temporada pasada no tuvieron mucho peso en la plantilla. Junuzovic se ha convertido en un fijo para Robin Dutt siempre que las lesiones le respetan. Además, el caso de Eljero Elia quizás sea el más sorprendente. Apartado de la plantilla en la pasada Bundesliga, esta nueva temporada gozó del indulto de su nuevo entrenador y no se pierde ningún choque liguero. A estos nombres, hay que añadir el de Makiadi, llegado este año del Friburgo y que, aun siendo bastante irregular, se ha erigido como un pilar en el mediocampo bremeniano.

Mayor importancia en el once han cobrado dos fichajes del pasado verano: Caldirola y Santiago García. En el caso del primero, el italiano se ha hecho amo y señor del centro de la zaga. Luca, que esta temporada ha formado pareja con Prödl, Lukimya e incluso con Kroos, ha sido el único central de la defensa bremeniana que no ha rotado.

Santiago García llegó al equipo tras largas negociaciones y con la temporada ya empezada. Con Schmitz lesionado, no tuvo rival con el que competir por el lateral izquierdo del Werder. Su garra y sus buenas actuaciones le han consagrado y, a pesar de no dominar el idioma, se ha transformado en una de las vacas sagradas del vestuario y uno de los jugadores más aclamados por la grada del Weserstadion.

Sin embargo, no todos los fichajes han servido para fortalecer al conjunto y Robin Dutt ha optado por estampar un sello más defensivo al equipo, acentuando los contragolpes. En estas contras, Elia y Hunt representan los papeles principales a la hora de llevar el balón al área rival. La renuncia al esférico y a llevar el peso de los partidos es notable. Esta temporada, han descendido las llegadas a alrededor de 120, un número muy por debajo de la media de 170 de la primera vuelta del año pasado. Además, la posesión del balón también ha decaído en más de un 5% sobre el casi 50% que presentaba la pasada Bundesliga.

Teniendo en cuenta la participación y rendimiento de todos los jugadores que han formado en alguna ocasión parte de la alineación del Werder Bremen durante el año, esta sería el once titular del 2013:

Expectativas para el año 2014

La moral del Werder Bremen se ha renovado tras la última victoria del año frente al Leverkusen. Así las cosas, el sistema de juego del equipo no parece que vaya a sufrir variaciones. Esta temporada el principal objetivo del club es no sufrir para permanecer en la Bundesliga y esperar al acuerdo de colaboración que firmará con el Juventus para la cesión de jóvenes futbolistas. Al término de la presente Liga comenzará un duro trabajo para el mánager deportivo Thomas Eichin para lograr formar una plantilla competitiva que vuelva a luchar por los puestos que llevan a competiciones europeas.

Fuente de las fotografías:

- Thomas Schaaf: bundesliga.com

- Fritz y Sokratis: static.guim.co.uk

- Arnautovic y Elia: tuttobundesliga.it

- Robin Dutt: werder.de

- Plantilla en Saarbrücken: pirmasenser-zeitung.de

- Werder frente a Bayern: futbolred.com

- Sebastian Mielitz: bundesliga.de

- Santiago García: werder.de

- Alineacion del año: alineaciones.es