El Borussia Dortmund dejó atrás su racha de partidos dubitativos y recuperó su mejor versión en el Weserstadion frente a un Werder Bremen que no pudo hacer sombra en ningún momento del encuentro a la apisonadora dirigida por Jürgen Klopp. El debut de Obraniak con la zamarra bremeniana quedó colapsado por el talento de los actores del BVB. Mkhitaryan, Lewandowski y Friedrich fueron los encargados de agujerear la portería del Werder y repetir la manita que ya le endosaron el año pasado.

Tras la debacle frente al Augsburgo, el mister del Werder, Robin Dutt, sorprendía a propios y extraños con su valiente alineación en la tarde de hoy frente al actual subcampeón de Europa. Con García fuera del once por sanción, apostó por Lukymia como pareja de Prödl en la zaga y desplazó a Caldirola a la banda izquierda. El medio del campo no presentó ningún pivote defensivo y la pareja Bargfrede-Junuzovic sería la elegida para competir la posesión de balón a los peloteros borussers. Además, como plato fuerte, destacó el debut como titular del recién llegado Obraniak.

Por su parte, las únicas novedades que presentó la alineación de Klopp con respecto al once que venció por la mínima al Braunschweig fueron Friedrich y Piszczek en detrimento de Hummels y Großkreutz.

Efectividad 'borusser' en la primera parte

Desde los primeros compases del choque se dejaba entrever que se iba a tratar de un partido muy largo para el Werder Bremen. Con Caldirola fuera de sitio y un Gebre-Selassie que lleva poco inspirado toda la temporada, las bandas estuvieron dominadas en todo momento por Reus y Aubameyang.

Teniendo en cuenta la movilidad de los hombres de arriba del BVB y que Robin Dutt decidió sentar a los mediocentros defensivos Makiadi y Kroos en la tarde de hoy, cada vez que el esférico traspasaba la línea divisoria del Weserstadion los seguidores grün-weiss se temían lo peor. Sin embargo, el cuadro verdiblanco ofreció resistencia los primeros 20 minutos e incluso dispuso de un manso cabezazo de Di Santo para abrir la lata.

El BVB tuvo que esperar hasta el minuto 26 para que Robert Lewandowski inaugurara el marcador. Elia pierde el balón en la banda frente al Schmelzer, que se la entrega rápidamente al 9 polaco para que fusile al palo largo de Wolf sin oposición alguna y termine con su racha de 475 minutos sin ver puerta.

A partir de este momento, el encuentro se convirtió en un monólogo. Solo 10 minutos más tarde Mkhitaryan disponía de una clara ocasión para aumentar la cuenta pero no logró conectar en condiciones un esférico que había prolongado Aubameyang con la cabeza. No importó mucho, puesto que el mediapunta armenio se desquitó con un golazo al más puro estilo Messi en el minuto 41. Tras recibir el cuero en la frontal, el 10 borusser corre en paralelo a la meta bremeniana, esquiva a Lukymia y fusila a Wolf cruzando el balón al palo contrario. Con este gol, Henrikh cortaba otra mala racha de 1000 minutos sin marcar.

Vendaval amarillo

Tras la vuelta de vestuarios, no le hicieron falta ni tres minutos al Borussia Dortmund para poner más tierra de por medio en el electrónico. Esta vez de corner. Reus la pone al primer palo y Bargfrede no logra despejar el esférico sino prolongarlo involuntariamente hacia el segundo, donde aparece Friedrich para empujar el servicio a la red.

Con la entrada de Petersen y Kobylanski por Di Santo y Elia no cambió nada en el Werder. El BVB seguía llegando con facilidad y en el minuto 56 era Piszczek el que a punto estuvo de romper el larguero de la meta defendida por Wolf.

Gol de película ‘made in Dortmund’

Y entonces llegó el gol del partido en el minuto 62. Un robo de balón en campo del Borussia se convirtió en la tormenta perfecta. Sahin se la pasa a Aubameyang y éste a Mkhitaryan, que, tras conducir unos metros, espera a que Reus se abra a banda para prolongar el esférico. Reus recorta a Selassie ya dentro del área y asiste de tacón de nuevo a Mkhitaryan, que cruza la pelota al palo largo de Wolf y se apunta su segundo doblete de la temporada.

Con el 0-4 en el marcador, en los siguientes 20 minutos el BVB bajó una marcha y el Werder parecía conformarse. Sin embargo, aún habría tiempo para dos goles más. En el 85, Lewandowski conseguiría su doblete tras ganar un mano a mano a Wolf y rematar a la red previo caño a Prödl. Por parte del Werder, el debutante Aycicek, que apenas llevaba 10 minutos sobre el tapete, haría el gol del honor a escasos segundos para el final del encuentro.

Los tres puntos de hoy le valen al Borussia Dortmund para continuar tercero en la tabla, a cuatro puntos del Leverkusen y a 17 del líder Bayern de Múnich. Con esta victoria, el Borussia da carpetazo a la sequía goleadora de Lewandowski y deberá plantearse como próximo desafío terminar un encuentro con la portería a cero, algo que no logra desde octubre de 2013. El Werder, por su parte, deberá olvidar lo acontecido y seguir remando para no caer de lleno en los puestos de descenso. El próximo fin de semana espera un hueso duro de roer, nada más y nada menos que el Gladbach.