Tras el largo parón de las competiciones europeas, la Europa League volvía en esta jornada de jueves con partidos verdaderamente atractivos. El Oporto, recientemente eliminado de la Champions League, recibía al Eintracht que, lejos de ser el mismo equipo que recibía una goleada en el fin de semana, se mostró muy combativo durante todo el encuentro y pudo sacar un buen botín que veremos si es suficiente para confirmar su pase.

Primera parte con alternativas

A priori, el guion establecido para el partido no fue el que se vio en los primeros cuarenta y cinco minutos. El Eintracht salió con la idea clara de tener mayor posesión, conscientes de que un error ante un equipo de esa calidad le podía costar incluso la eliminatoria.

Ante el dominio visitante, el Oporto se agarraba a la calidad de su delantero Jackson Martínez, que era el único que creaba peligro para los suyos. De hecho, el colombiano fue el primero en mandar un aviso en el encuentro con un lanzamiento que conseguía atrapar Trapp. Tras esto, prácticamente nada más se vio de los locales, que pudieron incluso verse por debajo del marcador tras una ocasión de Rode que se encargó de frenar Helton.

Quaresma castiga al Eintracht

Con el descanso en el horizonte y ambos equipos dando por bueno el 0-0, apareció Quaresma para despertar momentáneamente a los de Frankfurt de su sueño europeo. El habilidoso extremo portugués la cogía en la banda izquierda, recortaba hacia dentro y colocaba el balón en la mismísima escuadra sin que Trapp pudiera siquiera lanzarse a pararla. Un auténtico golazo, y un jarro de agua fría para los de Armin Veh, que tan bien habían preparado el encuentro.

Con este marcador se llegó al descanso. Juego no muy vistoso pero efectivo para los locales, que sin hacer gran cosa iban por delante en los primeros 45 minutos.

Otro mazazo para el Eintracht

Con la segunda parte iniciada, los visitantes se dedicaron a intentar frenar una posible sangría del Oporto, mucho más activo y con más moral tras el final de la primera parte. Aunque en los visitantes Joselu era un auténtico incordio para la defensa, el gol alemán se hacía esperar y lo que llegó fue el segundo de los portugueses.

Fue de una manera que poco le gusta a los entrenadores. Falta lateral mal defendida por la defensa, que concedió hasta tres rechaces, y Varela empujaba la pelota a portería vacía sin la oposición de ninguno de sus rivales.

Joselu inicia la remontada

El 2-0 campaba en el marcador a 20 minutos para el final y nada hacía presagiar el desenlace final. Y es que, tan solo cuatro minutos después del segundo gol de los locales, Joselu cazó una pelota en la frontal del área, soltó un derechazo y consiguió recortar distancias a 15 minutos para el final. El Eintracht celebraba el gol como si de una final se tratara, a sabiendas de la importancia de marcar un gol en campo rival.

La remontada se iba a culminar en tan solo cinco minutos con otro gol visitante que dejaba Do Dragao totalmente helado. El segundo gol se producía, además, de una manera dolorosa. Córner botado desde la derecha, el balón se iba a introducir en la portería tras un remate y Sandro, en su intento por sacar el balón de media chilena, terminaba por empujar el balón a su propia portería.

2-2 de resultado final y un partido de vuelta que se avecina emocionantísimo, con un Eintracht repleto de moral tras su remontada europea, que le podrá servir para levantar el vuelo en la Bundesliga.