Un atrevido equipo del Hoffenheim hizo de aguafiestas en la presentación del Bayern de Múnich como campeón de la Bundesliga en su estadio. Un empate a 3 y la sensación de estar muy cerca de perder el partido marcarán el recuerdo de un encuentro que mostró a los dos equipos más ofensivos y goleadores de toda la temporada y en el que ambos justificaron las credenciales que les otorgan ese reconocimiento. Las malas noticias para el Bayern aumentan con la lesión de Thiago Alcántara quien salió sustituido al minuto 24 tras un choque con Kevin Volland.

Un inicio trepidante y de alto voltaje

El partido iniciaría con todas las energías de parte del Hoffenheim y con un Bayern que supo, de entrada, que debería igualar el ritmo del contrario o vería caer su invicto tan solo unos días después de verse coronado como campeón. Sobre minuto 1, el equipo de Markus Gisdol se paró sobre tres cuartos de cancha del Bayern y apretó la salida de los bávaros. La presión del Hoffenheim se vía más potenciada gracias a la falta de técnica de Van Buyten y el nerviosismo con el que Contento arrancó el encuentro.

El resultado de la presión alta llegaría sobre minuto 10, cuando un desprevenido Van Buyten se vio sorprendido ante la férrea marca de Volland y tocó hacia atrás para Starke, pero su pase salió cortó y Modeste estuvo a punto de anticiparse a la salida del guardameta muniqués y abrir el marcador.

La presión del Hoffenheim se vía más potenciada gracias a la falta de técnica de Van Buyten y el nerviosismo con el que Contento arrancó el encuentro

En 10 minutos Volland le ganaba el duelo a Contento y Modeste se aprovechaba de la extrema lentitud de Van Buyten para complicar a un Dante que rompía todo cuanto podía. Sin embargo, la respuesta bávara llegaría al 13', cuando un gran desborde de Ribéry que no llegaría a ser rematado sobre la línea de gol por Pizarro y la oportunidad quedaba en una simple aproximación. El partido comenzaba a tener los matices ofensivos que mantendría a lo largo de los noventa minutos.

La presión del Hoffenheim era intensa y, en uno de esos duelos, Thiago saldría a recibir atención médica y no podría regresar al terreno de juego. Sin embargo, de a poco, Schweinsteiger empezó a tomar el control de la media cancha y a imponer su jerarquía sobre Rudy y Polanski. Dos contragolpes del Bayern con "Schweini" como plataforma de lanzamiento eran los primeros avisos para el Hoffenheim. Sin embargo, sería el Hoffenheim el que golpearía primeros sobre minuto 22, tras un balón en profundidad de Rudy queencontró descolocado a Van Buyten y permitió que Modeste se fuera solo, enfrentará a Starke, el arquero tapara en la primera, pero el delantero tomaría el remate y la hundiría al fondo de la red. Era el 1 a 0 y la sorpresa en el Allianz Arena era evidente.Sin embargo, el Bayern sería capaz de reaccionar.

Los nueve minutos más destacados del campeón

Con el gol se produciría la sustitución de Thiago por Lahm y el Bayern agradecería dicho movimiento. Lahm se paró junto a Schweinsteiger y ambos comenzaron a gestar mejor juego con toques cortos y balones largos sorpresivos para la defensa del Hoffenheim. Al 26', un magistral pase de Rafinha desde banda derecha y por entre los centrales dejaría a Pizarro solo para acomodar de zurda y disparar de derecha pero Grahl estaba en una tarde inspirada y tapaba el disparo del goleador peruano. La presión del Hoffenheim disminuía y el Bayern empezaba a encontrar espacios que sabría aprovechar.

"La presión del Hoffenheim disminuía y el Bayern empezaba a encontrar espacios que sabría aprovechar."

Fue sobre minuto 30 cuando Lahm abrió la cancha hacia sector derecho para Shaqiri. El suizo acomodó el balón, levantó la vista y conectó un centro medido a punto penal para un Claudio Pizarro que le ganaba la partida a Strobl y decretaba el empate a 1. Un gran gol que sería la antesala de un auténtico huracán bávaro que, sobre minuto 33, tocaría el balón sobre el borde del área para que Schweinsteiger pasara a Pizarro y éste, a su vez, cediera el balón hacia atrás para la llegada de Shaqiri que, de zurda, dispararía cruzado y pondría el 2 a 1 en el marcador.

Al 36' Pizarro dejaría ir un pase tremendo de Ribéry, pero el peruano picaría el balón y su tiro se iría desviado del poste derecho de Grahl. Pero, al 39' el gol llegaría después de una magistral cátedra de salida con balón dominado de parte del Bayern que acabaría en un pase filtrado de Pizarro para RIbéry sobre banda izquierda, el francés penetraría hasta línea de fondo y conectaría un centro para que el peruano la empujara y firmara el 3 a 1 en el marcador. La jugada la iniciaron Schweinsteiger, Lahm y Danta en toda una clase sobre cómo vencer la presión alta y generar un contragolpe con destino a gol.

Relajación bávara y esperanzas para el Hoffenheim

Sin embargo, la ventaja explosiva con la que el Bayern se había hecho hizo que el equipo de Pep entrara en un momento de relajación el cual terminarían pagando caro. Sobre el 44', una falta de Rafinha sobre Firmino al borde del área provocaría un tiro libre que daría paso a un auténtico golazo de Salihovic. El volante tomó el balón, lo acomodó y conectó un zurdazo que se coló milimétricamente en la esquina superior derecha de la portería de Starke. Con ese golazo, el Hoffenheim alcanzaba el 3 por 2 y comenzaba a creer en sus posibilidades de no solo empatar, sino también de llevarse una victoria histórica en suelo bávaro.

La segunda mitad iniciaba con Mandzúkic ingresando por Götze en un intento de Guardiola por generar más preocupación en la defensa del Hoffenheim, sin embargo, el cambio le restaría toque de balón y visión de juego, lo que desembocaría en una clara ventaja para el visitante. El complemento fue menos intenso que los minutos iniciales. La tónica era la misma: Bayern intentaba salir jugando, Hoffenheim intentaba ahogarlo desde su propio campo. No obstante, la intensidad era menor y el vértigo del primer tiempo disminuyó considerablemente.

"Polanski y Rudy le daban seria batalla a Lahm y Schweinsteiger sobre el centro del campo."

Con el paso de los minutos, el Hoffenheim recuperaría la dinámica ofensiva con la que arrancó el partido y el Bayern se vería en problemas una vez más. Polanski y Rudy le daban seria batalla a Lahm y Schweinsteiger sobre el centro del campo y Mandzúkic no lograba conectar con Pizarro a la ofensiva. Ribéry lucía gris y Shaqiri perdió empuje sobre la banda derecha. Por el contrario, Volland ganaba presencia sobre el centro de la zaga bávara y Salihovic y Firmino generaban peligrosidad con pases a la espalda de Dante y Van Buyten. Contento era desbordado con facilidad y solo Rafinha ofrecía garantías sobre su banda e intentaba respaldar en ataque a Shaqiri.

Sobre minuto 74 el Hoffenheim obtendría la recompensa a su esfuerzo. Fue tras un mal rechazo de Starke que Mandzúkic no pudo ganar en el centro del campo. El balón le quedó a Polanski quien habilitó a Firmino y el brasileño aprovechó la desubicación de Van Buyten para batir, solo, a Starke con disparo cruzado de pierna derecha. El Hoffenheim empataba el partido y al Allianz Arena se le amargaba la fiesta cortesía de un visitante majestuoso en su ejecución ofensiva.

Los últimos 15 minutos se volvieron de infarto con el marcador empatado a 3. Starke le paraba dos disparos a Rudy y uno a Firmino a los 80 minutos. Al 83', Schwesinteiger buscaba en profundidad a Pizarro y Robben pero ninguno pudo pescar el balón para irse solo frente a Grahl. Al 86', Shaqiri cedería en profundidad a Robben quien acomodaría para su pierna zurda pero Grahl achicaría fenomenalmente su disparo enviándolo a córner. Elyounoussi probaba a Starke y Rudy hacía un último disparo sobre minuto 90+2. El árbtiro decretaba el final de un partido de alto voltaje y que dejó la noción de estar presenciando a las dos apuestas ofensivas más peligrosas de la Bundesliga.

Las bajas fueron significativas para el Bayern. La ausencia de Boateng y Alaba en defensa. El descanso para Kroos y Müller en ofensiva y la entrada hasta el segundo tiempo de Mandzúklic y Robben le permitieron al Hoffenheim enfrentar un Bayern disminuido en su plantel. Sin embargo, la gran virtud del visitante fue apostar por un juego ofensivo y de asfixiante presión contra su rival. No llegaron a esconderse al Allianz Arena. Llegaron a hacer todo lo posible por amargar la fiesta bávara y, porque no, apostarle a botar el invicto histórico que aún ostenta el Bayern de Múnich.Definitivamente presenciamos una cátedra de fútbol ofensivo de primer nivel.

1° Imagen tomada de: http://ww4.hdnux.com/

2 y 3° Imagen tomadas de: www.fcbayern.de

4° Imagen tomada de Fan Page Oficial de TSG 1899 Hoffenheim