Mainz y Nuremberg se daban cita en el Coface Arena, en un encuentro con objetivos contrapuestos. Los locales querían una victoria que les acercara las opciones de disputar Europa League la temporada que viene, y el Núremberg necesitaba los tres puntos como el comer para intentar salir del abismo de la segunda división.
Lo cierto es que los primeros diez minutos fueron del Núremberg, que llegaba con peligro por la banda izquierda y dejaba avisos a la portería de Karius, pero no llegaban a inquietar del todo la meta.
Pero tras varios minutos en los que parecía que el Mainz no se jugaba nada, empezaron a aparecer Choupo-Moting, Okazaki y Malli y ahí el encuentro comenzó a decantarse por los locales, que mostraron su superioridad a partir del cuarto de hora de encuentro.
Dos mazazos para el Núremberg
El Mainz 05 empezó a mandar avisos a Schäfer con disparos desde fuera del área primero de Moritz y después de Soto, que se marchaban por encima del larguero, pero a la tercera iba a ir la vencida. Okazaki hacía acto de presencia en el encuentro para rematar un centro desde el medio del campo de Geis, y conectar un cabezazo ante la parsimonia de la defensa visitante que le dejaba solo en el área pequeña.
Lejos de guardar la ropa, el Mainz tuvo los mejores minutos del partido con prácticamente una ocasión por minuto. Tan solo instantes después del gol, Schäfer tuvo que hacer un paradón a Soto, que se revolvía en el área y sacaba un gran disparo. Después iban a llegar sendos disparos de Moting y Malli que no veían puerta por muy poco
A un minuto del final de la primera parte llegó el 2-0, en una acción que retrata muy bien los problemas defensivos del Núremberg durante toda la temporada. Fallo en el despeje a la salida de un córner, el balón que quedaba muerto en la frontal, y Moritz fusilaba sin contemplaciones para dejar una ventaja al descanso muy justa para los locales.
Schäfer salva la goleada
Lejos de cambiar la mentalidad de la primera parte, el Núremberg pareció dar otro paso hacia atrás en el encuentro y a punto estuvo de llevarse un saco de goles en su visita. Y es que, Schäfer hizo hasta tres paradas de mérito para mantener a su equipo con un hilo de vida en el encuentro.
Bien es cierto que el Núremberg tuvo algún atisbo de peligro con una falta escorada que daba en el larguero y con un lanzamiento desde fuera del área de Stark, que se fue fuera. Ahí murieron los ataques visitantes y comenzó a cobrar protagonismo su guardameta.
Primero fue con una gran contra conducida por Malli, que dejaba solo a Choupo-Moting, que no podía superar al portero del Núremberg que se lanzaba abajo y despejaba el mano a mano con la pierna.
Después fue el turno de Malli, que antes de dejar el partido dejo su sello en forma de disparo pegado a la base del poste que obligaba a Schäfer a hacer la mejor parada del partido con una gran estirada y una mano imponente abajo para desviar a córner.
El partido pegó un bajón en los últimos 15 minutos sobre todo por el descenso en la intensidad de juego del Mainz, sabiendo que los tres puntos no se iban a escapar y menos viendo el escaso juego de los visitantes. Solo Drmic en los últimos minutos lo intentó primero con un tímido disparo y después con un flojo cabezazo.
El Núremberg dormirá como colista de la Bundesliga y lo que es peor, con una imagen mucho por mejorar, mientras que el Mainz se coloca ahora mismo en puestos de Europa League a la espera del partido entre Schalke y Gladbach de mañana.