Una vez finalidad la temporada, hay que destacar quiénes han sido los mejores jugadores y quiénes han destacado por encima del resto. Para hablar del jugador revelación de la temporada hay que mencionar de forma obligada a un chico joven de 20 años que está llamado a ser una estrella mundial de aqui a unos cuantos años. Estamos hablando de Hakan Çalhanoglu.

'El Príncipe', como algunos lo han apodado en Hamburgo, ha realizado una excelente temporada en el club hanseático, siendo de los pocos que aprueban el curso gracias a sus fantásticos partidos tirando del carro de su equipo. Además sus estadísticas (31 partidos y 11 goles) hacen que el turco sea el nombre del verano, ya que desde que finalizó la temporada numerosos clubes importantes quieren hacerse con la ficha de Hakan, como es el caso del Bayer Leverkusen que a dia de hoy tiene las papeletas para ser el equipo que disfute la próxima temporada de sus servicios.

Nacido en Alemania, pero de familia turca, Çalhanoglu ha pasado por todas las categorías inferiores de la selección otomana, llegando a debutar con Turquía el pasado septiembre frente a Andorra. El Hamburgo no quiso desaprovechar la oportunidad de hacerse con él en el verano del 2012 y lo firmó por 2.5 millones de euros para cederlo inmediatamente después al Karlsruher, con el fin de que siguiera su progresión. En dicha cesión, Hakan ayudó a ascender a la 2.Bundesliga al equipo aportando 14 goles. Pero no todo es "color de rosa" ya que su falta de experiencia y veteranía le han jugado malas pasadas durante el transcurso de los partidos al no saber dirigir al equipo. Pese a ello, ha sido parte fundamental del equipo de Slomka evitando el descenso de categoría.

¿Y cómo juega?

Se trata de un centrocampista ofensivo, situándose en la posición clásica de "10", partiendo la mayoria de las veces desde la banda pero que de igual manera contribuye a la creación del juego regalando numerosas asistencias. No llega a ser un jugador brillante en el regate, como lo pueden ser otros jugadores como Iniesta, Silva o Mesút Özil, pero su efectividad de cara a portería lo suple a la perfección además de su potente velocidad. Una virtud que no estamos acostumbrados a ver en un mediapunta, posición en la que también disfruta jugando. Una última cosa, pero no menos importante, es su golpeo a balón parado. El guante que tiene en los pies (algunos lo comparan con David Beckham), provoca que casi siempre las faltas que bota desde la banda lleguen con mucho peligro al área pequeña. Es otra virtud fantástica de este joven jugador turco que está llamado a ser la estrella de Turquía en los próximos años.

Para prueba de su gran golpeo a balón parado una muestra: el gol que anotó ante el Borussia Dortmund esta temporada: