El encuentro menos atractivo de la sexta jornada de la Bundesliga lo protagonizaron Friburgo y Bayer Leverkusen, que no aprovecharon sus ocasiones y se llevaron un punto que no agrada a ninguno de los dos equipos. Ambos llegaban con diferentes objetivos pero con la intención de seguir sumando puntos, que en el caso de 'las aspirinas' sirvieran para seguir la estela del lider. 

Iniciativa visitante, incluso en inferioridad numérica

A manos de Calhanoglu y Son, los visitantes llevaron la manija del encuentro y era previsible que el gol llegaría en cualquier minuto. El Friburgo, se defendía y quería buscar una salida rápida a la contra para que Freis o Philip tuvieran alguna oportunidad en algún momento. 

Antes de la media hora, llegó una clara ocasión a manos de Kiessling. El delantero se plantó solo ante el portero pero en vez de tirar a puerta decidió ceder a un compañero para que este chutara a gol, pero la defensa atenta del Friburgo se anticipó y evitó el primer tanto del partido. Justo después llegó la acción polémica del partido. Spahic fue amonestado por segunda vez y tuvo que marcharse a vestuarios antes de tiempo ya que fue expulsado por una acción rigurosa en el centro del campo. El central, que ya había recibido amarilla en los primeros minutos, no se andó con cuidado y dejó a su equipo con un jugador menos, que a la larga lo notaría por la falta de frescura.

El Friburgo vio la posibilidad de poder llevarse incluso la victoria con esta superioridad numérica y tuvo sus mejores minutos en el terreno de juego. Schmid centró desde la banda derecha para que Pavel Krmas rematara de cabeza y su balón fuera sacado bajo palos por Leno, una gran parada del portero que evitó que su equipo se pusiera por debajo en el marcador con un hombre menos en el campo.

16 tiros del Bayer, de los cuales 8 a puerta En la reanudación, los visitantes a pesar de estar con un jugador menos parecía no importarle ya que se volcaron sobre la porteria de Bürki. Alrededor de los 60 minutos de partido, llegaron las mejores ocasiones para el Leverkusen. Bellarabi por dos veces iba a probar suerte pero se topó con Bürki en primera instancia y con el larguero más tarde. En la primera de ellas, el marroquí mediante una jugada personal se plantó en el borde del área y su tiro raso lo despejaría con los pies el portero suizo. En la segunda ocasión, Bellarabi estrelló su balón en el larguero y cuando bajó, pegó en la linea de gol por lo que no subió al marcador. 

El partido se volvía a abrir, y el gol podía llegar en cualquier momento para cada equipo. Aun mas, cuando el defensa del Friburgo, Krmas, vió la roja directa por juego peligroso ya que dejó los tacos por delante en una pugna por el balón con Lars Bender. El coreano Son, disparó de nuevo de falta directa en los últimos minutos pero su tiro es estrelló de nuevo en el larguero, uno de los artifices del gran punto obtenido por el Friburgo y que en la jornada del sábado estuvo de su lado. 

Empate a cero final, que no dejó satisfecho a ninguna parte, salvo al espectador neutral que a pesar de no ver goles vio un partido donde hubo muchas ocasiones y donde Bürki, el portero local, se disfrazó de "santo" para conseguir un punto importante para la permanencia de su equipo en la Bundesliga.

El Leverkusen no se lleva un buen sabor de boca aunque continuará en puestos Champions una jornada más. Se sitúan en tercera posición a 3 puntos del Bayern de Múnich, y ya tienen que pensar en máxima competición europea, ya que la próxima semana se enfrentan al Benfica, en la segunda jornada de la Liga de Campeones.