Tocado y hundido venía el Schalke 04 tras ser goleado en la Champions por el Chelsea. Necesitaba una victoria para no ver como la cabeza de Di Matteo caía. Por su parte, el Mainz 05 llegaba al Veltins Arena tras empatar a dos contra el Friburgo en la pasada jornada de la Bundesliga. La necesidad del Schalke 04 de ganar para pensar en la zona alta, y la necesidad del Mainz 05 de ganar para no ver el descenso cerca, convertió en trascendental el partido que iba a enfrentarles.
Con los jugadores sobre el terreno de juego, el Mainz 05 empezó el partido sacando de centro. No tardó mucho el equipo minero en encontrar la primera ocasión, y en el minuto tres Huntelaar disparó contra Karius, pero el portero del Mainz 05 atrapó el balón. A los tres minutos llegó la primera ocasión para el Mainz 05, con un centro desde la banda que Fährmann blocó. Poco iba a durar el empate a cero en el marcador.
Empate roto desde el principio
En el minuto nueve, Huntelaar abrió la lata con una gran jugada en la que Uchida puso un buen balón que Choupo-Moting peinó, y que Huntelaar, de vaselina al primer toque, mandó a la red. El conjunto local siguió imprimiendo ritmo, y tres minutos después del gol, tuvo una internada por la banda en el área de Karius, que supo detener. Durante esos minutos, el dominio del partido estaba en manos del Schalke 04, sin embargo, poco a poco, el Mainz 05 supo recomponerse del gol de Huntelaar y fue robándole el cuero al Scalke 04. El Schalke 04 falló tres oportunidades seguidas, pero se quedaron rondando la portería de Karius. El efecto Di Matteo se sentía en el campo y los jugadores tocaban y tocaban en el área visitante. En el veinticinco, Huntelaar marcó su segundo gol gracias a un genial pase de la muerte.
La balanza se inclinaba para los locales
Pero el Mainz no se echó atrás y siguió teniendo ocasiones claras. En una de ellas, Okazaki recogió un balón muerto en el área pequeña, tras el despeje del portero minero, y marcó a puerta vacía el único gol del Mainz 05. Con 2-1 se llegaría al descanso del partido.
El ambiente en las gradas del Veltins Arena era sencillamente impresionante. Cincuenta mil bufandas al aire tras el descanso, reflejaban el buen ambiente del partido. Ni la hora ni el frío impidieron que el estadio se llenara con aficiones de ambos equipos.
Comenzaba la segunda parte sacando el Schalke 04 de centro, pero eso iba a ser lo poco que iban a tocar el balón los locales, ya que el Mainz 05 saltó al campo con la misión de empatar el partido. Los visitantes tuvieron el control total del juego durante los primeros diez minutos de la segunda parte, pero el cambio de Barnetta por Kirchhoff le iba a salir bien a Di Matteo. En el minuto cincuenta y cuatro, el jugador suizo cogió el balón en la frontal de la portería del Mainz 05 y lo puso con un disparo formidable en el fondo de la portería. Los visitantes vieron como sus esperanzas desaparecían con el 3-1.
Barnetta mata las esperanzas visitantes
Cinco minutos después, Huntelaar, aprovechando un gran pase de Choupo-Moting, sentenció el partido, cerrando con un hat-trick la goleada minera. El Mainz 05 levantó la cabeza y tuvo ocasiones en los diez minutos siguientes, que el portero del Schalke 04 atrapó. Los visitantes vieron como hacerle daño al Schalke 04, a través de los lanzamientos de falta directa que, si no acabaron en gol, fue por las espléndidas paradas de Fährmann. Con un córner a favor del Mainz 05 que el meta minero detuvo acabaría el partido.
Tras finalizar el encuentro, los jugadores del Schalke 04 se fueron a celebrar la victoria junto a sus aficionados, mientras que los jugadores visitantes, cabizbajos, se marcharon a agradecer el apoyo a los aficionados del Mainz 05 que se habían desplazado al Veltins Arena.
El Schalke 04 obtuvo un valiosísima victoria, con goleada incluida, que le deja en la zona alta de la clasificación, mientras que el Mainz 05 se queda en la zona media de la tabla. En la próxima jornada, el Schalke 04 se enfrentará al Stuttgart como visitante, y el Mainz 05 visitará al Hamburgo.