Dos polos opuestos. Así se resume el 2014 de un Bayern de Múnich que pasó de la gloria al infierno en le primer semestre, pero que en el segundo parece recuperar el rumbo hacia las divinas mieles de la victoria y la total superioridad en Alemania y Europa. Con grandes cambios en su plantilla, movimientos interesantes en el sistema táctico del equipo y toda una amalgama de emociones, el Bayern de Múnich de Pep Guardiola cerrará un 2014 tal y como lo abrió: mostrando podería, superioridad y excelencia. Sin embargo, el mes de abril y parte de los primeros días de mayo quedarán como la mancha negra en un año que podría catalogarse de perfecto a excepción de ese corto pero oscuro período.

El triunfo histórico de una orquesta afinada en récords

El Bayern abrió el 2014 con una tendencia propio del 2013: ganar, ganar y seguir ganando. Las predicciones sobre el punto de calidad que el equipo podía ofrecer con Guardiola al mando eran claras y se mostraban cada vez más evidentes. Los primeros meses de este año el Bayern siguió siendo la maquinita demoledora que había sido en 2013 y mostraba un punto de poderío todavía más notable que el de Heynckes. Sin embargo, ese mismo poder terminó por nublar su mente y afectar su competitividad, logrando que la debacle fuera el terreno al cual llegaría toda la calidad mostrada hasta ese momento.

La vigésima quinta Bundesliga de su historia se firmaba bajo la mano de Guardiola

El 2014 abrió con el título histórico para Guardiola. El Bayern se superaba a sí mismo alcanzando una liga de récord en la fecha 27 ante el Hertha de Berlin en el mítico Olympiastadion. Un 1-3 categórico fue el punto final de una liga que se cerraba mucho más antes que el torneo anterior y con un Bayern mucho más firme que el del curso pasado. La vigésima quinta Bundesliga de su historia se firmaba bajo la mano de Guardiola, el entrenador que prometía un futuro lleno de glorias y bonanzas a las arcas bávaras.

El título de Bundesliga de este año fue también el de los récords. Algunos de los récords que el Bayern de Guardiola batió en este 2014 fueron:

  1. Mayor número de partidos invicto para un equipo en Bundesliga: el Bayern de Múnich cerró su título con 53 partidos sin perder de forma consecutiva, quedando únicamente a cinco de los 58 del Milan y superando los 36 del Hamburgo
  2. Mayor número de partidos invicto en una sola temporada: con 28 partidos sin perder, el Bayern superó la marca de 27 juegos sin conocer la derrota en una sola temporda del Bayer Leverkusen.
  3. Primer equipo en coronarse campeón en el mes de marzo: con la victoria de 1-3 ante el Hertha el 25 de Marzo de 2014, el Bayern fue el primer club alemán en afianzar la ensaladera en el mes de marzo.
  4. Campeón más tempranero: a falta de siete fechas, el Bayern conquistó por el título de Bundesliga con el récord de haberlo logrado mucho más antes que nadie en la historia del fútbol alemán.
  5. Mayor racha de victorias consecutivas: el Bayern firmó un total de 19 triunfos de manera contínua y se consagró como el máximo exponente en ese rubro.
  6. Mayor racha de victorias como visitante: sumando 10 triunfos fuera del Allianz Arena, el Bayern de Pep es el equipo más ganador de manera seguida como visitante de toda la historia.
  7. Mayor racha goleadora: tuvieron que pasara 64 partidos consecutivos para que el Bayern se quedara sin ver portería en Bundesliga.

Sin lugar a dudas el 2014 es sinónimo de éxito para un Bayern de récord que hacía honor al apelativo de "RékordMeister" sin que alguien pudiera objetarlo. Sin embargo, ese mismo sentir victorioso sería la cruz y calvario para Pep Guardiola y el equipo muniqués.

Las caída que generó el cambio

Pero el título dejó cierta noción de confianza sobrada y excesos de soberbia en el club bávaro. El espíritu competitivo desapareció y comenzaron a darse por ganadores desde antes de cada partido. Como resultado, un 3-3 ante el Hoffenheim y una caída de 1-0 ante el Augsburgo (que significó la ruptura de todos los récords) dejaron todo listo para la más dolorosa eliminación bávara de un torneo continental. En una semifinal desconocida para los de Guardiola, el Real Madrid los despachó con global de 5-0 y con la dureza de la realidad golpeando el rostro de toda la hinchada bávara. No eran invencibles.

El espíritu competitivo desapareció y comenzaron a darse por ganadores desde antes de cada partido

El siguiente golpe vino con el 0-3 ante el Dortmund en el Allianz Arena y con triunfos mucho más ópacos ante los débiles Eintracht de Braunschweig, Werder Bremen, Stuttgart y Hamburgo. Sin embargo, la final de la DFB Pokal fue un aliciente extra para los de Guardiola, quienes tomaron un aire más competitivo y volvieron a las raíces propias de lucha del espíritu bávaro original. La victoria de 2-0 ante el Dortmund en un partido aguerrido y bastante disputado por ambos equipos fue el regreso de la confianza y la sanidad a las heridas que la Champions había dejado.

La renovación musical y los nuevos orquestadores

Con la temporada ya cerrada y el éxito alemán en la Copa del Mundo, el Bayern de Múnich se tomó el tiempo necesario para meditar en lo sucedido entre Marzo y Mayo de 2014. El mutismo selectivo de Guardiola asustó a propios y extraños, pero, a la vez, generó un aire de confianza en la meditación profunda del catalán. Sammer y Rummenigge ratificaron su confianza en Pep y el Bayern decidió continuar con el camino que habían confiado al de Santpedor.

El mutismo selectivo de Guardiola asustó a propios y extraños, pero, a la vez, generó un aire de confianza en la meditación profunda del catalán

La plantilla se renovó en dos movimientos claves de cara a la siguiente temporada. Toni Kroos, elemento clave para Guardiola, fue vendido al Real Madrid y Mario Mandzúkic, centrodelantero que volvía a fracasar dentro del concepto de "Falso 9", era enviado al Atlético de Madrid. Sin embargo, las llegadas de Robert Lewandowski, Sebastian Rode, Medhi Benatia y el ascenso de juveniles como Gianluca Gaudino y Pierre-Emile Hojbjerg hacían pensar en un plantel cerrado y listo para la segunda parte del año y con vistas a mejorar el pésimo cierre del equipo.

Pero la clave estaría cerca de llegar. Sin tenerlo entre los planes y producto de una serie de bajas sufridas durante la pretemporada, el Bayern de Múnich se hacía con los servicios de Xabi Alonso, un mediocentro de basta calidad y experiencia que llegaba en plan de sustituto de Kroos y para oxginer una línea de volantes sumamente golpeada por las lesiones. La llegada de Alonso, criticada por muchos medios de Múnich, terminaría siendo el punto clave para entender al Bayern de la segunda mitad del año, uno más firme, más potente y menos frágil ante los embistes rivales. La clave de la evolución tuvo en Xabi Alonso a su protagonista.

Xabi Alonso fue el fichaje final del Bayern para la temporada 2014-2015. // (Foto de mundodeportivo.com)

El Bayern 2.0 y el fantasma de las lesiones

Con los fichajes listos y todo preparado el Bayern de Múnich arrancaba su segundo ciclo con Guardiola al frente. Desde el comienzo, los interesantes movimientos de un 4-3-3 a un 3-4-3 comenzaron a llamar la atención de todos, sobre todo, tomando en cuenta que jugadores como Alaba o Rafinha eran reubicados como centrales o, incluso, Robben era trasladado a casi un lateral por la derecha y Götze a funciones de interior en el centro del campo. Lahm y Alonso entraban en escena sobre el centro y Neuer presumía sus cualidades de líbero, dándole al equipo una solvencia defensiva poco conocida hasta entonces.

Con los fichajes listos y todo preparado el Bayern de Múnich arrancaba su segundo ciclo con Guardiola al frente

Es así como, desde el arranque de temporada, el Bayern de Múnich fue carburando de a poco y entrando en su nueva dimensión futbolística, la cual lo tiene en lo más alto de la Bundesliga y candidateado, una vez más, para hacerse con la UEFA Champions League. Los fichajes han engranado a la perfección y el equipo resiente poco las múltiples bajas que posee. Además, jugadores como Schweinsteiger fueron llegando a lo largo de la temporada y evitando fisuras tras las caídas de otros como Alaba o Lahm sobre el cierre del año.

La segunda parte del año, más allá de la notable evolución del Bayern en su idea de juego, destaca también por las múltiples lesiones. Las caídas de Javi Martínez, Bastian Schweinsteiger y Thiago Alcántara en pretemporada, más las de Philipp Lahm, David Alaba, Claudio Pizarro y Pepe Reina durante la temporada comenzaron a mostrar un posible punto débil del Bayern, el cual, sin embargo, ha sido bien repuesto por Guardiola y por la disposición total de su plantel. Actualmente, el Bayern cierra con los siguientes lesiones, quienes podrían conformar un once titular:

Sin embargo, la evolución táctica del equipo ha sido tan destacada que las lesiones no han sido motivo de retraso en su desarrollo, por lo que el Bayern cierra el año con 41 goles a favor, 4 en contra y 45 puntos en 17 partidos disputados. En Champions League, los bávaros sumaron 15 goles a favor, 4 en contra y un total de 15 puntos en un grupo que compartieron con la Roma, el Manchester City y el CSKA Moscú.

El Bayern del segundo semestre es uno menos elegante y más obrero

La innovación táctica de Guardiola también ha dejado su componente emocional. El Bayern del segundo semestre es uno menos elegante y más obrero. Los jugadores corren más a toda velocidad y generan mayor vértigo pero con la misma precisión en el toque de balón y la misma idea de monopolizar el esférico. Más que cambiar la idea, el Bayern ha logrado evolucionar, mezclando la verticalidad con el trato exquisito del balón, logrando un equipo impredecible y capaz de romper al rival de múltiples formas. No solo es una cuestión de pizarrón. Es también un cuota diferente de intensidad.

En este aspecto, cabe destacar al jugador más brillante de la segunda etapa del año y, quizas, de todo el 2014: Arjen Robben. El holandés es una máquina partido a partido y se ve ampliamente beneficiado en el cambio de mentalidad dentro del equipo muniqués. Junto a Robben, Xabi Alonso y su jerarquía en la zona media, Jérome Boateng y su frialdad como líbero, Manuel Neuer y sus exhibiciones como central, David Alaba y su extrema polivalencia y Juan Bernat y Lewandowski como refuerzos de rápida adaptación, serían el resto de figuras a destacar en este segundo ciclo del 2014.

Apuntes finales

Sin duda alguna, el 2014 ha sido un año exitoso para el Bayern de Múnich. En palabras de Thomas Müller "el equipo ha logrado muchos éxitos. Lastimosamente la caída en Champions hace nublar todo lo obtenido. El juego ha mejorado y la intensidad también. El 2014 ha sido un buen año". De igual forma, la liga de los récords y la Pokal del corazón fueron los títulos claves que en nada pueden ocultarse ante la pérdida de la Supercopa Alemana o la caída en Champions ante el Real Madrid. El Bayern sigue en evolución y el 2015 podría ser el punto final de una cadena evolutiva que podría conducirles a la supremacía continental y mundial.