Cuando las grandes figuras faltan, es el momento en que los jóvenes con hambre de triunfo aparecen. Esa premisa fue la que uso Sebastian Rode para guiar al Bayern de Múnich a una nueva victoria frente al Hoffenheim de 0-2. El joven volante marcó un golazo y manejó los ritmos del equipo bávaro mostrando un enorme carácter y una brillante calidad como el mediocentro dentro del esquema de Guardiola. Con el triunfo, el Bayern afirma cada vez más el camino hacia su tricampeonato y queda a tan solo dos triunfos para darse por ganador de la presente Bundesliga.

"It's Rode's Time"

Para este partido, y enfocado totalmente en el encuentro del próximo martes ante el Porto, Guardiola dejó en la banca a Xabi Alonso y Thiago Alcántara, además de prescindir de Lahm por problemas gastrointestinales, lo que dejó a Gianluca Gaudino y Sebastian Rode como los ejes del centro del campo bávaro. De igual forma, Weiser ocupó un lugar en el once y Badstuber y Dante vieron acción como pareja de centrales ante el descanso de Boateng. Por su parte, el Hoffenheim alineó a sus mejores piezas y dejó claro su intensión ganadora al colocar a Modeste, Volland y Firmino como tridente de ataque.

El partido arrancó con la clara demarcación de un Bayern fundamentado en Rode como mediocentro

Con dichas oncenas, el partido arrancó con la clara demarcación de un Bayern fundamentado en Rode como mediocentro y en Gaudino y Rafinha como claros interiores dentro del sistema táctico. Así, rápidamente comenzaron a aparecer los toques de balón y la fluidez en la salida con un Rode inspirado desde el comienzo. Ya sobre el primer minuto, el volante filtraba un balón largo para Weiser cuyo centro era bien rechazado por Strobl en el fondo. La respuesta local llegó al 3' con un disparo lejano de Toljan que rebotaba en Badstuber.

Al 6', Bernat trepaba por izquierda y colocaba un centro a segundo poste que Weiser tomaba en volea pero Firmino llegaba a tiempo para impedir el disparo. Modeste ponía a pensar a la defensa bávara con un soberbio cabezazo al 14' que se iba apenas desviado. Pero, luego, al 17', un centro de Weiser era aprovechado por Lewandowski quien cabeceaba alto y apenas arriba de la puerta de Baumann. El partido emergía en un ida y vuelta con un Bayern de posesión y un Hoffenheim de contragolpe. Las dos apuestas más conocidas del fútbol alemán en la época moderna.

Poco a poco, Gaudino y Rode comenzaban a complementarse en el centro del campo. El primero, más técnico y versátil, llebava el balón a zona de ataque gracias a la coordinación de pases que el segundo dirigía. La pareja parecía perfecta hasta que, al 29', un nuevo error de Dante dejaba solo a Modeste frente a Neuer, pero su disparo era bien tapado por el meta bávaro con lo último de su pierna derecha. Dos minutos después, Götze hacía un pase de lujo para Lewandowski pero el control del polaco quedaba largo y fácil para el rechazo de Strobl.

Gaudino y Rode comenzaban a complementarse en el centro del campo

El susto de Modeste y la buena acción de Götze marcaban la antesala para que, al 37', un balón de Gaudino era tomado por Müller, quien recortaba a Toljan y sacaba un zurdazo bien despejado por Baumann. El rebote era tomado por Lewandowski quien hacía el movimiento hacia fuera del área, dejando el pase hacia atrás para Rode, quien acomodaba y sacaba un derechazo sublime que se colocaba en el ángulo superior derecho de la puerta de Baumann para abrir el marcador. Era el 0-1 y el justo premio al mejor jugador del Bayern en la cancha.

El recorte oportuno de Rode, rayando en la pena máxima dentro del área, fue la clave para evitar la caída de la puerta de Neuer

Tras el gol, el Hoffenheim encendió motores, adelantó líneas y ubicó a Rudy y Polanski más cerca del área de Neuer para generar un mayor control y contención de la zona creativa bávara. Con ello, llegaron los disparos de Firmino y Rudy al 39' y 40', más una acción de Rudy y Polanski en el 41', donde el recorte oportuno de Rode, rayando en la pena máxima dentro del área, fue la clave para evitar la caída de la puerta de Neuer. Con dichas acciones se cerraba la primera parte con Rode como protagonista y Gaudino como su co-estrella ideal en el centro del campo.

El Show de Rode continúa

El segundo tiempo arrancaba con el susto de Bernat quien, en una pelea por el balón con Schwegler, quedaba resentido y era removido en el entretiempo por Jerome Boateng. Así, el Bayern pasaba a línea de tres con Rafinha y Weiser en los costados. El resultado fue una rápida acción de Lewandowski por izquierda, quien recortaba a Beck, sacaba el disparo, pero el ligero desvío en Strobl hacía que el balón impactara en el larguero. Luego, al 49', Götze sacaba una finta de la chistera y quedaba solo en el área, pero su disparo salía flojo a manos de Baumann.

Un minuto después, un despiste de Dante obligaba a Neuer a salir de su área y recortar a Volland, para que, al 51', el propio Volland conectara desde fuera del área y Neuer se luciera con el tapada a pleno vuelo. Tras esta acción, el partido decayó en una serie de faltas y agresiones que mermaron la fluidez que ambos equipos traían. Es ahí donde Guardiola leyó el tiempo del partido y sacó a Gaudino, de gran faena, dando paso a Thiago, quien se transformó en el socio perfecto de un excelso Rode en la conducción del juego.

El 'Efecto Thiago' no se hizo esperar y, al 58', un quiebre de cintura del volante hispano-brasileño dejó parados a Rudy y Schwegler, dejando que Thiago se internara en el área y sacara un derechazo bien tapado por Baumann. El rebote, corto y dentro del área, era pescado por Müller pero, de forma casi milagrosa, el propio Baumann se vestía de héroe y tapaba el disparo de Müller de frente a la puerta. Al 61', Götze hacía un taco en el área que dejaba solo a Müller, pero el cruce oportuno de Beck anulaba la jugada y mantenía la calma en la puerta de los locales.

El 'Efecto Thiago' no se hizo esperar

Al 63' era Weiser quien se colaba por su banda y sacaba un derechazo rasante y seco que rebotaba en Beck y, al 73', Lewandowski volvía a quedar solo en el área tras el pase mágico de Thiago, pero Baumann le negaba una vez más el grito de gol. Müller y Boateng lo intentaban de fuera de área al 75' y 77', mientras que Rudy asustaba a Neuer al 80', pero el partido comenzaba a ser controlado plácidamente por el Bayern de Múnich. Sin embargo, la ventaja mínima y la sensación de vulnerabilidad en defensa cada vez que el Hoffenheim se asomaban ponían los nervios de punta al banco bávaro.

Los últimso minutos fueron un empuje constante del Hoffenheim sobre el área del Bayern, aunque con Lewandowski, Rode y Thiago teniendo los disparos claros para aumentar el marcador sin poderlo conseguir por culpa de Baumann. Sin embargo, ya al 93', una gran escapada de Thomas Müller por derecha le permitía colarse por todo el sector defensivo y mandar un centro a segundo poste para llegada de Götze. Pero, quien sí llegó primero fue Andreas Beck, hundiendo el balón en su portería y sellando el 0-2 definitivo en el último suspiro del encuentro.

Con este resultado, el Bayern de Múnich llega a 73 puntos y a la espera de lo que el Wolfsburgo haga mañana. Si los lobos caen, estarían dejando todo para que un triunfo del Bayern en Allianz Arena ante el Hertha Berlin la próxima fecha los corone como campeonas de la Bundesliga. Pero, de ganar los lobos, el Bayern quedaría a tan solo dos victorias de proclamarse campeones del torneo de liga en Alemania. Por ahora, la concentración bávara queda enfocada en el martes, para su partido de vuelta de los Cuartos de Final de la Champions League ante el Porto, donde los bávaros deben esforzarse para remontar el 3-1 en contra que sufrieron en su visita a Portugal.