Dos equipos que están pasando horas bajas. Lejos de esas temporadas de gloria, Schalke 04 y Stuttgart necesitaban la victoria para no ver como esta temporada se hacía más aciaga. Los mineros solo podían pensar en la Europa League, pero tendrían que ganarse un puesto en la competición europea. Por parte del Stuttgart, sacar tres puntos del Veltins Arena serían de gran ayuda para conseguir la salvación y empezar a poner un poco de tierra entre ellos y los equipos de descenso. Tres puntos necesarios para dos equipos con objetivos distintos.
Partido igualado con momentos para ambos equipos
El partido empezó brusco. Nada más empezar Maxin tuvo que ser atendido por los servicios médicos del Stuttgart, al ser golpeado por el balón. El Schalke 04 buscó un gol rápido y contó con más llegadas al principio. Un centro de Goretzka, casi acaba en el fondo de la red si Huntelaar hubiera llegado a tiempo. A los nueve minutos, el delantero holandés recoge un balón despejado en la portería y manda el esférico al fondo de la portería. El Schalke 04 era mejor en los primeros minutos, pero con el paso de los minutos empezó a meterse en el partido. Los locales eran letales al contraataque. Frente a la pasividad defensiva visitante surgió la figura del portero del Stuttgart, Sven Ulreich, que estuvo muy atento bajo los palos, salvando a su equipo en varias ocasiones.
Seguía dominando el Schalke 04, pero a los veintidós minutos, un pase de Ginczek a Harnik acabó sorprendiendo al portero local, que hasta entonces no había tenido mucho trabajo, y el jugador austríaco del Stuttgart marcó un gol de bellísima factura. Volvía el empate al marcador. Tras el gol de los visitantes, el partido tomó otra dinámica más conservadora e igualada. Las ocasiones se repartían entre ambas áreas. Los pupilos de Di Matteo buscaban el gol con contraataques y de jugadas, mientras que los de Stevens generaban peligro a través de lanzamientos de esquina. Con el paso de los minutos, la intensidad inicial se fue diluyendo y con empate a uno se fue el partido al descanso.
Boateng, Draxler y Meyer revolucionaron el partido
La segunda parte comenzó con el dominio de la pelota para los visitantes. El Stuttgart tenía más la pelota y los locales estaban a merced de los visitantes. Los pupilos de Stevens tardaron seis minutos en dar otro zarpazo al Schalke 04. Otra vez un pase de Ginczek, esta vez a Kostic que sirve para que el jugador del Stuttgart batiera al portero local. Kostic conseguía con su gol dar la vuelta al marcador, y hacía justicia con el juego de la segunda parte. El Schalke 04 había salido dormido y no conseguía hacerse con el balón. Di Matteo buscó una solución sacando a Draxler, más tarde sacó a Boateng y como último cambio a Meyer. Los tres jugadores revolucionaron el partido y consiguieron volver a meter en el partido a los mineros. La reacción del Schalke 04 se vería recompensada a falta de trece minutos para el final. Huntelaar, con la pierna izquierda, manda de un fuerte disparo el balón dentro de la portería visitante. Huntelaar daba vida a su equipo, y hundía al Stuttgart que notaba que le empezaba a faltar las fuerzas.
Tras el empate el Schalke 04 se volcó en el ataque para conseguir llevarse los tres puntos. El premio a la insistencia les llegó en el minuto noventa gracias a un autogol de Klein. Con este gol el Schalke 04 puso un final feliz a la pesadilla que había sido para los locales el Stuttgart, que fue superior en gran parte del partido. Fue un partido poco brillante, que se salvó gracias a ciertas ocasiones. Partido igualadado en el que el Schalke 04 intentó tener la posesión mientras el Stuttgart buscaba una buena defensa y salir al contraataque.
La próxima jornada el Schalke 04 se enfrentará al Colonia. El Stuttgart por su parte se enfrentará al Mainz 05 en un duelo directo por la salvación.