Negros nubarrones se cernían sobre el cielo marsellés una vez se supo la distribución al completo de los grupos en la fase final de la UEFA Champions League. Tras la disputa de un tercio de los encuentros, la lógica se ha ido imponiendo. El Olympique continúa con su casillero de puntos a cero y sin muchas esperanzas de clasificación a pesar de su buen plantel. 

De este modo, el martes en Dortmund se hizo patente la inferioridad existente entre el alemanes y franceses. Aunque el equipo de Élie Baup salió valiente, sin ningún tipo de complejos, tratando de hacer daño al rival con sus máximos exponentes en ataque: Valbuena, Ayew y Payet. Sin embargo, el conjunto de Renania del Norte-Westfalia, rápidamente tomo las riendas del partido a través de un gran Sahin y los goles no se hicieron esperar. Lewandowski adelantó a los suyos en la primera mitad tras una abrumadora contra del equipo de Klopp (no presente en el banquillo tras su expulsión en San Paolo) y ya en la segunda parte Reus y el propio Lewandowski se encargarían de cerrar el marcador con un 3-0 que vuelver a relanzar a los alemanes tras la derrota de la primera jornada frente al Nápoles.

El Olympique se encuentra tras las dos primeras fechas a tres puntos de Nápoles y Dortmund y encarando un doble duelo con los italianos determinante en las posibilidades de clasificación del conjunto del sur de Francia.

El PSG, por su parte, ganó con más facilidad de la prevista al Benfica de Jorge Jesús. Resultado idéntico que el otro representante francés en un partido que se decidió en los primeros treinta minutos, el tiempo que necesitó el equipo parisino para endorsarle tres goles al Benfica y dejar sentenciado el encuentro. El entrenador del Benfica habló en la previa de que su equipo saldría a por el partido, que no se dejaría amedrentar por la constelación de estrellas que forman el Paris Saint-Germain, pero los de Laurent Blanc en ningún momento hicieron ningún tipo de concesión a su rival. 

Cinco minutos tardaron los locales en hilvanar la jugada del 1-0 con Verratti, Van der Wiel e Ibrahimovic como protagonistas, sería el primero de los dos goles del sueco en la noche del miércoles. El dominio local seguía siendo abrumador cuando Verratti conectó esta vez con Matuidi tras un gran taconazo de Ibra y servió el tanto en bandeja a Marquinhos, que hacía su segundo gol en esta Champions. Sin tiempo para la reacción del equipo lisboeta, volvió a ser Ibra quien esta vez se elevó más que nadie para rematar un saque de esquina y de este modo matar el partido. El resto del encuentro fue una posesión constante del PSG que apenas dio opción al Benfica durante la segunda mitad.

Así pues, el Benfica se marcha del Parque de los Príncipes con la sensación de que, a falta aun de cuatro jornadas y una visita a Lisboa pendiente, el equipo francés se encuentra un escalón por encima del resto y es claro favorito apara conseguir el primer puesto en este grupo C.