El Rennes tendrá su particular revancha con la Copa de Francia. Después de perder en 2009 la final contra el Guingamp, entonces en segunda división, el Stade Rennais logró este martes su clasificación para la fase final tras vencer al Angers (3-1), único equipo de Ligue 2 en liza. El conjunto de Montanier disputará la quinta final de su historia, de las cuales ha ganado dos, la última en 1971 contra el Olympique de Lyon. 

El Rennes tuvo que remar en contra

El inicio del partido pilló por sorpresa al Stade Rennais, que cuando quiso despertar ya iba por detrás en el marcador. Con tan solo dos minutos jugados, el Angers ya se adelantó en el marcador. Eudeline encaró por banda derecha a M'Bengué y centró atrás, donde Yattara remató directamente a la escuadra, llevando el 0-1 al marcador y el miedo al Stade de la Route de Lorient.

Con la corriente en contra, el conjunto bretón comenzó a remar en busca de un empate que no tardó en llegar. Al cuarto de hora de juego, una confusión en la zaga visitante provocó el tanto del Rennes. El delantero sueco Toivonen aprovechó una falta de entendimiento entre Hénin y Malicki para anotar sin oposición el primer gol de su equipo.

De esta manera, el encuentro comenzaba nuevamente de cero, aunque con un Angers mermado por las lesiones y condicionado por dos cambios mediada la primera mitad (Othman y Ayari). Entonces, el Rennes impuso su mayor calidad técnico y su superior categoría, mostrando un acierto de cara a puerta que no mostró el Angers. Así, en el 35' llegó el segundo gol y la marea a favor del Rennes. Tras avisar con un disparo lejano (29'), Grosicki anotó casi a placer después de dejar sentada a la defensa rival.

Los errores condenaron al Angers

Como equipo inferior que es, el Angers pagó sus fallos, tanto en defensa como en ataque. Antes del descanso, Thomas y Yattara, el mejor del partido por lado visitante, pudieron devolver el empate al marcador, pero Costil y la falta de puntería se cruzaron en su camino, al igual que al inicio de la segunda mitad. Gamboa lanzó al larguero una falta desde unos 25 metros y en la jugada siguiente llegó el gol de la sentencia del Rennes. Una pérdida en la salida de balón del propio Gamboa fue aprovechada por Doucouré, quien asistió para el gol de Makoun desde la frontal del área (48').

Desde ahí al final, ambos equipos pudieron alterar el marcador, aunque no sería hasta las postrimerías del partido, cuando el Angers llevó cierta cautela a lo que ya era una fiesta en el Stade de la Route de Lorient. La reacción del Angers llegó tarde y Yattara solo pudo anotar, de penalti, a un minuto del término del encuentro (89').

Con el pitido final, la locura se desató en el seno de un club que vuelve a luchar por un título. Un equipo que, cinco años después, se cita de nuevo con la historia, en busca de conseguir el tercer título de su competición fetiche, el único trofeo con el que se ha alzado en su historia.