Llegaba el Saint-Étienne a su primer partido de temporada en casa después de estrenarse con un triunfo en la primera jornada de liga. Lo hacía con el Geoffroy-Guichard a reventar, ansioso de reverdecer viejas tardes de gloria, en las que su equipo llegó a ser subcampeón de Europa y vio como futbolistas del nivel de Salif Keita, Dominique Rocheteau, Johnny Rep o el príncipe Michel Plantini vestían de vert.

El rival, otro histórico del fútbol galo, el Stade de Reims, tras años penando lejos de la Ligue 1, sigue con su reconstrucción en su tercera temporada consecutiva en la máxima categoría francesa. Un duelo con mucho atractivo e historia por detrás, pero que hoy en día quedan por detrás de las grandes potencias futbolísticas galas.

La alegría de la hinchada Sainté en la grada pronto se trasladó al verde. Desde el primer minuto, los hombres de Christophe Galtier quisieron dejar claro por qué habían logrado alcanzar la cuarta plaza la temporada pasada. Un juego alegre, vistoso, ofensivo, con la meta rival en mente. Monnet-Paquet y Gradel fueron dos puñales por banda con mucha facilidad para desarbolar a los defensas visitantes.

Las ocasiones llegaban en el marco de Agassa. Gradel pudo anotar en la más clara del Saint-Étienne en el minuto 20 de encuentro tras una buena combinación en las inmediaciones del área, pero su disparo se topó con la pierna de un zaguero rojiblanco para evitar el gol. Mientras, el Stade de Reims era incapaz de atravesar la divisoria y poner en aprietos a los locales.

Un autogol de Perrin lo cambió todo

Cuando todo parecía bajo control en el Geoffroy-Guichard, el fútbol dio uno de sus habituales giros rocambolescos. Un disparo fuerte pero que no parecía complicado de Moukandjo lo desvió al fondo de su portería Perrin. Era el primer tanto del jugador camerunés con su actual equipo y el primer disparo a portería del conjunto dirigido por Jean-Luc Vasseur.

Las prisas se acentuaron en el equipo local. El asedio al que los de la región del Loira estaban sometiendo a su rival no culminaba en gol, y eso impacientaba tanto a los futbolistas de la escuadra verde como al remozado y lleno Geoffroy-Guichard. No fue por la falta de ocasiones, porque los de Galtier embotellaron a su rival. Fue por la falta de precisión en el remate. Entre tanto, Charbonnier tuvo otra buena oportunidad para los visitantes, aunque Ruffier reaccionó rápido para despejar a saque de esquina al filo del descanso.

Monnet-Piquet y Gradel fueron los más destacados del equipo vert

El entretiempo logró afinar la puntería local. El ataque sin pausa sobre el marco defendido por Agassa agobiaba al Reims, superados durante buena parte del inicio del segundo periodo. El que avisa no es traidor, y Max Gradel, en un lanzamiento de falta muy cerca de la frontal del área, logró poner las tablas momentáneas en el marcador cuando aún quedaba media hora para el final.

Un Saint-Étienne arrollador

Todo lo que sucedió después del gol del costamarfileño respondió a la lógica. El Reims se había puesto por delante con muy pocas ocasiones y muchísima eficacia, pero en ningún momento dio la sensación de haber sido mejor que los locales o de haber controlado el partido. En cambio, el empate de Gradel confirió una importante fuerza mental a los locales.

Continuó el ataque en busca del triunfo, y apenas siete minutos después de que lograran igualar el resultado, fue Monnet-Piquet, uno de los más destacados en el bando de casa durante el partido, el que cabeceó un buen envío de Hamouma desde la banda para adelantar a su equipo. El francés de origen ruandés fue una pesadilla por la banda, a veces ubicado en la derecha y otras en la izquierda, pero siempre intuyendo por donde hacer daño.

El Reims se adelantó, pero no pudo conservar la ventaja

La ventaja permitió al equipo sainté dominar el partido con mayor tranquilidad, después de haber sufrido por su falta de acierto de cara al gol durante el primer tiempo y parte de la segunda mitad. Los de Vasseur fueron incapaces de intentar sacar algo positivo del Guichard, y tuvieron que ver como los locales, lanzados, ampliaban su diferencia con un tanto del turco Erding, que sentenciaba el partido.

En definitiva, tres puntos para un Saint-Étienne que ha hecho pleno en las dos primeras jornadas de competición y que parece estar dispuesto a plantar batalla durante toda la liga al que se le ponga por delante. La remontada de hoy así lo indica. Los hombres de Galtier quieren la Champions League la próxima temporada. Mientras, su rival, el Reims, tendrá mucho que mejorar pronto, a pesar de que sea la segunda jornada, si quiere evitar problemas en el futuro.

Puntuaciones VAVEL

Saint Étienne Stade Reims
Ruffier 5 Agassa 6
Brison 6 80' Signorino 4
Bayall Sall

6

Fofana 5
P.P. 27' Perrin 5 Tacalfred 6
Tabanou 6 Mandi 4
Lemoine 6 63' Bourillon 5
75' Corgnet 7 Oniangué 4
Clément 6 Devaux 5
60' 69' Gradel 7 87' Diego 5
70' Monnet-Paquet 8 Charbonnier 5
81' 88' Erding 6 Moukandjo 6
Suplentes
69' Hamouma 6 63' Ca 5
75' Cohade 6 80' Atar 5
88' Van Wolfswinkel --- 87' Albaek ---
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Sobre el autor
Alberto Sánchez
25 años.Toda una vida dedicada al fútbol.6 años jugando en la Cantera del Atlético de Madrid. Actualmente soy un intento de entrenador de fútbol, jugador de barrio, y camino de periodista. Autor del blog http://iltrequartista10.blogspot.com. Hablando de todo un poco. Atlético de Madrid, fútbol sala, Eredivisie, CD Guadalajara... Todo lo que sea redondo y se juegue en un rectángulo sirve para hablar de ello.