El Girondins de Bordeaux vio cortada su racha, de tres partidos consecutivos ganando, por un Bastia que aguantó una hora de juego con ventaja, pero que terminó cediendo un punto ante el insistente empuje de los de Sagnol, que a la postre terminaron empatando. Tallo adelantó por sorpresa a los visitantes, mientras que Roland, a pase de un soberbio Mariano, estableció el empate. El Bastia pudo doblar su ventaja con un polémico rechace de Pallois, quien dos minutos antes del gol de Roland evitó que un balón entrase con el brazo, acción que el árbitro no vio.

Cerrojo con sorpresa del Bastia

El encuentro arrancó con el previsible dominio del líder, un Girondins de Bordeaux que no salió a especular, sino que desde el primer momento quiso llevar el peso del partido. Enfrente, un Bastia que esperó los intentos de los locales con un gran orden y solidez defensiva. Los de Makélélé, por cierto, tuvieron que jugar con las camisetas blancas de entrenamiento del Bordeaux por decisión del árbitro, que pidió que se las cambiasen al entender que los colores se confundían con los del conjunto de Willy Sagnol.

Desde el primer minuto de juego, los de Burdeos mostraron sus intenciones. Una internada por la derecha que terminaba en córner alentaba el aliento de la hinchada del Stade Chaban-Delmas, deseoso de ver ganar a los suyos el cuarto partido consecutiva. Sala no llegó a rematar el balón suelto tras ese saque de esquina, bien rechazado por la zaga visitante. Los locales lo intentarían por ambos costados, buscando con insistencia el desborde de Rolan y Maurice-Belay, muy activos en el primer tiempo, aunque algo imprecisos en el centro final.

El Bastia, que por el momento aguantaba sin fallos en su mitad de campo, avisaba en el minuto 5 con un tiro de Ayité que salió muy cruzado. Poco después, en el ocho, un error garrafal en el despeje de Carrasso, estuvo a punto de costar el primer tanto del Bastia, pero el tiro de Maboulou desde fuera del área salió muy desviado. El Bordeaux seguía a la suya, controlando el balón, aunque sin encontrar la llave para desbloquear el cerrojo de los de Makélélé, que lograban trazar peligrosos contragolpes aislados.

En el minuto 18, a la tercera, llegó la vencida para el Bastia, que sorprendió al adelantarse en el marcador. Diakité envió un centro desde la derecha que Maboulou, en el punto de penalti, logró rematar, aunque su cabezazo no fue dirigido hacia la portería, sino que quedó muerto dentro del área, en una posición franca para que Tallo, libre de marca, lo enviase al fondo de la red con una volea precisa. La respuesta del Bordeaux fue una diagonal de Khazri, de derecha a izquierda, que terminó con un tiro desviado por pocos centímetros.

La impotencia del Bordeaux

Dos faltas colgadas al área sirvieron para reanudar la cacería que intentaba el Bordeaux, que no conseguía dar alcance a su presa, que siempre se anticipaba a los movimientos de su rival. Con una defensa muy atenta y constantes ayudas, los hombres de Makélélé repelían las ofensivas del Bordeaux, al que le costaba encontrar la portería rival. A poco para la media hora de juego, los locales pidieron un penalti por una caída de Sala dentro del área, dudosa en cualquier caso. Faubert, para los locales, y Tallo, para los visitantes, protagonizaron los siguientes ataques, aunque sin éxito alguno.

Una y otra vez lo siguió intentando el Bordeaux antes del fin de la primera parte, pero la siempre solvente defensa del Bastia impidió que sus ataques fueran a más, lo que obligó a aumentar el número de efectivos en ataque de los locales, cuyos laterales, especialmente Mariano, empezaron a tener una mayor presencia en campo rival. La última gran ocasión del primer tiempo la protagonizó Maurice-Belay, con un tiro elevado y preciso que atrapó Areola con una espectacular parada, cogiendo el balón en el aire. Estuvo muy atento en todo momento el guardameta del Bastia.

Mariano revoluciona el partido

La segunda mitad siguió las mismas pautas de la primera: siguieron las ofensivas -siempre por banda- del Bordeaux, y se mantuvo precisa y solvente la defensa del Bastia, un muro muy difícil de superar y que apenas dejaba espacios entre líneas por el centro. Mariano, cada vez más activo por su carril, comandó varios ataques por la derecha, recogiendo el balón en zona de tres cuartos y subiéndolo con criterio hasta la altura del área contraria.

En el primero, al borde de la hora de partido, penetró en el área tras deshacerse de un defensor, y cedió una gran asistencia a Khazri, quien desde el punto de penalti desperdició un tiro muy claro que no vio portería. Dos minutos después, el propio Mariano se generaría otra clara llegada. En esta ocasión, recortó con clase a Palmeri, al que dejó sentado, para disparar cruzado. Su tiro tampoco terminó en gol, pero encendió los ánimos de un Bordeaux que se activó definitivamente, encerrando aún más al Bastia.

El partido pudo dar un giro radical si la fortuna se alía con Ayité. El atacante del Bastia recogió un envío en largo, y con su velocidad en carrera superó a Carrasso, quien desde el suelo no pudo evitar su tiro. Si lo hizo Pallois, con una mano que el árbitro no vio y que permitió desviar el disparo de Ayité al larguero y a córner. Un grave error arbitral que terminó pasando factura al Bastia, que pudo haber doblado su ventaja.

Y cosas del fútbol, del posible 0-2 se pasó al 1-1 en cuestión de pocos minutos. Quien sino, Mariano, mandó un centro con la izquierda que controló con el pecho Rolan, quien desde el primer palo empalmó situando el empate en el marcador. Un auténtico jarro de agua fría para el conjunto de Claude Makélélé, quien observó con resignación el tanto que les privaba de dos puntos de oro.

El gol dio aún más ánimos al Bordeaux, que lo intentó de todas las maneras posibles, mediante centros o disparos lejanos como uno de Maurice-Belay, en el minuto 89, que rozó el poste izquierdo de la portería de Areola, que poco antes ya había detenido otro tiro peligroso. El Bastia ya renunciaba a la victoria, y daba por bueno un punto con el que no se conformaba el Bordeaux, que no cesó en su lucha. Su empeño, sin embargo, quedó en nada por la falta de precisión de los suyos, y del acierto de un Areola que tuvo una gran tarde.

Girondins de Bordeaux (1) Bastia (1)
Carrasso 4 Areola 8
Mariano 8 D. Diakité 7
Pallois 7 Squillaci 7
L. Sané 6 Romaric 6
Faubert 76' 5 Palmeri 6
Poundje 46' 5 F. Ayité 7
Sertic 6 El-Hadji Ba 6
Khazri 65' 7 Boudebouz 6
Rolan 7 Gillet 7
Sala 7 Tallo 84' 7
Maurice-Belay 7 Maboulou 63' 7
Suplentes
Kaabouni 46' 6 Pino 63' 5
Touré 66' 5 Peybernes 84' -
Crivelli 76' 5