Una vaselina, un penalti en contra y un árbitro que quería ser protagonista

Dos equipos muy necesitados de puntuar se enfrentaban hoy en casa del Lens. Por un lado, el equipo local, que no levanta cabeza y se ve poco a poco inmerso en la lucha por no descender (tercero por la cola) y a quién los tres puntos le vendrían de perlas para acabar con su mala racha; por el otro, el PSG, equipo situado en la tercera posición de la clasificación, tan solo superado por el Burdeos y el Marsella, y luchando por acercarse al líder y consolidar posiciones europeas.

El PSG llegaba a la cita con la moral por las nubes después de su victoria en Champions frente al Barcelona, pero con la sensible baja de Zlatan Ibrahimovic, líder del conjunto parisino. La baja del sueco ha sido la única de los visitantes en este partido, puesto que las no convocatorias de Thiago Silva y David Luiz han creado un bajón de calidad en la línea defensiva que podía ser (y ha sido) aprovechado por los delanteros locales. En cambio, el Lens (con las únicas bajas de Cyprien y Kantari) se encontraba en una condición óptima para rendir al máximo nivel durante este partido.

El PSG domina, Coulibaly adelanta

Arranque muy físico de ambos equipos, que tenía en los visitantes los dueños del esférico y a los locales no dejándo jugar cómodo al PSG en campo contrario. Sin embargo, esto no impedía que Cavani se mofase de la defensa y crease ocasiones de peligro, que tenían en Riou el único impedimento para que el balón entrase en la red.

Y en una ocasión de peligro de los parisinos, desbaratada por el portero local y seguido de un rechace de la defensa local, provocaba una contra del Lens encabezada por Coulibaly, que llegaba al área visitante y batía a Sirigu con mucha solvencia. El Lens se adelantaba en el marcador y el PSG pagaba así las bajas defensivas de Thiago Silva y David Luiz.

Pero aunque la defensa fuese mdiocre, el ataque visitante siempre es peligroso. Lo demostró Cabayé en el ecuador de la primera mitad, con un potente disparo que se colaba en la red local y empataba el marcador. Poco duró la alegría local, el PSG igualaba el encuentro, abría el partido y volvía a apoderarse de la posesión y de las oportunidades.

Maxwell establece la calma y la lógica

Con el gol de Cabayé el Lens volvía a sufrir y el PSG volvía a sentirse superior. Esta superioridad se reflejó en el campo y, tras unos momentos de tímido dominio local, el conjunto de Blanc volvía a tener el balón en los pies y la sartén cogida por el mango. Y de esee dominio surgió el error del portero local, cuyo rechace defectuoso era aprovechado por el ex - barcelonista Maxwell para adelantar a los visitantes por medio de una vaselina. Un tanto que restablecía la lógica en el marcador con 45 minutos por delante.

Sin cambios en los quince minutos de descanso, la pelota empezó a rodar otra vez en Saint Denis. El gol de Maxwell había restablecido la lógica al encuentro, y posteriormente la calma, al iniciarse la segunda mitad con pocas ocasiones para ambos conjuntos, que apenas podían pasar de la línea del centro del campo.

Nicolas Rainville, el jugador número 23

Nicolas Rainville no ha sido ningún futbolista de ambos equipos, ni el entrenador del Lens ni el del PSG. Nicolas Rainville ha sido el árbitro del encuentro. El colegiado francés no permitió que el partido perdiese su emoción con el uno a dos a favor del PSG y revolucionó el encuentro a partir del minuto 50 de partido, que encarriló el partido del conjunto parisino para enfado de los locales.

La actuación del árbitro en el devenir del partido fue breve, pero intensa. En primer lugar concedió un penalti a favor a los visitantes por culpa de un empujón de Gbamin a Cavani, que desembocó en el uno a tres con el que el PSG encarrilaba el partido. No contento con eso, y con las quejas del mismo jugador, le concedió la segunda amarilla y le mostró a Gbamib la cartulina roja y el camino hacia los vestuarios. Posteriormente, amonestó al artífice del tercer gol visitante por una "mofa" a los jugadores locales y le expulsó segundos después al cogerle el brazo para quejarse de la primera amonestación.

Y para finalizar su breve pero intensa actuación, en una córner a favor del Lens Le Moigne le proporcionaba un empujón a Cabaye que el árbitro entendió como merecedora de amonestación. Con la cartulina amarilla vista en la primera mitad, Nicolas Rainville expulsaba al jugador local, dejaba al Lens con nueve jugadores en el campo, y finalizaba así su actuación.

Sin momentos reseñables durante los últimos diez minutos, el partido finalizaba con la victoria del PSG por tres goles a uno y con unos tres puntos que le permiten no despegrase de la lucha por las posiciones europeas. Los locales, por su parte, tendrán que conformarse con una derrota que les hunde en el pozo del descenso y que difícilmente podrán salir de ahí.

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