Nadie consigue mojar

A pesar de las ocasiones que han habido al final de la primera parte y del dominio del que ha disfrutado el Metz en la segunda, el marcador no se ha movido en todo el encuentro. El cuadro de Montanier ha salido a dominar en la primera mitad, pero después ha regalado el balón a los locales y se ha centrado en los contraataques.

Ambos equipos han podido llevarse la victoria, sobre todo en el último cuarto de hora de la primera parte, pero ambos guardametas, especialmente M'Fa, han evitado que su equipo fuera por detrás en el marcador. Al final, ni unos ni otros han encontrado la tecla para batir a los cancerberos y se van a casa con un puntito cada uno.

Primera mitad igualada

La tónica en la primera mitad ha estado el juego de toque más que el juego directo. Ambos equipos han intentado crear jugadas, aunque el Stade Rennais ha encontrado más espacios atrás, sobre todo en la zona de Grosicki, que ha tenido un par de jugadas peligrosas, sin consecuencias para el guardameta local.

Los primeros minutos han tenido color visitante. Exceptuando en dos jugadas aisladas alrededor de los diez minutos de partido, en la primera media hora de juego ha dominado más el cuadro de Montanier. Sin embargo, a pesar del ligero dominio, éste no se transformaba en ocasiones, y M'Fa estaba muy concentrado para destrozar cualquier intentiva visitante.

Pero a partir de la media hora el partido se ha roto. Tanto el Metz como el Stade Rennais han tenido ocasiones y el encuentro era de ida y vuelta. Por parte local, Krivets era el hombre más incisivo en la banda izquierda, mientras que Pajot y Grosicki, del cuadro visitante, eran los que más peligro llevaban, ayudados por Doucouré que participaba en la mayoría de jugadas. Además, el central Mexer resolvía cualquier internada local, lo que dificultaba el remate final.

Sin embargo, la primera ocasión clara no llegaba hasta la media hora de juego. Una falta botada por Milan la enviaba Costil a córner. Poco después empezaba el festival de ocasiones. Hosiner no era capaz de rematar un centro desde la derecha que hubiera puesto en muchos problemas a M'Fa. Pajot también podría haber adelantado a los visitantes, pero su remate acrobático dejaba la pelota muerta fácil para M'Fa.

El Metz también tenía las suyas. Sarr tuvo una ocasión inmediatamente después de la de Pajot, pero su disparo fue demasiado cruzado. Y aún tuvo otra el cuadro de Montanier, la más clara para los visitantes. Gran visión de juego de Pajot que centraba a un rápido Henrique que, superando a toda la defensa, se saca un cabezazo que se marcha fregando el poste de la portería de M'Fa.

Dominio sin premio

La segunda mitad tuvo un aspecto totalmente diferente. El Metz se puso el mono de trabajo y desde bien empezado el segundo tiempo ha ido a por el gol. Sin embargo, el dominio no ha sido suficiente, pues no ha creado apenas ninguna ocasión con peligro salvo un barullo en el área que ha terminado resolviendo la zaga visitante a la perfección.

La primera ocasión de este segundo tiempo la ha tenido el Stade Rennais. Una falta peligrosa que atrapaba M'Fa. El Metz tocaba y tocaba pero no pasaba de la línea de tres cuartos gracias a la buena actuación de Mexer. Y los pupilos de Montanier creaban mucho peligro al contraataque. En uno de ellos, M'Fa tuvo que sacarse una buena parada porque un jugador visitante se había ido de toda la defensa y buscaba el gol.

Poco a poco el partido iba cogiendo esta tónica, un Metz volcado a por el gol y un Stade Rennais encerrado que defendía bien y buscaba el contraataque para hacer daño o aprovechaba los errores de la zaga. Una recuperación de Doucouré en ataque a punto estuvo de lamentar el conjunto local.

Los cambios no cambiaron la dinámica, ni para unos ni para otros. El Metz lo intentaba pero no conseguía hacer daño, ni en jugada ni a balón parado. Los visitantes se sentían cómodos en este rol y los cambios de Montanier ayudaron a aguantar el resultado.

Al final, reparto de puntos sin goles en el marcador que mantiene a ambos conjuntos en la zona media de la tabla, con los locales mirando a cotas más altas.

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