Presionados por la victoria del PSG ante el Rennes, y con la necesidad de no ceder más al líder Lyon, el Olympique de Marsella se reencontró a sí mismo con un triunfo ante el modesto Evian tan vital como necesario para volver a confiar en sus aspiraciones ligueras. A su factor contó con el incondicional apoyo del siempre activo Vélodrome, que levantó los ánimos de un equipo que venía de sumar seis puntos en cinco jornadas en las que habían perdido el liderato a costa del Lyon.

Dominio con poca intención

Bielsa regresó al 4-2-3-1, uno de sus esquemas más utilizados este curso, para dar cabida a Alessandrini por Ayew y al doble medio centro que formaron Romao e Imbula, dos rocas que frenaron buena parte de los intentos de un Évian que se agrupó cerrando líneas a la espera de salir rápido al contragolpe.

Los primeros diez minutos fueron muy abiertos, con dos llegadas de los visitantes, la primera de las cuales terminó con una caída dentro del área de Wass por un contacto sobre Fanni que el árbitro acertó en no señalar. En un intercambio de golpes, los locales respondieron con un peligroso cabezazo desviado de Dja Djédjé en el segundo poste tras un centro desde la izquierda de Alessandrini. Era el minuto 10 cuando los marselleses generaron la primera clara oportunidad del encuentro.

A partir del cuarto de hora, el OM frenó el ritmo del partido, manteniendo largas posesiones en terreno propio, sin intención de percutir con fuerza en campo rival. Los locales monopolizaron el cuero durante buena parte del primer tiempo, si bien su ritmo fue aumentando progresivamente. En el principio fue pausado, permitiendo que el Evian apenas se sintiera incómodo, pero a partir de la media hora, el cambio se notó sensiblemente.

Carta de presentación marsellesa

Con un Évian defensivo, esperando pequeños descuidos para salir veloz al espacio, el Marsella fue asumiendo riesgos a medida que corría el reloj. El segundo cambio de ritmo -el primero había sido para enfriar el impulsivo arranque-, los locales imprimieron una marcha más y empezaron a merodear el área visitante con cierta asiduidad.

La embestida empezaba la mayor parte de las veces a través de centros desde la derecha, donde un constante Dja Djédjé aportaba profundidad y dinamismo por su carril. Los centros del lateral, sin emabrgo, hicieron poco daño esta vez a un Évian muy rocoso.

Una pérdida local en el centro del campo propició el único acercamiento con gran peligro del Evian, un contragolpe que inició Ramirez, que presionó y forzó un grave error de Fanni, que se confió y perdió el balón. El atacante visitante encaraba al portero cuando irrumpió con fuerza Morel, arrebatando el balón a su rival de forma contundente, pero limpia. Ahí pudo abrir el marcador el Évian.

Salvado el peligro, el Marsella finalizó la primera mitad con varias ocasiones a su favor, suficientes como para haberse adelantado en el marcador. La presión del Évian dio lugar a un repliegue más acentuado. Dos cabezazos de Gignac despertaron un Vélodrome que se empezaba a impacientar, y silbaba por la falta de peligro que generaban los locales. Se relajó el ambiente con dos intentos de Thauvin y Payet, que dieron clara muestra de lo vivo que estaba el equipo.

El talento de Payet

Si hay una línea que destaca en este Marsella por su desequilibrio, ésta es la de sus mediapuntas. Con un Thauvin que fue de menos a más, y un Alessandrini más bien ausente, fue Payet quien cogió la responsabilidad y al inicio del segundo tiempo generó la jugada que originó el único tanto del encuentro. Regateó a dos rivales en la frontal y percutió en el área, donde cayó ante un contacto con Barbosa.

Gignac recogió la responsabilidad y transformó la pena máxima. Es el 14º tanto del ex ariete del Toulouse, que ha marcado en las últimas cinco ocasiones en las que se ha medido al Évian en la Ligue 1. Leroy estuvo cerca de atajarle el disparo, pues le adivinó la intención, pero el cuero le superó por debajo de su cuerpo.

Daniel Wass, que había avisado en el primer minuto del segundo tiempo con un tiro de falta muy lejano, repitiría a falta de dos minutos para concluir el encuentro, con un tiro libre que asustó a más de uno. Antes, al Marsella le dio tiempo a dormir el partido y a complicarse la vida. Con el balón bajo su posesión, merodeó el área cuando quiso, pero no logró un segundo tanto que le diese más seguridad.

Eso alimentó las esperanzas del Evian, que con el paso de los minutos vio como sus opciones se acrecentaban. La entrada de Batshuayi dio un nuevo orden al ataque marsellés, pues situó a Gignac por la derecha y Thauvin por la izquierda. Michi se situó por el centro, pero apenas tuvo presencia. En el minuto 75, Romao estuvo cerca de sentenciar el encuentro, pero engaltó a las nubes un balón muerto dentro del área tras la salida de un córner.

Tras esta oportunidad desperdiciada, el Marsella terminó pidiendo la hora para amarrar los tres puntos. El Évian protagonizó algún tímido aviso a balón parado, pero ninguno encontró portería. La sensación, sin embargo, era de que en cualquier momento podía pasar cualquier cosa. El pitido final alivió a los locales, que suman su undécimo triunfo en casa y se vuelven a poner a la misma altura que el PSG. La pelota, así pues, vuelve a estar ahora en el tejado del Lyon. Sufrió, pero el Marsella cumplió.

Puntuaciones VAVEL Ligue 1

Olympique de Marseille (1) Évian Thonon Gaillard (1)

Mandanda 5 Leroy 6

Morel

6 Abdallah 6

Fanni

5 Nounkeu 7
Dja Djédjé 7 Sabaly 6
Mendy (81') 7 Cambon 6
Romao 6 Kone 5
Imbula 6 Benezet (62') 5

Payet

7 Barbosa (59') 6
Thauvin (86') 6 Wass 7
Alessandrini (59') 5 Sorlin 6
Gignac 7 Ramirez (72') 6
Suplentes
Batshuayi (59') 5 Fall (59') 5
Aldé (81') - Nielsen (62') 6
Omrani (86') - Camus (72') 5