Goleada del Liverpool en el Britannia Stadium (3-5). El Stoke City dejó escapar tres puntos de un partido en el que hizo méritos para ganar pero que perdió por los gravísimos errores atrás y por el mal fario. Pronto fueron por detrás pero lograron un empate dificilísimo. Cuando al partido le quedaba poco y daban todo, perdieron la ventaja que tenían en los contragolpes. Lo dieron todo sin encontrar premio.

La suerte acompañó al Liverpool desde el inicio

Un disparo de Cissokho que se iba fuera tocó en Shawcross para terminar en gol

Empezaron apretando los locales. Desde el principio presionaron las posesiones y buscaron robar arriba. Sin embargo, la mala suerte les privó de tener un buen inicio de partido. Solo cuatro minutos habían pasado cuando Cissokho empalmó una volea en la frontal que se iba fuera directamente. Tocó en Shawcross, que no tuvo tiempo para apartarse y la mandó hacia su portería, despistando a su portero y poniendo el marcador el 0-1.

Los de Rodgers se ponían por delante y aprovechaban para tomar la posesión del cuero. Lo movieron de un lado a otro y lo trataron bien, maniatando completamente a su adversario y jugando con tranquilidad. Entre ello destacaban Coutinho, que estuvo muy activo, y Henderson, que se animó a llegar al área y tuvo una buena opción que no llegó a controlar ante Butland por poco. No sufrían los reds atrás ante los balonazos que mandaban a su área.

El Stoke reaccionó pero estuvo blando atrás

Sterling volvió a brillar. El extremo entró continuamente por banda y puso un balón buenísimo para Coutinho, que desde el borde del área buscó la escuadra y erró por muy poco. Arnautovic intentó hacer lo propio en el campo contrario, pero la mandó demasiado alta. El tiro, ya en el ecuador del primer acto, fue el inicio del crecimiento de los potters. Ganaron en intensidad y generaron cierto peligro, pero en defensa estaban muy desafortunados.

Suárez quería aparecer y estuvo a punto de hacerlo en un centro desde banda que no llegó a empujar por escasos milímetros. Y si dio el aviso en el minuto veintisiete, no falló cuatro después. El uruguayo presionó a Wilson en su intento de cesión y le puso nervioso. El pase se quedó corto y Shawcross llegó para despejar, pero también falló. No quedaba nada más que el portero y Luis le batió a placer en el área pequeña (0-2). El esfuerzo tuvo recompensa.

Reacción final para llegar empatados al descanso

Con este tanto en los mejores minutos de los locales todo parecía resuelto. Pero no bajaron los brazos. Buscaron las bandas y los centros al área, y le salió bien. Su táctica la hizo efectiva Crouch, que aprovechó el exquisito centro de Arnautovic para rematar a la perfección a la cepa del poste y recortar distancias (1-2) a siete minutos del final. Se volvían a meter en el partido.

Hubo reacción por parte de Philippe Coutinho, que recibió un buen balón en el área y tenía todo a favor para marcar pero la mandó al cuerpo del guardameta. Y si él perdonó, no lo hizo Adam. El centrocampista del Stoke recogió una mala entrega de Henderson cerca de su área para avanzar unos metros y sacar un zurdazo pegado al palo imposible para Mignolet (2-2). El empate llegaba casi en el último minuto, yéndose al descanso dispuestos a empezar un nuevo partido.

Un nuevo error favoreció a los reds

Y volvieron con las pilas cargadas. El propio Charlie Adam probó fortuna en la primera jugada pero disparó fuera. El partido estaba abierto y llegaban continuamente a ambas áreas. De ello se aprovechó Sterling, que se llevó un mal despeje para terminar cayendo en el área y provocando penalti. No perdonó Steven Gerrard, que engañó al portero para volver al Liverpool por delante (2-3).

La tónica no cambió. Continuo ida y vuelta en el que las zagas se empleaban a fondo para sacar los balones y Crouch disfrutaba repartiendo juego tras controlar por alto. Eran los de Mark Hughes quienes más cómodos se encontraban, poniendo un punto más de intensidad y generando peligro por arriba. Metían balones al área y daban miedo, pero los minutos pasaban y no remataban.

La sentencia, al contragolpe

Y de contraataques vivían los de Anfield. En uno de ellos lograron sentenciar el encuentro. El regreso de Daniel Sturridge se produjo, entrando en lugar de Coutinho, y poco después de incorporarse salió en carrera. Con potencia se plantaba en el área rival y tenía delante a dos rivales. Con un amago de irse hacia dentro dejó por fuera a Suárez, que recibió en el pico del área, avanzó, se perfiló y sacó un disparo cruzado perfecto al segundo palo (2-4). Excelente remate del máximo goleador de la Premier League.

Sterling, presumiendo de sprint, condujo una jugada similar a la anterior pero fue más individualista. Tras meterse en el área, decidió golpear con fuerza al primer palo, topándose con la madera ante la confianza de Butland. Quedaban quince minutos y los locales iban a la desesperada, concedían demasiados espacios. Y apenas generaban peligro, más allá de un centro que a punto estuvo Touré de colar en su meta y de algunos tímidos remates desde la frontal.

Reacción final fallida

Agotando sus últimas fuerzas, los potters continuaron metiendo balones al área y robando rápido para seguir arriba. Walters fue el protagonista de la ocasión más clara, elevándose sobre todos y sacando un gran testarazo que obligó al paradón abajo de Mignolet. Y solo una jugada después, en un error en la salida de balón, recibió el propio atacante de cara a portería, recortó y disparó abajo, fallando el portero belga y concediendo el 3-4. Quedaban diez minutos muy intensos.

Pero duraba poco la alegría, pese a todo. Solo unos instantes después, una gran asistencia de Luis Suárez para Sturridge se convertía en gol después de un primer remate perfectamente repelido por el portero. No pudo con el segundo, en el que marcó a placer el 3-5. Y aunque todo pareciera finiquitado, Crouch seguía a lo suyo y estrellaba en el palo un balón a tres minutos del final. Y a Mignolet le quedaba trabajo, puesto que tuvo que sacar acto seguido un erróneo despeje de Gerrard, lo que fue la última oportunidad del partido.

El Liverpool se llevó finalmente la victoria (3-5), pero mucho tuvo que sufrir para lograrla. Su mejor noticia fue el regreso de Sturridge con gol incluido, así como la continuidad al gran estado de forma de Luis Suárez. El Stoke City mereció más pero se quedó sin nada por la cantidad de errores cometidos atrás. Fallaron demasiado y lo pagaron, aunque realizaron un partido muy digno.