Tras el 0-3 en el partido de la primera vuelta, se esperaba a un West Ham motivado, y con ganas de llevarse la victoria ante el conjunto de Mourinho, que a la vez, si lograba la victoria se aseguraba el dormir como líder hasta la siguiente jornada.

Big Sam planteó un partido muy defensivo, confiando en sus hombres, que resistieron los ataques del Chelsea como si de sus vidas se tratase. Ocasión tras ocasión, el Chelsea no era capaz de perforar la portería de Adrián, que protagonizó una excelente actuación, dejando (parece) de forma definitiva en el banquillo a su compañero Jääskeläinen.

No se pudo ver los cuatro fichajes de ambos conjuntos, aunque los entrenadores sí que dieron la oportunidad a dos de ellos, uno de por equipo. Por un lado, Allardyce incluyó en la convocatoria a Nocerino y a Borriello, pero sólo participó el ex del Milan, Nocerino, unos pocos minutos al final del encuentro. Por su parte, Mourinho dejó fuera de la convocatoria al egipcio Salah, pero jugó un buen rato al serbio Matic, que dejó varios detalles interesantes.

Allardyce cierra la puerta y el Chelsea no marca

Con un West Ham tan cerrado, al Chelsea se le hizo muy cuesta arriba el partido. Los primeros minutos fueron de transición, mucho respeto de ambos, aunque con más acercamientos blues. El  West Ham estuvo muy conservador, y cedió la pelota al Chelsea durante todo el partido. A Carrol no le llegaban balones, cosa que desesperó al delantero inglés, que hizo muchos sacrificios en defensa, lo que le costó un notable cansancio.

El Chelsea tuvo alguna en la primera mitad, como un disparo de Ramires desde la frontal que se marchó por escasos centímetros del larguero de la portería hammer o un cabezazo del capitán blue, John Terry que remataba un balón ajustado que el el guardameta español Adrián San Miguel rechazaba y dejaba el resultado al descanso de 0-0.

En la segunda mitad, el Chelsea estuvo más ofensivo aún, con varias oportunidades claras, pero sin acertar del todo. Apareció de nuevo el serbio Matic, que probablemente se haga con la titularidad lo antes posible, formando pareja con Lampard o Ramires. El West Ham siguió con la muralla en pié, e impidió que Demba Ba, en una ocasión muy clara, anotase el gol de la victoria.

Un descuento de infarto

El descuento probablemente refleje lo que fue el partido en sí, con un Chelsea haciendo todas las ocasiones y un West Ham aferrado al espíritu de Sam Allardyce. Aunque el colegiado inglés descontó cuatro minutos, el tiempo nos llevó hasta el minuto 96, y en apenas seis minutos, pudo golear el Chelsea.

Como siempre, Hazard tiró del carro, y tuvo varias ocasiones claras, pero no acabó de afinar su puntería en todo el partido. El descuento dejó un gol anulado a Eto'o, en una jugada extraña, en la que al parecer, hay una falta sobre Adrián, que deja el esférico en el suelo y el camerunés anota gol. El colegiado lo anuló y el marcador no se movió, dejando al Chelsea segundo en la tabla, y al West Ham antepenúltimo, a dos puntos de la tan ansiada salvación.