Arsenal y Liverpool, primer y cuarto clasificados de la Premier League, se miden en Anfield con el objetivo de definir con mayor claridad sus expectativas de cara a la recta final de la campaña. Con 14 encuentros por delante, los gunners gozan de una reducida ventaja de 2 puntos sobre sus más inmediatos perseguidores, Chelsea y Manchester City, mientras los pupilos de Brendan Rodgers se sitúan en cuarto lugar a ocho puntos de los líderes.

Una victoria local permitiría que la clasificación se ajustase, aportando interés a un título que se presume como uno de los más disputados de los últimos años. Por otro lado, en el supuesto de que los visitantes lograsen llevarse a Londres los tres puntos, la liga inglesa podría comenzar a definirse como un triple duelo por el título. Las dos caras de la moneda, frente a una incertidumbre que sólo tras el pitido final podrá resolverse.

De sorpresa a consolidación

El Arsenal de Wenger está realizando una campaña más que meritoria. Superando las numerosas bajas en la zona de ataque e innovando con predisposiciones tácticas no empleadas hasta el momento, el entrenador francés ha logrado que su equipo alcance los tres cuartos de competición en primera posición de la Premier League. Su paso, titubeante en ciertos momentos pero firme en su cómputo general, se ve amedrentado por los dos equipos que acechan tras su rebufo. Manchester City y Chelsea no sueltan el pie del acelerador mientras en el Emirates los sueños se mantienen intactos.

Parte del éxito del conjunto londinense bebe de la consolidación de la pareja de centrales más fuerte de la competición. El dúo formado por Laurent Koscielny y Per Mertesacker aúna consistencia, fuerza en el juego aéreo y velocidad. Conjugados, francés y alemán se convierten en un muro difícilmente franqueable para los atacantes rivales. Todo ello unido a la seguridad adquirida por el meta Wojciech Szczesny se conforma en la base estructural de un equipo ganador.

El ascenso de la mano de Suárez

La mejoría en el rendimiento del equipo de la bahía del Mersey no es casualidad. La absoluta explosión del, hasta el momento, mejor jugador de la Premier League, Luis Suárez, ha permitido que los reds se mantengan en la pelea por el título ya avanzada la temporada. Sus goles, su fuerza y su movilidad se constituyen en el principal peligro de un equipo en el que Sturridge y Coutinho actúan como sus principales refuerzos.

La otra gran noticia de la temporada en Anfield ha sido la garantizada madurez de Jordan Henderson. El mediocentro británico sigue ganando enteros como relevo generacional de Gerrard, asentándose con una comodidad exacervada en el doble pivote y mitigando la ausencia del imprescindible Lucas Leiva. Actuando como filtro, Henderson ha permitido una clara mejoría en la fluidez del juego de un Liverpool que funciona mejor cuando él pisa el acelerador.

Antecedentes

La historia empapa al fútbol inglés de uno de los duelos más repetidos desde los inicios de la Premier League. En nada menos que 212 ocasiones se han visto las caras dos clubes que, poco a poco, han labrado su camino en una de las ligas más exigentes del planeta. La igualdad ha predominado en ellos, habiendo logrado la victoria el Liverpool en 80 ocasiones por 76 del Arsenal, mientras el empate tuvo lugar 56 veces.

Ambos clubes, sin embargo, se han asegurado tradicionalmente sus encuentros como locales, rondando los dos el 50% de victorias jugando en casa. En el partido de ida de esta temporada, disputado en el Emirates Stadium, los pupilos de Wenger lograron una imponente victoria por dos goles a cero, con tantos del español Santi Cazorla y el galés Aaron Ramsey.

Posibles onces