Se prometía una tarde-noche apacible para los de Liverpool. No porque el Palace fuera un rival asequible, sino porque las siete victorias consecutivas del Everton y la opción de recuperar la cuarta plaza parecía prever un dominio total de los de Roberto Martínez. El técnico catalan reforzó esta idea con una alineación ofensiva. El 4-3-3 con hombres como McGeady, Barkley, Mirallas, Deulofeu y Lukaku podría haber intimidado a los del sur de Londres. Sin embargo, Tony Pulis ha implantado una disciplina y un carácter que convierte al Palace en un conjunto correoso incluso para los equipos punteros de la Premier.

Dos saques de esquina en los primeros dos minutos de partido marcaron un inicio arrollador del Everton, que poco a poco fue calmándose y ejerciendo un dominio estéril. No hubo ocasiones realmente peligrosas y pese a sumar un porcentaje de 71% de posesión en los primeros momentos, el equipo de Londres no pasó ningún apuro. De hecho, el primer disparo entre los tres palos del choque lo realizó Puncheon para adelantar a los suyos en el marcador. El rechace de Tim Howard le cayó a Chamakh. El ex del Arsenal hizo un favor a los gunners dejando el balón en bandeja para que Puncheon aprovechase el desajuste defensivo de los locales y dar la sorpresa.

Los de Goodison Park trataron de reaccionar. Se volcó al ataque y abrió sus líneas. Algo que aprovechó Bolasie para meter el susto en el minuto 34, 12 después del tanto, enviando un balón al poste desde la frontal del área.

El Everton incrementó la intensidad y Lukaku obligó a Speroni a esforzarse para sacar un balón que se colaba junto a la base de su poste izquierdo. El partido encaraba ya el descanso y, sin embargo, no hubo un último arreón en la primera mitad. Los discípulos de Pulis supieron mantener a raya a los de Martínez.

Golpe sobre la mesa en la reanudación

El técnico catalán tenía que hacer cambios si quería modificar el escenario de la segunda mitad. Y lo hizo. Dio entrada a Nasimith en lugar de Deulofeu. El partido, de hecho, cambió, pero no en el sentido que deseaba el ex del Wigan. Scott Dann aprovechó un saque de esquina para ampliar la ventaja a dos goles. 0-2 en el minuto 49.

Naismith mete al Everton en el partido

Roberto Martínez reaccionó al segundo tanto dando entrada pocos minutos despues a McCarthy y Osman que sustituyeron a McGeady y Barry, en lo que supuso un nuevo paso hacia adelante. Tan sólo un minuto después, Naismith redujo la distancia desde la línea de gol aprovechando una dejada de cabeza de Leighton Baines.

El tanto dio alas a un Everton que apretó de valiente, encerrando al Palace atrás. Como el ave Fénix que renace de sus cenizas, los toffees resucitaron cuando ya estaban prácticamente muertos. La remontada parecía ser cuestión de tiempo. Sin embargo, el Crystal Palace no se quiso dar por vencido, y volvió a aprovechar una ocasión aislada para reestablecer la ventaja de dos goles. Jerome se acomodó de primeras y con la pierna derecha un balón que golpeó posteriormente con la izquierda. El esférico, ajustado al poste izquierdo de Tim Howard, hizo inútil la estirada del norteamericano.

Jerome anota el tercero. | Foto: Premier League.

El tanto trastocó al Everton, cuyos jugadores deambularon por el césped en los minutos posteriores. Volver a Europa, y por la puerta grande además es un premio demasiado suculento como para dormirse en los laureles. Por ello, los de Liverpool volvieron a meterse en el partido y Mirallas logró mantener vivas las opciones de su equipo de rescatar algo positivo. 2-3 en el minuto 85. Goodison Park se vino arriba con el anuncio de los seis minutos de descuento que determinó André Marrinor. La ofensiva de los blues fue total. Incluso Mirallas tuvo una importante oportunidad de igualar el marcador, pero el belga no acertó a conectar el esférico en el último suspiro.

El Palace se lleva los tres puntos

Con esta victoria trabajada y con nombres propios como Speroni o Bolasie, el Crystal Palace suma ya 40 puntos y se coloca diez por encima de la zona de descenso. Tony Pulis ha dado alas a un equipo que parecía totalmente desahuciado antes de la llegada del galés. El Everton, por su parte, pierde la cuarta plaza en favor del Arsenal. El único punto que distancia a ambos equipos, sin embargo, garantiza una dura pugna por competir la próxima temporada en la Liga de Campeones.