Partido de contrastes en el Emirates. Contrastes desde antes de empezar el partido, incluso. El Arsenal llegaba a su primer compromiso liguero con la autoestima por las nubes después de vencer y convencer en la Community Shield ante el Manchester City. Todos sus jugadores a excepción de los que jugaron el Mundial, en las mejores condiciones y encima con el público a favor.

Por otro lado, el Crystal Palace visitaba el Emirates Stadium después de recibir el mayor jarro de agua fría de toda la temporada tras la marcha del banquillo de Tony Pulis, dejando al equipo absolutamente abandonado a falta de dos días del primer partido oficial de la nueva campaña. Los jugadores estaban contrariados pero tenían que afrontar el encuentro con la máxima profesionalidad. Keith Millen iniciaba esta Premier League 2014/2015 como entrenador del Crystal Palace.

El Arsenal, con la posesión por bandera

Como era de esperar, ambos entrenadores no sorprendieron y sacaron dos onces bastante reconocibles para sus respectivos hinchas. Wenger apostó por un mediocampo donde predomina el toque y la calidad de sus mejores hombres en esta demarcación a la espera de que Özil vuelva a estar en forma: Arteta, Wilshere, Cazorla y Ramsey. Además estaba por ver la gran atracción del partido: el debut de Alexis Sánchez con su nuevo equipo.

Por parte del Palace, Millen planteó un férreo sistema defensivo con un doble pivote formado por Ledley y Jedinak y con tres de los cuatro fichajes que ha realizado este verano como titulares: Hangeland en el eje de la zaga, Kelly en el lateral derecho y Fraizer Campbell como referencia arriba.

Durante los primeros minutos de encuentro, el partido siguió el guion establecido. Los locales amasando la posesión de un lado a otro y los visitantes bien cerrados atrás esperando su oportunidad a la contra. Sin embargo, ese claro dominio de los gunners no era finalizado con ocasiones de gol, ya que la defensa visitante repelía una y otra vez las acometidas locales. Tan solo un disparo de Wilshere en el 26' hizo estirarse y despertar de su adormilamiento a Speroni.

Dos jugadas de estrategia, dos goles

Conforme iban pasando los minutos del primer acto, el dominio del Arsenal se hacía más patente pero empezaba a dejar muchos huecos en la zaga, sobre todo debido a un inseguro Chambers en su debut en partido oficial en el Emirates Stadium. Esas inseguridades propiciaron la primera jugada de peligro del Palace, en el minuto 35, con un balón largo que a punto estuvo de cazar Campbell, el guardameta del Arsenal despejó fuera de su portería y cerca estuvo de causarle un disgusto, pero el balón se marchó a la esquina. Lo que nadie esperaba era que en ese mismo córner, un minuto después, los eagles se adelantaran en el marcador.

Un gran centro de Puncheon era rematado por el gigantón Hangeland en el primer palo y se colaba en la portería de Szczesny ante la pasividad de la defensa local. Sorpresón generalizado y el Palace que empezaba sembrar las dudas en el Emirates. El arsenal no cambió un ápice su estilo de juego y siguió tocando y tocando hasta llegar a la portería visitante. El Palace seguía bien asentado en el terreno de juego y al Arsenal le costaba hilvanar jugadas de peligro. Tanto es así que el gol local llegó en otra jugada de estrategia. Una falta frontal colgada por Alexis Sánchez a la frontal del área era rematada absolutamente solo por Koscielny, que con un gran cabezazo batía a Speroni y llevaba el partido al descanso con empate en el electrónico.

El Palace remó para morir en la orilla

El segundo acto comenzó como terminó el primero, con el Arsenal dominando en todas las facetas del juego y el Palace aguantando como podía un resultado que le sabía a gloria teniendo en cuenta las circunstancias en las que se encontraba el equipo. Los pupilos de Wenger siguieron cumpliendo a rajatabla el guion propuesto por su jefe y no dejaron de intentar conseguir el gol de la victoria. Arsene introdujo los tres cambios casi de manera consecutiva. Dio entrada a Monreal por Gibbs para aportar más llegada por esa banda, apostó por Giroud en lugar de Sanogo (desaparecido durante todo el encuentro) y decidió retirar a Wilshere en favor del habilidoso Oxlade-Chamberlain.

Las sustituciones tuvieron un efecto casi inmediato y de la mano de un omnipresente Ramsey y un inquieto Alexis, los gunners empezaban a apretar al Palace que veía como tenía el resultado idóneo al alcance de la mano. Lamentablemente para los intereses de los eagles, una absurda entrada de Puncheon fue determinante. El extremo inglés ya tenía una tarjeta amarilla y el árbitro no dudó en mostrarle la segunda, dejando a su equipo con un efectivo menos para defender el resultado y lograr la machada.

Dicho y hecho. Prácticamente en la acción siguiente, un centro de Oxlade colgado al área era peinado por Giroud, el esférico le quedaba franco a Debuchy que con un disparo seco hacía intervenir de manera espectacular a Speroni. A pesar de ello, el rechace del portero argentino quedó franco para Aaron Ramsey que, a puerta vacía, marcaba el gol que le daba los tres puntos a su equipo y desataba la alegría en el Emirates.

Sensaciones encontradas en un final de partido que confirmó a ambos equipos que tienen que mejorar mucho a lo largo de esta temporada si quieren lograr sus respectivos objetivos. Sin embargo, empezar con una victoria siempre te hace ver la vida de otra manera.

Tabla de puntuaciones

Arsenal (2) Crystal Palace (1)
Szczesny 6 Speroni 6
Debuchy 6 Kelly 5
Koscielny 7 Hangeland 7
Chambers 5 Dann 5
Gibbs 6 Ward 6
Arteta 6 Ledley 5
Ramsey 7 Jedinak 5
Wilshere 5 Puncheon 3
​ Cazorla 5 Chamakh 6
Sánchez 6 Bolasie 5
Sanogo 4 Campbell 5
Substitutes
Monreal 5 Delaney 5
Giroud 6 Gayle -
Oxlade-Chamberlain 5 O´Keefe -