Cuando parecía que todos los acuerdos se daban por finalizados en las oficinas de Selhurst Park, la directiva del Crystal Palace ha sorprendido con un movimiento que no entraba en las quinielas de los posibles refuerzos para el club en este último día de traspasos. 

Se trata de Kevin Doyle, ariete irlandés procedente del Wolverhampton, actualmente en la Championship, y que llega en calidad de cedido hasta el próximo mercado de traspasos, es decir, hasta enero de 2015. Tras la marcha de Murray cedido al Reading, el club londinense se puso manos a la obra para encontrar un sustituto en las últimas horas del mercado y ha logrado encontrarlo.

Doyle comenzó su carrera en dos clubes de su país natal, St Patrick's Athletic y Cork City, hasta que en junio de 2005 el Reading se fijó en él. Desde aquel momento se convirtió en el delantero principal del club, jugando para los royals durante cuatro temporadas, habiendo disputado 164 partidos y anotado 56 goles. En junio de 2009 puso rumbo al Wolverhampton por 6,5 millones de libras, aunque su etapa en el club no resultó lo satisfactoria que hubiera deseado ya que tuvo que ser testigo de dos descensos consecutivos de su club. 

Tras una breve cesión en el Queens Park Rangers en la que ayudó al club de Londres a volver a la máxima categoría del fútbol inglés, llega con la misma condición a Selhurst Park. De esta manera, Warnock cumple la promesa que hizo a su llegada al Palace, cuando afirmó que todavía quedan cuatro fichajes más. Dicho y hecho, ya que Zaha, Fryers, McArthur y ahora Doyle ya podrán estar a sus órdenes para el próximo compromiso del equipo.