Derbi de Merseyside. Por primera vez en 12 años el primero de la temporada se disputaba en Anfield. Tanto Liverpool y Everton llegaban a la cita en una situación comprometida tras un arranque de la temporada un tanto decepcionante en el que ninguno de los dos equipos ha logrado satisfacer las expectativas puestas en ellos, ni mantener el nivel mostrado en la temporada anterior.

Un Liverpool dominador desde el inicio

Rugía Anfield como en las grandes citas y es que el derbi del Mersey de cada temporada es una de las citas de mayor importancia por parte de ambos equipos. Liverpool, dispuesto a imponer su superioridad como local, inició el partido con rápidas transiciones que el Everton se vio obligado a cortar por la vía rápida, como se evidenció con la tarjeta amarilla que vio Barry en el primer minuto de juego.

Las primeras ocasiones no tardaron en llegar, y es que los reds iniciaron el partido con una intensidad, un velocidad y una presión que sobrepasó al Everton en los primeros minutos. De las botas de Sterling nació la primera para el Liverpool pero Howard inició su recital de paradas, que se alargaría por toda la primera mitad. Ritmo rápido pero con muchas trabas, se comprobó desde el inicio la gran rivalidad que existía sobre el césped, de manera que se reclamaron penaltis en ambas áreas en apenas diez minutos de juego.

Un Everton acomodándose en el campo

Con un Everton noqueado al que le duraba poco la posesión y apenas pisaba el campo rival el Liverpool se lanzó al ataque en busca de romper la igualdad. Ahí volvió a emerger la figura de Howard, deteniendo un gran lanzamiento de falta de Balotelli y realizando una gran intervención ante el cabezazo de Lovren en el córner posterior a la falta. El Liverpool no aprovechó su inercia positiva para adelantarse y el Everton, poco a poco, comenzó a sacudirse la presión y a tener mayor presencia ofensiva. La primera de los toffes la tuvo Lukaku ante un atento Mignolet. El belga fue una constante molestia para Alberto Moreno, con muchos problemas para parar al delantero en sus caídas a banda.

Tras un primer tramo de ida y vuelta, el partido se enfrió. La lesión de Mirallas dejó tocado al Everton y el Liverpool lo aprovechó para volver a atacar el área toffee. Las bandas del Liverpool comenzaron a activarse, con continuos desbordes de Sterling y las incorporaciones de Moreno y Manquillo. En última instancia, a los reds les faltó el remate final, pues los numerosos centros laterales no encontraron rematados y la frustración de Balotelli fue en aumento. Con la ausencia de Coleman el Everton cargó sus ofensivas en las incorporaciones de Baines, pero de la misma manera que en sus rivales, los centros laterales no encontraron rematador, sino una atenta defensa red.

La tendencia dominadora del Liverpool, en líneas generales, en la primera mitad, a punto estuvo de encontrar recompensa en una gran acción de Sterling, pero nuevamente intervino Howard con una meritoria intervención. Empate a cero al descanso y la sensación de que el Liverpool no logró aprovechar su superioridad frente a un Everton muy rezagado al que mantuvo en el partido Howard.

Gerrard marcó la diferencia

Tras la reanudación la tónica del partido fue sustancialmente distinta a la que se vio al inicio del encuentro. El Liverpool seguía buscando con mayor vehemencia la portería rival pero el Everton se mostró muy serio y comprometido en defensa, sin conceder ocasiones en esos minutos de tanteo. Entonces apareció el de casi siempre, Steven Gerrard, para marcar diferencias para el Liverpool. Falta en la frontal y el capitán que supera a la barrera y bate a Howard cuya estirada no fue suficiente para rechazar el balón.

El Liverpool encontró así recompensa a su superioridad y a su mayor búsqueda del gol. Apenas dos minutos después, Balotelli tuvo una ocasión clarísima para el 2-0 pero inexplicablemente su certero remate desde el área pequeña se marchó fuera después de golpear en el larguero. El Everton estaba fuera del partido. La capacidad de reacción de los toffees fue prácticamente inexistente y Mignolet no realizó ninguna intervención en el transcurso de la segunda mitad.

Liverpool controlador, Everton sin reacción

El partido llegaba a sus minutos finales con la sombre de la duda sobrevolando Anfield. El Liverpool, pese a la ventaja, seguía generando las ocasiones más claras pero demostró una carencia de gol preocupante personificada en la figuda de Balotelli, que erró una y otra vez todas sus opciones de ampliar la ventaja. Everton, pese a no disponer de ninguna ocasión clara para el empate, logró mantener la mínima desventaja en el marcador y llegar al descanso con la oportunidad de buscar una última opción a balón parado.

Jagielka condenó el perdón del Liverpool

Como si el más retorcido de los guionistas hubiera escrito el final del partido, en el tiempo de descuento el Everton encontró el empate. Un balón rechazado por la defensa del Liverpool quedó botando en la frontal del área y Phil Jagielka, el capitán del Everton, conectó un potentísimo disparo de primeras y con el balón botando que fue dirigido directamente a la escuadra de Mignolet. El Everton encontró precio a su constancia en el encuentro, aprovechando una de sus únicas opciones de gol. Por su fuera poco para los decepcionados aficionados del Liverpool el Everton estuvo muy cerca de llevarse la victoria en la última acción del partido cuando una falta lateral botada por Baines fue rematada por Barry, que mandó el disparo al lateral de la red.

El primer derbi de Merseyside de la temporada se salda con empate. Un partido con mucha rivalidad en el que Liverpool y Everton siempre deparan un carrusel de emociones y de espectáculo futbolístico. El Everton, logra un gran premio con el empate in extremis y, aunque en la clasificación no supone un gran paso, es muy positivo para los de Martínez regresar de Anfield (donde no ganan desde hace 15 años) con un empate. Para el Liverpool, sin embargo, no deja tanto positivo este empate, especialmente por la forma en la que pierden los de Rodgers la oportunidad de sumar una victoria para despegar en este complicado arranque de temporada.

Puntuaciones VAVEL

Liverpool (1) Everton (1)
Mignolet 5 Howard 6
Manquillo 5 Hibbert (72') 4
Skrtel 5 Jagielka 7
Lovren 6 Stones 6
Moreno 6 Baines 6
Gerrard 7 Besic (80') 5
Henderson 6 Barry 4
Lallana 6 McCarthy 6
Markovic (60') 5 Naismith 6
Sterling 7 Mirallas (30') 4
Balotelli (87') 5 Lukaku 6
Coutinho (60') 5 McGeady (30') 5
Lambert (87') - Browning (72') 5
Eto'o (80') -