Tarde de fútbol en Anfield de nuevo, que miraba con más ganas ya al próximo partido de Champions ante el Basilea, olvidando también que el Sunderland aterrizaba en Anfield con la necesidad de puntuar para alejarse de las posiciones del descenso. Por su parte los locales buscaban los tres puntos con la esperanza de avanzar en la tabla tras su horrible comienzo esta temporada, dejando a años luz a ese Liverpool de la temporada pasada que peleaba por la Premier.

El Liverpool iba a comenzar este partido con la ausencia de su capitán, Steven Gerrard, al que Brendan Rodgers dejó en el banquillo para partir con Leiva, Henderson y Lallana en el centro del campo. Por su parte el Sunderland también sorprendía dejando en el banco a Cattermole, haciendo pensar por un momento a la afición que buscaría los tres puntos, buscando un fútbol más asociativo y subiendo al ataque.

Una siesta de 90 minutos

El partido comenzaría augurando ya lo que sería el transcurso total de éste. El Sunderland se tapó bajo un 4-5-1 con la linea del centro del campo encajonada en su área sin muchas ganas de buscar la contra, mientras que el Liverpool lo intentaba sin mucho orden ni precisión, notando así ya desde los primeros segundos la falta de Steven Gerrard. Por su parte el Sunderland se agarraba a las pocas opciones de gol que Altidore aportaba arriba, descolgado en el centro del campo emparejado con Kolo Touré, que no le dejó al delantero visitante ni un solo centímetro de espacio.

Durante la primera parte el partido vivió su momento más lento, con un centro del campo local incapaz de generar peligro, especialmente Lallana, que se veía perdido en el centro del campo tratando de buscar su espacio entre Coutinho, Henderson y Sterling. Por su parte el mediapunta brasileño parecía vivir uno de sus momentos particulares de desamor en el campo, con pocas ganas de jugar e incapaz de

El partido siguió así, sin intención de cambiar, durante el restante de minutos. Sólo Wickham hizo temblar el empate sobre la puerta de Mignolet al realizar dos remates cercanos a la portería que tampoco hicieron sudar al belga. Posteriormente Jordi Gómez lo intentaría con un zarpazo desde fuera del área que obligó a intervenir a Mignolet, que la sacó a córner. Por su parte fue Rickie Lambert el que se acercó a la puerta rival con un gran remate de cabeza que rozó el palo derecho de Pantilimon.

Sin noticias del orden táctico

El centro del campo del Liverpool parecía vivir un constante apocalipsis al ver como Lucas Leiva tenía que lidiar con el constante movimiento de sus compañeros en la medular. Jordan Henderson decidía, cumpliendo un guión casi habitual, vivir sin rumbo por el campo buscando crear espacios que sin embargo nunca llegaban, Lallana por su parte adelantaba su posición escorándose en la banda derecha, donde pierde parte de su calidad bajo presión de Rodgers, dando así más libertad a Coutinho, que sin embargo decidía misteriosamente moverse a la banda izquierda, pisando así a Sterling, habitante de dicha banda. Con la aglomeración de ambos jugadores en la esquina del área visitante, las subidas de Alberto Moreno se veían inútiles, y generaban un vació desolador en el centro del campo, perdiendo multitud de segundas jugadas al no disponer de jugadores en dicha demarcación, obligando a Rickie Lambert a combatir en solitario con dos o tres jugadores que no le facilitaban lo más mínimo las cosas.

Con la salida de Steven Gerrard la situación se asentó tímidamente, pero tarde. Henderson recuperó su posición de centrocampista, acompañando a un Gerrard que volvía a jugar en la posición de centrocampista ofensivo, dejando atrás su rol de pivote. En el Sunderland sucedía más de lo mismo, y es que Adam Johnson o Wickham se preguntaban cual sería su lugar en el campo tras ver como tenían que retrasar su posición hasta su propio área, dejándolos muy alejados de sus zonas de peligro. Por su parte Jordi Gómez intentaba crear algo de fútbol acompañado de Larsson, sin embargo sus intentos eran ínutiles, puesto que su equipo parecía ver con muy buenos ojos sacar un punto de Anfield.

Con el final del partido, el Liverpool dejó escapar tres puntos fundamentales para subir posiciones en la tabla ante un rival aparentemente fácil al que dejó escapar. Por su parte el Sunderland se llevó a casa un punto que lo aleja un poco del abismo del descenso. El Liverpool por tanto, encarará noveno su próximo enfrentamiento en la Premier ante el Manchester United, mientras que el Sunderland se presenta ante el West Ham con 2 victorias y 9 empates, cifras extrañas las del conjunto del uruguayo Poyet.

Liverpool (0) Sunderland (0)
Mignolet 6 Pantilimon 6
Johnson 5 Vergini 6
Skrtel 6 O'Shea 7
K.Touré 7 Brown 6
A.Moreno 6 Reveillere 5
Leiva 6 Bridcutt 6
Henderson 5 Johnson (79') 4
Lallana (66') 4 Gomez 6
Coutinho (78') 5 Larsson (70') 5
Sterling 7 Wickham 7
Lambert 6 Altidore (70) 6
Suplentes
Gerrard (66') 6 Alvarez (70') 5
Markovic (78') 5 Cattermole (70') 6
- - Buckley (79') 5