Konchesky ejecuta la sinfonía de Nugent en el King Power Stadium

Inicio lento con pocas triangulaciones entre dos equipos nada confiados con su fútbol y que esperaban el movimiento del rival para ver que estrategia escoger, como si de una partida de damas se tratara. El Leicester dio el primer paso y pasados los primeros cinco minutos de encuentro, comenzó a controlar el esférico y a poner el ritmo del partido con un Nugent participativo.

El propio futbolista tuvo la primera ocasión del partido, no obstante, su intento de volea fue taponado con una ajustada plancha de Hutton que evitó el lanzamiento entre los tres palos. Las internadas por el carril izquierdo aumentaban, por lo que el trabajo de Hutton también. Okore estuvo sobresaliente todo el partido apoyando a sus compañeros en las tareas defensivas. Knockaert probó fortuna desde la frontal con un disparo blando que atrapó sin consecuencias el guardameta villano.

El Aston Villa intentaba equilibrar el dominio con las triangulaciones entre Joe Cole y Westwood, activos durante todo el primer tiempo. Ambos tuvieron los primeros acercamientos al área de Hammer, pero siempre bien defendidas por la zaga de los foxes. Sin embargo, el peligro lo seguía creando el conjunto local y, una vez más, Nugent que no llegó a un buen centro de Albrighton por milímetros.

La intensidad del equipo local decayó y le permitió que el Aston Villa comenzara a jugar a su manera. Balones a Benteke y, éste con espacios a intentar sorprender al rival. No obstante, la línea defensiva estuvo atenta durante el partido y en más de una ocasión logró dejar al delantero belga en fuera de juego cuando se quedaba solo ante Hamer. El Leicester, más replegado, buscaba una oportunidad para salir y la encontró. Salida vertiginosa que terminó en los pies de Nugent, se preparó el cuerpo y disparo con fuerza un tiro que se fue cerca del poste. El King Power Stadium cantaba el gol, era la más clara hasta el momento.

Konchesky hace justicia

En los últimos minutos de encuentro, el Leicester arriesgó y adelantó sus líneas, algo compactas hasta el momento. Paul Lambert no tardó en responder e incrustó a Cleverley como tercer central para aguantar las embestidas hasta que el árbitro decretase el final del primer tiempo. A pesar de ello, los hombres de Nigel Pearson encontraron una solución, los balones aéreos. Ulloa tuvo el gol con un remate fácil tras un rechace, pero envío el balón por encima del larguero. El delantero argentino no se creía el fallo que acababa de realizar.

El gol llegaría en el descuento, en una jugada iniciada por un saque de banda que tras varios choques, le llegó a Konchesky que fusiló desde el área grande con un disparo ante el que poco pudo hacer Guzan.

El Leicester City en busca de la sentencia

Más allá de esperar y mantener la ventaja en el luminoso, el Leicester salió con una marcha más en el segundo tiempo con el único objetivo de conseguir el segundo tanto y, por tanto, la sentencia. Matthew James dio el primer avisó al rematar con potencia un saque de esquina, que obligó a Guzan a lucirse para detener el esférico. El Aston Villa respondió con una jugada típica del conjunto de Birmingham: pase de Westwood y disparo de Benteke.

Las internadas seguían y Albrighton entró en el área tras deshacerse de varios defensores y su tiro, ajustado al palo izquierdo, fue repelido por el guardameta estadounidense en una nueva exhibición de reflejos. Tras un inicio eléctrico, el partido entró en un tramo hechizado por el sueño de morfeo. Sin ocasiones, ni llegadas, ni indicios que permitieran creer que habría un cambio en el marcador. El carrusel de sustituciones no ayudó al espectáculo, ya que pararon el momento en que el Aston Villa empezaba a despertar.

Sin embargo, el final del partido iba a desencadenar un espectáculo inesperado de expulsiones. En primer lugar para James tras conducta antideportiva, que hizo explotar a las gradas. Al minuto sería Clark veía la segunda cartulina amarilla por una entrada infantil sabiendo del riesgo que conllevaba. Nueva baja en la línea defensiva para Paul Lambert para la próxima jornada. Con ello concluyó un encuentro en que el Leicester supo mantener la concentración y dominar en los momentos necesarios para dejar en casa los tres puntos.

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