Sunderland y Fulham llegaban a la 4ª ronda de la FA Cup inmersos en una crisis de juego que les ha llevado a ambos conjuntos a ocupar una posición en liga con la que ninguno de sus respectivos seguidores está contento. Una victoria supondría reivindicarse y seguir avanzando en una de las competiciones más bonitas del mundo, mientras que una derrota dejaría muy tocado al equipo con la moral por los suelos. La tensión estaba garantizada.

Primera parte de tanteo

Muy poco que destacar en un primer tiempo lento y con ambos equipos esperando a que el rival tomara la iniciativa. El sistema de Poyet fue por segundo partido consecutivo, después del de liga, un 1-3-5-2, intentando consolidar y confirmar que es el sistema que le viene bien a sus hombres, mientras que el Fulham, salió con su ya típico 1-4-4-2, en este caso, con Dembelé y Bryan Ruiz en la delantera. Fueron unos primeros 45 minutos de intercambio de posesión y de escasas ocasiones en el que los visitantes intentaban combinar jugadas en ataque, pero la fluidez en el juego no les dejaba concluir las ocasiones. El Sunderland se conformaba con los mínimos arreones que emprendía Defoe junto con el sueco Sebastian Larsson por banda.

Fofana era el que llevaba el peso del equipo visitante, que veía como se encontraba solo a la hora de iniciar jugada, que terminaba con el balón en posesión de los black cats. Una primera mitad en la que el miedo estuvo más presente que la creatividad y las ganas de ponerse por delante en el marcador.

Segunda mitad para los 'black cats'

Muy diferente fueron los segundos 45 minutos del choque, donde el Sunderland se hizo con el control del partido desde el inicio, y empezaba a crear ocasiones de verdadero peligro, sin obtener premio alguno. Las inclusiones de Connor Wickham por Fletcher y de Buckley por Billy Jones dieron un toque de aire fresco al conjunto de Poyet, que empezaba a carburar cada vez mejor. Nada más salir, Buckley hacía estragos en la defensa ganando en varias jugadas las espaldas de Bodurov y Stafylidis, mientras que Wickham se dedicaba a hacer desmarques y llevarse consigo a la defensa para crear oportunidades desde segunda línea.

En el minuto 65, Rodwell era expulsado tras ver doble amonestación, y dejaba al Sunderland con diez jugadores, a lo que el técnico del Fulham respondió metiendo a Rodallega para ganar músculo en ataque y aprovechar alguna posible oportunidad para adelantarse en el luminoso. Fue el delantero el que tuvo la oportunidad más clara de todo el partido en el minuto 85 al estrellar el balón en el poste de Mannone, dando un susto a todos los seguidores franjirrojos. Tras pasarse los tres minutos de añadido, el pitido final dio lugar a que la eliminatoria tenga que decidirse en el estadio del Fulham con el replay.

Ni la superioridad numérica hizo que los londinenses consiguieran dejar fuera de la competición a un Sunderland que fue mejor en la segunda mitad pero que finalmente no pudo tampoco lograr el gol decisivo.

Puntuaciones VAVEL FA Cup

SUNDERLAND (0) FULHAM (0)

Mannone 6 Bettinelli 7
Billy Jones (74') 6 Grimmer 6
Van Aanholt 6 Hutchinson 6
O'Shea 5 Bodurov 6
Coates 5 Stafylidis 5
Vergini 5 Tunnicliffe 5
Bridcutt 5 Fofana (74') 7
Larsson 7 Christensen 6
(65') Rodwell 4 Bryan Ruiz 5
Fletcher (66') 5 Woodrow (74') 5
Defoe 7 Dembelé (60') 6
Suplentes
Wickham (66') 6 McCormack (60') 5
Buckley (74') 6 Rodallega (74') 6
Kacaniklic (74') 5