A priori, el Tottenham era favorito para llegar a Wembley y enfrentarse al Chelsea de Mourinho, que consiguió ayer el pase al vencer al Liverpool por 1-0 con gol de Ivanovic, pero ante los spurs estaba el Sheffield United, que ha venido haciendo un gran papel en Capital One Cup, mereciéndose sobradamente estar disputando el pase a la gran final. El 1-0 de la ida para el Tottenham daba una mínima ventaja a los de Pochettino, que tendrían que defender el resultado en campo rival.

Monólogo 'spur'

Bramall Lane se vistió de gala para intentar escribir una página gloriosa en la historia de su club. Pronto comenzaba el Tottenham a generar peligro en el área rival, con un Kane y un Lamela muy activos desde el primer minuto. Walker y Dembelé también comenzaban a un muy buen ritmo de juego y conseguían conectar con la punta de ataque, haciendo estragos en la defensa del Sheffield, que comenzó el partido esperando atrás, con vistas a los contragolpes conducidos por Doyle y Scougall, sin llegar a generar casi ningún peligro en el área de Vorm. El choque estaba siendo un monólogo del Tottenham, y el gol se veía venir, y así fue, cuando Eriksen disparó magistralmente una falta enviando el balón a la escuadra de Howard, dejando clavado al meta del Sheffield sin que este pudiera hacer nada para evitar el gol.

Tras el espectacular tanto del mediocentro spur, el Tottenham seguía a lo suyo dominando totalmente el partido, llegando al descanso con 0-1 en el marcador y con un 2-0 en la eliminatoria global. Todo parecía controlado por el conjunto de Mauricio Pochettino.

Eriksen celebrando gol | Imagen: Tottenham

El Sheffield dio el susto, pero no lo consiguió

Tras le descanso, el Tottenham seguía la misma tónica de la primera mitad, haciéndose de nuevo con la posesión de balón en los primeros compases de los segundos 45 minutos. Entre Dembelé y Kane continuaban creando las ocasiones más claras de su equipo para poner más tierra de por medio en la eliminatoria, mientras que los locales, las pocas ocasiones que iban teniendo eran obra de Baxter en el mediocampo subiendo el balón para conectar con McNulty y que este resolviera, pero el delantero no conseguía llegar a ningún balón ante la desesperación tanto de él como de su equipo.

Ambos técnicos empezaban a mover el banquillo, los locales para intentar recortar distancias y los visitantes para mantener o aumentarlas, dando entrada a Paulinho en el Tottenham y a Reed en el Sheffield. Antes de ser sustituido Lamela por Towsend, era el que lideraba casi todos las jugadas de su equipo en ataque, permitiendo que su equipo elaborara buenas conexiones de mitad de campo hacia adelante.

En apenas tres minutos, Adams ponía por delante en el marcador al Sheffield con un doblete y volvía a meter de lleno a los locales en la eliminatoria, pero la alegría sólo le duraría ocho minutos, cuando en el minuto 88, de nuevo Eriksen, metía el gol definitivo que igualaba el encuentro y decidía el global, dejando la eliminatoria en un 3-2 final para los spurs.

Imagen: Tottenham

Wembley espera a los de Pochettino

Con esta victoria ante el Sheffield United, el Tottenham consigue el acceso a la tan ansiada final de la Capital One Cup, donde se tendrá que ver las caras con el Chelsea de José Mourinho, que será el último obstáculo para poder alzar el trofeo hasta lo más alto. Una final que se prevee muy intensa y muy disputada entre dos equipos que saben muy bien a lo que juegan.