Mónaco y Arsenal se dan cita en una de las eliminatorias más igualadas de la ronda de octavos de final de la UEFA Champions League. El conjunto inglés recibe en su feudo al equipo monegasco para la disputa del encuentro de ida con la conciencia de la dificultad del choque. "No sé si somo favoritos, pero para mí el partido está 50/50. Cada vez que hemos estado allí hemos ganado con muchas dificultades, siempre con una diferencia de un gol", explicó Arsène Wenger.

La trayectoria del Arsenal en las últimas ediciones de la competición europea se ha visto truncada con rápidez en igualados cruces. El técnico francés espera que su equipo sea capaz de dar un paso al frente: "Lo que ha ocurrido en los últimos cuatro años es que hemos quedado emparejados dos veces con los ganadores de la competición. Hemos quedado eliminados, sí, pero por muy poco. Queremos seguir en la pelea, incluso si es por muy poco".

Arséne Wenger achacó los malos resultados en las últimas ediciones de la Champions debido al mal arranque de su equipo en los partidos clave: "En los últimos cuatro años siempre acabamos frustrados porque en tres ocasiones encajamos un gol en casa en los primeros 30 minutos. Eso nos noqueó. Hemos aprendido de nuestros errores y lo podremos demostrar el miércoles". 

Especial reencuentro para Wenger

El encuentro contra el Mónaco es de especial valor emocional para el técnico francés, que inició su carrera como entrenador en el club monegasco. "Fue mi primera oportunidad de estar en un club grande, yo era muy joven y siempre estás agradecido por ello. Estoy feliz de que el Mónaco esté de vuelta en el máximo nivel, pero ahora mismo solo estoy concentrado en buscar la clasificación para cuartos de final frente a un buen equipo", comentó Arséne Wenger.